Cuando piensa en quién podría ser el artista más escuchado de Costa Rica, dependiendo de sus gustos y rango etario, probablemente le lleguen a la mente nombres como Malpaís, Debi Nova, Toledo y hasta Los Hicsos.
Sea quien sea la persona o agrupación en la que haya pensado, lo más seguro es que Krezus esté fuera de su radar. Este nombre, que puede resultar difícil de pronunciar, es el seudónimo artístico de un productor musical costarricense de 19 años, al que escuchan millones de personas.
Quizá usted no lo identifique porque su música es electrónica, consumida mayormente fuera de nuestras fronteras y debido a que guarda anonimato. Aunque es impreciso decir que es el costarricense más escuchado en plataformas digitales, pues perfectamente podría existir otro caso anónimo como el suyo, lo cierto es que sus números son impresionantes.
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La cantidad de reproducciones que acumula está astronómicamente por encima de los artistas de nuestro terruño a los que reconocemos fácilmente. Por dar un ejemplo, Debi Nova tiene poco más de 260.000 oyentes mensuales en Spotify, mientras que actualmente a Krezus lo oyen 3.1 millones de personas al mes.
Haga la prueba: busque a su artista tico favorito en Spotify y cerciórese por usted mismo de que sus números serán, ‘tirando por lo bajo’, 10 veces menos que los de este joven.
De momento, el productor afirma sentirse muy cómodo en el anonimato, sin enfrentar las incomodidades de la exposición mediática. De esta manera, disfruta libremente de su pasión y de los réditos económicos que empieza a darle su carrera.
“Pude cambiar el teléfono, que es mi herramienta de trabajo y ya estaba viejo. Estoy yendo a poquitos, porque me gusta ahorrar. Me dio mucha ilusión comprarme mi cama, porque tenía una pequeña. Mi madre dice que duermo como un rey (risas). Estoy feliz porque también he podido comprarle a mi familia cositas que ellos quieren y aportar con cosas de la casa”, expresó emocionado.
“Dependiendo de cómo me vaya y lo que gane con esto, buscaré otras motivaciones. Creo que lo que más me gustaría es viajar y conocer otros países”, sentenció.
Krezus, fenómeno en Tik Tok y Spotify
Krezus es un gran exponente del llamado phonk brasileño, un género electrónico con influencia del funk carioca (música urbana popular de Río de Janeiro). En este tipo de canciones se utilizan voces que pronuncian o cantan una determinada frase o palabra de manera repetitiva; de modo que las variaciones obedecen solo al apartado musical.
Dicho sea de paso, esto le ha valido ser viral en Brasil, donde se ubica la mayor parte de sus oyentes mundiales. Además, sus temas son utilizados por una cantidad incontable de usuarios en Tik Tok, especialmente para los llamados edits, que son videos en los que se toman fragmentos de futbolistas, actores, películas, series y demás elementos populares, realizando una edición que busca transmitir epicidad.
Justamente, Krezus, quien ya tenía algunos años produciendo música por gusto, descubrió el phonk brasileño gracias a la red social.
De ser un oyente más, Krezus pasó a crear, y ahora sus canciones más famosas como Vai me bota o Uh Vei Vei se han convertido en tendencia, provocando que los usuarios de las redes sociales realicen coreografías cortas usándolas. Uno de estos fue la estrella del FC Barcelona, Lamine Yamal, quien se mostró bailando con sus amigos al ritmo del pegadizo tema del tico.
Sumado al futbolista, las bandas de k-pop Enhyphen y Ateez, y la creadora de contenido estadounidense Sophie Rain, han subido videos a Tik Tok con la música del costarricense.
Desde que Krezus comenzó a subir sus piezas a las plataformas digitales, a finales de 2022, pagó la membresía de una distribuidora, mediante la cual se puede monetizar las reproducciones. Este tipo de sistemas pagan una cantidad de dinero por cada 1.000 escuchas que acumule una canción, y el monto varía dependiendo de si es en Youtube, Spotify, Apple Music, entre otras aplicaciones.
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“Pagué más o menos ¢20.000. Fue un pequeño riesgo porque en ese entonces no contaba con buena economía que digamos, ni tenía una canción con muchas reproducciones. Fue lanzarse, no sabía si iba a ir bien o no, pero lo hice. La compré y aquí ando (risa)”, relató.
A los 5 meses de empezar vio las primeras ganancias, pero estas no eran estables ni mucho menos cuantiosas. Recién comenzó a obtener una remuneración considerable hasta el año pasado, cuando publicó la mayoría de sus éxitos que son escuchados por millones.
Pero no todo es color de rosa, ya que en su corta pero exitosa carrera ha tenido que aprender de los procesos de monetización, y en medio de esta curva de aprendizaje, incluso, ha resultado estafado. Según cuenta, varias empresas internacionales relacionadas con la industria musical se acercaron a él y le ofrecieron adquirir sus canciones; sin embargo, acabaron apropiándose de las ganancias y sin cumplir los contratos.
Un ejemplo de las varias estafas sufridas por él, se dio cuando firmó por primera vez un contrato. Una de estas empresas estadounidenses lo contactó por redes sociales, le ofreció una cantidad de dinero por su canción y recibir un determinado porcentaje de las regalías que esta generara.
Para convencerlo, le dieron de adelanto la mitad del pago inicial, pero esto fue toda la remuneración obtenida. A los meses dejaron de contestarle y, actualmente, Krezus no tiene ninguna posibilidad de cobrar por esa canción.
Ahora, el artista tico está firmado con el sello 17 Media, quien lo ha apoyado en la distribución de la música y, para su fortuna, ha cumplido con sus compromisos legales.
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¿Cómo empezó a hacer música?
Krezus es hijo de padres guatemaltecos y llegó a Costa Rica cuando apenas cumplía 1 año de edad. En la escuela, sus padres le regalaron una tablet, en la que con sus audífonos se sumía por horas escuchando a Martin Garrix, David Guetta y otros artistas de electrónica, que justo en esa época tenían un gran auge.
“Yo me sentía bien con la música, veía cómo a través de ella se expresan sentimientos y emociones, y yo quería hacer lo mismo”, comentó el artista, quien recién se graduó de bachillerato en 2022.
Ya en el primer año de colegio descubrió los programas de producción musical y comenzó a jugar con melodías y percusiones, así como a investigar en tutoriales los “trucos” necesarios para hacer canciones. No tenía computadora, pero se topó con la sorpresa de que podía hacerlo desde el celular en una aplicación que, aunque era de pago, pirateó.
Las primeras canciones que realizó estaban inspiradas de la electrónica, pero realmente pertenecían a una vertiente fusionada con el hip hop llamada Lo-Fi. Esta variante consiste en música instrumental con carácter relajante, la cual es muy utilizada como fondo sonoro para la concentración.
En 2022 se graduó de bachillerato y ya con varios años de travesear la producción musical, decidió que esa sería su apuesta, pues no encontraba una carrera universitaria que lo llamara de verdad. En ese momento ya tenía algunas canciones publicadas, pero ninguna había tenido gran repercusión.
Aquel era un momento algo convulso, pues además de finalizar la secundaria venía de terminar un romance adolescente. Como suele pasar con los artistas, transformó el vértigo y el revoltijo en inspiración.
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Ya había pasado por varios nombres artísticos, como Kaoz, pero decidió que esta era una nueva etapa, un momento para tomarse la música en serio y buscarse un lugar en la industria. Entonces, se lanzó a esta aventura con el seudónimo de Krezus.
Sus padres, quienes tienen un negocio propio y son chefs, le dieron la total confianza, sin saber en qué iba a parar el proyecto de vida de su hijo. De acuerdo con el productor, sus papás siempre han sido muy abiertos a que él y sus hermanos tomen, al igual que ellos, caminos no convencionales.
Gracias a ese empujón, Krezus tuvo la libertad de centrarse en su música, la cual tiene bailando a Lamine Yamal y a otro par de millones de personas por el mundo.