El 17 de mayo, Antonella Rocuzzo y Sofía Balbi, parejas de las estrellas del FC Barcelona, Lionel Messi y Luis Suárez, respectivamente, inauguraron su primera tienda de calzado en la avenida Diagonal de Barcelona –una de las zonas más prestigiosas de la ciudad–.
Interesadas en impulsar un negocio y en la cercanía con la moda y el pretigio de la marca argentina Sarkany, ambas se asociaron y le hablaron (por WhatsApp) al diseñador y representante de Sarkany, que cuenta con 100 años de historia, para tener una franquicia en España. Así nació Roccbal 109, nombre de la empresa que fusiona los apellidos de las socias y los números que usan en sus camisa Messi (10) y Suárez (9).
En la tienda se podrán encontrar todo tipo de calzado: altos, de plataforma, flats, sneakers, botas y accesorios. Los precios de los productos oscilan entre los ¢57.000 y los ¢2.500.000.
En común. Antonella, de 29 años, y Sofía, de 28, además de ser las parejas de brillantes futbolistas, son madres de dos niños cada una. Thiago y Mateo son los pequeños de Messi y Roccuzzo, y Delfina y Benjamín son los retoños de Suárez y Balbi. Entre asados y mate, ambas familias se volvieron muy unidas, tanto que son vecinos del mismo vecindario: Castelldefels.
Todavía hay algo más que Anto y Sofi comparten: las dos han protagonizado dulces historias de amor juvenil que se consolidó en la adultez.
En el caso de los argentinos, Messi y Antonella fueron novios desde la infancia. Se separaron por un tiempo, pero antes del mundial de Sudáfrica en el 2010 se confirmó que la pareja estaba establecida, 14 años después de que el pequeño Lio se flechara de la hija menor de los dueños de una cadena de supermercados en barrio el Rosario, reseñó Infobae.
En el 2012 se supo que la familia crecería, cuando Messi celebró con un balón dentro de su camisa, El astro anunciaba que estaban esperando a su hijo Thiago. A finales del 2014, con una fotografía de Thiago besando el vientre de su madre, se dio a conocer que nacería Mateo.
Anto y Lio se casarán el próximo 30 de junio, seis días después del cumpleaños del futbolista. La pareja viajará a su natal Argentina para concretar la unión, Antonella usará zapatos diseñados especialmente para su boda por Sarkany.
Amor que salva. En la historia de Luis y Sofía hay mucho amor. Cuando Suárez tenía 15 años y sobre su espalda carencias económicas y la frustración por ver a sus padres separados, se refugió en el alcohol. Pero un día conoció a Sofía y se dio cuenta de que su vida podía tener sentido, aunque la niña viviera a 24 kilómetros de su casa.
"Era un niño muy inquieto. En la escuela no tenía buena conducta. En mi casa faltaba de todo. Nunca me faltó un plato de comida, pero no me avergüenzo de decir que con 11, 12 o 13 años me iba a cuidar autos con mi abuelo para llevar algo de plata a mi casa. Sofía sabe lo que me ayudó y por el camino por el que me ha llevado. Me hizo ver que yo no era un burro, sólo que no tenía ganas de hacer las cosas. Me animaba a hacer los deberes. Empezamos a salir cuando yo tenía 15 años y ella 13. Por ella hice cosas increíbles como ir caminando de Montevideo a Solymar (Uruguay)", 24 kilómetros andando", reseña El Mundo de España.
Luis siempre jugó futbol, pero un día todo a su alrededor cambió. Los papás de Sofía tuvieron que mudarse a Barcelona, España para sobreponerse a una crisis económica que atravesaba la familia. Al verse lejos de su amada y salvadora –como la ha llamado siempre– decidió que tenía que irse a Europa y ficharse con un equipo.
Según El Mundo de España, Luis lo consiguió y lo contrataron en el Groningen de Holanda, por supuesto que aceptó, Holanda lo acercaba más a Sofía. Con pocos días de haber firmado su contrato, Luis le propuso a Sofía que se fuera a vivir con él y la chica aceptó: tenía 16 años y sus únicas pertenencias eran las que vestía. La pareja no se ha separado desde entonces.