A Daniella Álvarez no la vence nada. Sigue igual de sonriente y cada día se nota más compenetrada con la prótesis de su pierna izquierda.
Desde que le fue amputada su extremidad, la Señorita Colombia 2011 no ha dejado de hacer ejercicio, ha disfrutado de las bellezas del mar y posado en la playa en sus más recientes vacaciones.
Además, Álvarez se conecta constantemente con sus seguidores y aparece muy bella en fotos que se toma en solitario o con su familia.
Pero lo que más llama la atención es que Álvarez no se detiene en su afán de recuperarse. Ahora, la ex reina de belleza publicó en un video en que muestra la forma en que corre con su prótesis y hace ejercicio en una caminadora.
En las imágenes, publicadas en Instagram, Álvarez está acompañada de las personas encargadas de su rehabilitación.
Muy segura y firme, Álvarez se desplaza en la caminadora, mostrando una vez más su gran espíritu. Hace una semanas, incluso, se le vio buceando y pocos días después de la operación hasta bailó merengue con su hermano.
A mediados de año, a la exreina tuvieron que amputarle parte de su pierna izquierda debido a una isquemia que sufrió tras una operación que le realizaron en marzo.
Desde el principio tuvo una gran actitud y fortaleza, y de paso ha sido ejemplo para muchas personas, también amputadas, pues siempre les envía mensajes de apoyo.
En el mar.
Alguna vez Daniella Álvarez pensó que no iba a poder volver al mar, pero dichosamente se equivocó.
Hace varios meses, siempre con una sonrisa, Álvarez publicó una imagen en la red social Instagram, donde se le ve posando en un muelle y usando un biquini verde que resaltó su escultural figura.
El mensaje que escribió junto a las imágenes la exreina de belleza fue: “¡¡Aquí estoy!! Lo soñaba desde que estaba en la UCI. Solo quería que llegara este día en el que estaría disfrutando de la brisa, el mar, donde me olvidaría de todas las dificultades. Este es el lugar donde nunca me falta nada”.
Luego, Álvarez fue aún más intrépida y se dispuso a explorar el fondo del mar. Se colocó el traje de buceo y se tiró al agua.
“Una pierna hizo por dos todo el tiempo mientras buceaba. A veces perdía el equilibrio por no tener igual de distribuido mi peso, PERO (después del pero siempre viene lo más importante) lo disfruté igual o más que artes”, expresó la mujer en sus redes sociales.
La lucha de una guerrera.
La amputación sufrida por Álvarez fue la culminación de un calvario que se inició en junio del 2020. Como ella misma lo ha reseñado en su cuenta de Instagram, todo comenzó cuando se detectó una pequeña masa del tamaño de una moneda en la zona del abdomen.
De inmediato acudió a cita médica y se decidió someterla a una cirugía que en principio se presupuestó como “sencilla” pero que no resultó como tal porque el “bulto” estaba adherido a la aorta y ese mismo día tuvieron que intervenirla de nuevo para realizarle una reconstrucción en la arteria, la que también se complicó.
Una tercera cirugía, que pretendía realizarle un injerto había resultado exitoso, pero terminó sufriendo una isquemia (detención o disminución de la circulación de la sangre) que le bloqueó el flujo sanguíneo “desde la parte de mi ombligo hacia abajo hasta mis pies”, dijo Álvarez en un video en el que aparece con la pierna izquierda vendada, y que forma parte de la seguidilla de posts en los que Daniela, pese a su cada vez más grave situación, siguió compartiendo con sus seguidores”.
En una cuarta cirugía se trató de resolver su problema de circulación, pero una vez más, el resultado no fue el esperado y su pie izquierdo estaba seriamente comprometido. Fue entonces cuando tomó la dura decisión de someterse a una amputación para poder utilizar una prótesis con la que tendrá mucha más autonomía que con su pie, que había dejado de ser “funcional”, según explicó a sus seguidores antes de someterse a la última operación, el pasado sábado 13 de junio.
A esas alturas, los mensajes de ánimo y apoyo de millones de seguidores, incluso testimonios de quienes habían pasado (o estaban viviendo) trances similares, se contaban por miles.
Álvarez, antes de ingresar al quirófano escribió: “Hoy te doy gracias Señor, Virgencita, familia y a todos ustedes por estar siempre conmigo. Mi fe, mi tranquilidad y optimismo se lo debo a Dios. He vivido momentos muy difíciles, experimentado los dolores más fuertes que puedan imaginar, ya solo me falta un paso. Vendrán meses difíciles, pero estoy segura que viene lo mejor para mi vida. Oren por mí (...). Yo tomé la decisión entre tener un pie no funcional a tener una opción de una prótesis que me deje volver a bailar champeta, que me deje volver a bailar bachata, que me deje poder correr, montar bicicleta y todas las cosas que me gustan, decidí tener esta cirugía”, dijo la barranquillera de 32 años, soltera y sin hijos, pero quien ha sido apoyada en todo este trance por su exnovio, el actor Lenard Vanderaa.
Y es que, a juzgar por sus publicaciones, ella se nutrió férreamente de aquella red de contención y, a solo unas horas tras despertarse de su quinta intervención, compartió la primera fotografía, ya sin su extremidad, en la que posa para la cámara acompañada de su familia y con una amplia sonrisa.
“Quiero compartir con ustedes mi nueva versión. Amo mi cuerpo igual que antes. Estoy feliz de estar aquí en este mundo para superar todos los retos que vienen en mi nueva vida. Sé que de la mano de Dios todo lo lograré”, afirmó en Instagram.
“Pies, para qué los quiero, si tengo alas para volar. ¡Vamos para adelante!”, añadió con un optimismo desbordado.