El actor español Martiño Rivas, conocido por interpretar a Carlos Cifuentes en la serie española de Netflix Las Chicas del Cable, se encuentra de visita en Costa Rica para presentar la obra de teatro La Jauría.
Esta es una puesta en escena que se presentará en el Teatro Popular Melico Salazar este viernes y que relata una historia basada en hechos reales sobre el ataque sexual que recibió una joven de 18 años en las Fiestas de San Fermín, en Navarra, España por cinco hombres autodenominados “La Manada”. Ya no hay entradas para la función de este viernes.
La obra cuenta con transcripciones dadas por los acusados y la víctima a lo largo del juicio en el que se condenó a los jóvenes en el 2016.
En entrevista con Viva, el también actor de El Internado comentó lo que que ha representado esta obra en su carrera, además, habló de sus proyectos a futuro, su visita a Costa Rica y de Las Chicas del Cable.
¿Qué es lo más retador de hacer una obra basada en hechos reales?
Muchas veces te llega el guion de algo y dices ‘esta frase no me gusta’, o ‘mi personaje nunca diría esto’ y aquí esto no existe, o sea, esto se dijo así, tú sabes que tienes que amoldarte a esto y tienes que ser muy fiel a la hora de comunicarlo, porque si no estaría traicionando el espíritu de la función.
Los cinco de ‘La manada’ tienden un poco a eclipsar al resto y eso a mí me molesta, me molesta que ellos se adueñen de la función o que cobren mucha mayor relevancia, porque aquí la pretensión es ilustrar todo un procedimiento legal que se da desde que se conoce la denuncia, hasta que se dictamina la sentencia, que el espectador transite por todo ese proceso que vive la victima, cuando se ve obligada a revivir algo tan doloroso y tan traumático. Entonces, intentar arrojar luz de todo el proceso y como la víctima tiene que vivir todo esto.
¿Qué ha significado para usted participar en esta obra?
Me ha cambiado a nivel personal, en el sentido de que ahora veo donde antes no veía. Ha encendido una luz y ha plantado una semilla y me ha hecho más consciente de las injusticias y de las situaciones de incomodidad con las que las mujeres tienen que lidiar día a día. Y creo, de alguna manera, que los hombres tenemos la responsabilidad de corregir eso como comunidad. La violencia desgraciadamente es unidireccional en este aspecto, siempre se da del hombre a la mujer, entonces creo que tenemos una cuenta pendiente y quiero contribuir a que eso cambie.
¿En que momento de su carrera artística puede decir que se encuentra?
En un momento muy bueno: estoy en Costa Rica participando en una obra en la que creo, en la que me divierto, con la que he aprendido; y la verdad es que cuando estaba en la escuela de teatro nunca pensé que llegaría a estar en Latinoamérica en un teatro con 1.000 personas viéndome, es un momento muy bello y muy bonito.
Ha hecho cine, teatro televisión ¿con cuál se identifica más?
Al margen del momento de la actuación, me interesa más lo que se genera en el teatro porque el actor está en el centro de rotación, en el epicentro del acto. Cuando uno hace una serie o una película, es el terreno de los técnicos, ellos son los que están desde el principio de la jornada hasta el final y uno está como de visita. En cambio, en el teatro hay un sentimiento de comunidad, ahí se genera un sentimiento de familia.
En una película o una serie cuando terminas cada quien se va a su casa; en el teatro, se generan vínculos mucho más fuertes y me interesa más el teatro como modo de vida.
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¿Qué proyectos se vienen para el próximo año?
Estamos con La Jauría todo el 2020 y creo que eso me va a tener muy ocupado. También estoy con Netflix en Las Chicas del Cable, que habrá otra temporada.
¿Qué ha significado Las chicas del Cable en su carrera?
Me hacen trajes a medida de tres piezas ¡qué más puedo pedir!
A nivel de exhibición te das cuenta de que llegas a muchos países, pero tomas conciencia de eso cuando sales de España, porque nuestra dinámica de trabajo es igual que en otra serie. Cuando yo hacía la serie El internado en España hubo un momento de popularidad que yo sí notaba que intimidaba y asustaba un poco, porque llegabas a cuatro millones de personas todas las semanas, entonces a nivel de reconocimiento en la calle era mucho más latente y más constante, ahora es mucho más relajado.
Pero ¿qué pasa? Resulta que llego a Costa Rica y soy famoso y la gente me conoce; pero a nivel nacional en mi día a día, antes era más fuerte de lo que es ahora.
¿Cómo ha sido interpretar a Carlos Cifuentes?
Es un personaje que ha cambiado mucho a lo largo de las temporadas y quizá es por eso que es tan interesante y a la vez ese es el reto. Dentro de esa constante transformación a la que se ve obligado por las constantes circunstancias, seguir buscando puntos de unión y un mismo trazado para que siga siendo a la propuesta inicial que se hizo en su momento que era un joven muy irresponsable, mujeriego, despreocupado y superficial. Y luego, cuando se enamora, se vuelve mucho más comprometido y responsable. Es decir, es un personaje que está constantemente manteniendo el equilibrio cuando todo alrededor se desmorona.
¿Qué proyectos le faltan por realizar?
Antes tenía muchas pretensiones o aspiraciones de estar haciendo cosas en determinado momento. Pero ahora he apartado un poco eso y simplemente intento jugar con las cartas que me reparten y estoy esperando la siguiente mano.
¿Qué es lo que más disfruta de su carrera?
Cada vez me interesa más el proceso de creación, lo que va desde la primera lectura del guion a cuando ya lo pones en pie, cuando se levanta el telón, o cuando estás en el primer día de rodaje. Ese proceso de ir creando, trazando o intentar visualizar el personaje.
¿Cómo ha sido su etapa como papá?
Estoy disfrutándola mucho, estoy aprendiendo: me ha enseñado a sonreír, antes no me reía mucho como me río ahora.
¿Se considera una persona seria?
No, creo que a lo mejor soy un poco tímido.
¿Qué le ha parecido Costa Rica?
He estado muy poquitos días y solamente en San José, pero con solo ver el paisaje y la bruma sobre las montaña, me parece simplemente mágico. Te ayuda a fantasear de algún modo y te imaginas qué habrá más allá y la vegetación, el relieve de las montañas, es decir, es un país en donde la naturaleza y la biodiversidad es muy rica y es una pena no poder quedarnos aquí dos semanas por lo menos. Me gustaría vacacionar acá.