Bryan Mora dejó de lado, solo por unos días, las olas de playa Hermosa de Jacó, para viajar a San José a luchar por otro de sus sueños: ser Míster Costa Rica 2014.
Los meses de fuerte preparación que tuvo y saber manejar los nervios ayudaron a que Mora alcanzara, el jueves pasado, el título del hombre más guapo del país.
Este joven, de 24 años, practica surf desde hace ocho años, estudia Derecho, trabaja en una agencia de bienes raíces y modela. “No sé con qué tiempo hago tantas cosas”, comentó a Viva .
En una entrevista con este medio, el Míster Costa Rica habló sobre sus gustos y aprovechó para recalcar que no todos los que participan en certámenes de belleza masculinos son gais.
¿Desde cuándo le gusta el modelaje?
Desde pequeño, siempre me gustó la idea de ser modelo y salir en una película de acción. Conforme crecí, solo me quedé con ese deseo de modelar .
¿Cuándo fue que modeló por primera vez?
Mi madre me llevó a una audición de bebés y me aceptaron; claro, eso no lo recuerdo. El primero del cual tengo memoria fue a los 10 años; era un anuncio de salsa de tomate. De ahí en adelante, me hacen fotos para revistas y he hecho como cuatro comerciales.
”Me gusta mucho y aunque nunca me había metido de lleno en esto, siempre me atraía la idea de llegar a otro nivel en el modelaje”.
Todo fue gracias a su mamá, entonces.
Mi mamá es mi motor incondicional. A ella le gusta mucho el modelaje; entonces, me metió en esto.
¿Ella era modelo?
Sí; yo siempre veía las fotos de ella cuando era joven; me inspiró a perseguir mis sueños. Creo que ya lo traigo en la sangre.
Era la primera vez que concursaba en una competencia nacional. ¿Qué se lleva de la experiencia?
Muchas cosas; fue una aventura nueva, que me encantó. Se vive muchos estrés y hay que ser muy disciplinado, pero todo valió la pena.
¿Cómo era la relación fuera del escenario?
Nadie se conocía; había muchos nervios, nadie sabía las reglas del certamen. Cuando eso se superó, nos empezamos a tener mucha confianza; la amistad que hicimos fue muy bonita.
¿No existió rivalidad?
No, esa competencia que existe en un concurso femenino no existió en este. Siempre prevaleció el compañerismo; cada uno tenía su plan de ganar, pero no nos íbamos a serruchar el piso. Siempre nos apoyamos mucho.
¿Cuál era el rival más fuerte para usted?
Nunca subestimé a ninguno; siempre tuve presente que todos eran rivales fuertes. Di lo mejor de mí para sobresalir y lo logré.
¿Quién fue el compañero que siempre estuvo a su lado?
Hemerson Quirós. Él me daba mucho apoyo. Yo le conté que era primerizo en esto y, como él participaba por segunda vez, me tendió la mano.
¿Cuál es el plan que tiene ahora que ganó Míster Costa Rica?
No tengo claro en lo que voy a trabajar; ahora solo sé que debo de representar al país en el concurso en Oriente Medio; es lo único que sé. Por mi parte, tengo pensado buscar la forma para que el modelaje masculino sea tomado más en serio.
”También aprovecharé cuanta oportunidad venga para mí y mi carrera”.
¿Qué premio le dieron?
A pesar del costoso monto de inscripción ($800), no me dieron nada; solo la cinta. Bueno, también el pasaje de avión a Oriente Medio, pero nada más. No sé si me irán a pagar el hospedaje, comida, entre otras cosas, cuando esté allá.
¿Qué sabe del concurso Míster Internacional?
Bueno, sé muchas cosas. Me han dicho que el más fuerte es Venezuela; vamos a ver qué pasa.
¿Cuáles virtudes lo pueden hacer ganar ese título?
Mi personalidad, humildad, transparencia y madurez.
Los concursos de belleza masculinos están plagados de estereotipos…
La gente puede pensar lo que quiera. No solo personas homosexuales participan en esto, también participan personas con ganas de triunfar y salir adelante.
”Un certamen de esta magnitud es para representar al hombre costarricense y eso es justamente lo que iré a hacer: representaré al país muy varonilmente”.
La edición de este año de Míster Costa Rica recibió duras críticas, entre ellas que los concursantes no cumplían con los ‘estándares normales’ de belleza.
El solo ser una figura de belleza no lo es todo, la inteligencia tiene que ver mucho, así que ese tipo de críticas sean por el lado constructivas.