Aún cuando es altamente difícil producir espacios televisivos con estos aguaceros pandémicos, los responsables del renovado programa de talentos Nace una Estrella, de Canal 7, decidieron apostar por los cambios con todo y riesgos.
Al toro por los cuernos, aunque ya no hay ni toros… ni cuernos
Aparte de implementar las medidas sanitarias en un auditorio sin público y otros detalles, la plana mayor de Teletica Formatos -encabezada por Paula Picado y Vivian Peraza-, ha estudiado todos los límites de tan compleja factura.
También han tenido muy presente la existencia de las redes sociales y todas las plataformas de entretenimiento del universo inmediato a veces tan ingrato. Lejos de competir con esta realidad mediática, más bien han hecho todo lo posible por adaptar sus contenidos al gusto de los cibernautas y tratar de ganárselos como televidentes.
Aún así, sin arrancar, ya empezaron las críticas y el escozor de más de uno, como suele ocurrir en los últimos tiempos: darle vuelta al marcador será el tremendo reto para la producción.
Parte de esto último ha sido la estratégicamente variopinta selección de los 15 participantes -elegidos entre casi 2.000 aspirantes- de esta temporada cuyo estreno está previsto para el 2 de mayo. Hay cinco niños de 10 años, entre ellos una pequeña de Uvita, allá en el bonito cantón de Osa, pianista y políglota; entre los adultos hay una mesera, un cantante callejero, un agente de ventas y el experimentado cantante Leonardo Jara.
Hablando de los riesgos y componentes novedosos, atrevidos y polémicos, destaca participación de Alexánder Arce, de 28 años, maquillista, creador digital y transformista de fama internacional, algo casi impensable en otros tiempos en el canal de La Sabana. Arce había audicionado en tres temporadas anteriores, pero la cuarta fue la vencida.
Alexánder es conocido en redes como Zorán, quien cumple con los requisitos mediáticos y de liderazgo de estos tiempos. Sus números son orgánicos, nada de trucos y, aunque poco -o nada- sabemos de él en los medios locales, tiene 142 mil seguidores en Instagran y 968.862 en Facebook. Además, circula en esos vericuetos electrónicos una entrevista suya en Al Rojo Vivo; ojo al dato: estuvo en el programa de Los 40 principales de México donde se transformó en Betty La Fea y eso le generó -al video correspondiente- 49 millones de reproducciones.
Pongámosle cuidado a este artista, podría dar una sorpresa pues, como es sabido, ahora no se trata solo de que cante bien o mal, sino de quien sorprenda, convenza y -lo más importante- se enrede bien en las redes.
No perdamos de vista a Betty la Fea, porque después de todo, la suerte de la fea, la bonita se la desea. Raro que este muchacho no haya despuntado antes en el ámbito del espectáculo nacional, pues al menos a nosotros nos impresionó su transformación, como se aprecia en el video.
Pero, así como Zorán, supimos que entre tantísimos candidatos los 15 elegidos están ahí por algo. En todo caso, como ocurre con este tipo de concursos, ya es ganancia reunir a miles de familias al frente del televisor los domingos en la noche: todo un plus en estos tiempos.
Como si se tratara de un flashback, así vivimos la entrada de María Teresa Rodríguez a Giros, pues nos transportó hasta el 2018, cuando la entonces Miss Costa Rica Verónica González coronó a “Tere” como la soberana de la belleza tica.
En esta ocasión Verónica no entregó corona, sino la silla que cientos de señoras siguen todos los días, y al parecer María Teresa calzó como anillo al dedo para el puesto en Repretel.
El debut de Rodríguez fue el lunes pasado y se lució con un traje de flores muy sobrio, pero elegante. Además notamos a una mujer más madura, empoderada y como si estuviera en su casa.
A estos Topos nos encantó la forma en que se incorporó a la revista matutina del 6, pues la directora de Giros, Yamileth Guido, le “arrancó” de un tirón cualquier resabio de “Miss” y la convirtió en segundos en una presentadora para “doñitas” que les llevará información útil hasta las casas. A Tere le tocó una muy buena maestra y, por lo visto, llegó bien ubicada sobre el rol que se requiere desempeñe en el espacio.
Es la primera vez que vimos que se le da tanta “pelota” a la entrada de una presentadora en Giros: buen golpe para enganchar o sostener a la codiciada audiencia. Estaremos atentos al aterrizaje de Tere, ya cuando pasen sus primeras semanas de acomodo.
A quien sí le vamos a jalar las orejas es a Ítalo Marenco: muchacho, usted ya no está en Combate, sabemos que tiene los dotes para ser divertido y lo logra fácil, pero ojo, no hay que sobresalir con bromas como esconderse detrás de una puerta y pegar “alaridos”; recordemos que desde hace un tiempo la producción de Giros viene dándole un tono más serio al matutino. Eso sí, hay que admitir que no todo el mundo piensa como nosotros, pues la broma que Ítalo le hizo a la recién llegada Tere fue sumamente celebrada en redes y, antes de ponernos en ‘modus’ amargo, a nosotros también nos dio mucha risa. Además, la mismísima reina de los talk shows diurnos, Ellen DeGeneres, es conocida por justamente hacer lo mismo y pegarle sustos divertidísimos a sus invitados.
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Y mientras en Canal 6 le daban la bienvenida por todo lo alto a María Teresa, en Canal 8 le encaramaban unas extensiones de Rapunzel a Verónica González, un detallazo con muy buen tino, pues se veía igual pero diferente, una buena jugada para marcar el cambio. Doble puntaje porque en realidad se le veían preciosas (¿qué no se le ve bien a Verónica González?).
Vero fue anunciada como la nueva ficha de Multimedios, algo que prácticamente ya sabíamos. Lo lindo fue ya verla en la pantalla del canal ataviada con un vestido blanco que lucía como griega en su palacio.
Douglas Sánchez, director del canal 8, para no variar se pellizcó y la invitó de una vez a Íntimo, donde en un adelanto pudimos ver las conmovedoras palabras de Verónica acerca de su divorcio y sobre la muerte de su mejor amiga.
Entre pasillos se dice que Verónica conformará un equipo en Divas con Viviana Calderón, Maureen Salguero y Glenda Peraza, bajo la dirección de Alexis Jiménez (¡cuidado se va alguna diva porque ya nos emocionamos otra vez!)
En síntesis ¡bien por lo que viene y lo que va! Lo importante es que las dos reinas ahora tienen trabajito al lado de grandes impulsores.
Ahora que mencionamos a Glenda Peraza, en las últimas semanas hemos leído como en sus redes sociales algunos (as) impresentables la critican por su supuesto aumento de peso. Nosotros solo la vemos más bella, pero siempre genuina y encantadora, y esperamos que los señalamientos del tóxico mundillo de las redes sociales no le quite un ápice de paz. Conociéndola, así será.
Y estos Topos celebramos cómo a poco a poco muchos emprendedores y propietarios de negocios se levantan, tras el duro golpe económico que generó de la pandemia.
Las meras meras de Boutique Valesky, Ileana Valverde y su hija, Priscilla Qualls, conocidas asesoras de moda, tuvieron que montarse un estudio para hacer fotos y prestar los vestidos de su boutique; así le torcieron el brazo a los momentos más duros de esta pandemia: en la tienda había maquillista, cámaras y quién quisiera la fotico de graduación ahí se la hacía con el vestido lindísimo.
Pero, Priscilla y su mamá poco a poco va levantando su negocio: ya pudieron volver a abrir y patrocinar de nuevo a rostros emblemáticos de la tienda, como Patricia Figueroa, quien lleva 15 años usando todas las prendas que Qualls le selecciona (por algo la Barbie Emperatriz es de las mujeres más elegantes de la mañana, siempre atinada).
Priscilla es la colaboradora más antigua (no vieja) que tiene Giros, pertenece al elenco original del programa, es periodista, diseñadora, pero sobre todo una mujer de armas tomar, herencia, a no dudarlo, de su madre.
Como si ya la lucha contra las consecuencias económicas de la covid-19 no fueran suficiente, en estos días Priscilla sorprendió a sus muchos seguidores en redes cuando contó que ella y toda la familia (doña Ileana y su esposo, Priscilla y el suyo) dieron positivo al coronavirus y juntos atravesaron todo el período de cuarentena, del que salieron bien librados, salvo porque a los hombres de la familia fue a quienes les pegaron un poco más duro los síntomas.
Muy buena nota que Priscila contara con gran naturalidad y sin temor a los estigmas la experiencia que tuvieron que pasar y superar, tener covid siempre va a ser de cuidado, aunque la cacería de brujas que se decantó en los inicios contra los contagiados ya quedó en el pasado. Éxitos a ambas, que ahora hasta realizan servicio express para llevar sus prendas y su asesoría hasta las casas de sus clientas. Reinvención a todo motor, se llama eso.
Hará dos o tres domingos que nos fuimos a disfrutar de las bellezas de Manuel Antonio, en Quepos, nos fuimos a comer rico y en aquel ambientazo detectamos un rostro conocido, sentado en solitario con un buen pescado y una fría cerveza. Era el periodista Gustavo López, mirando hacia el horizonte cuando ya el atardecer empezaba a ponerse dorado.
Nosotros de “chepitos” nos ubicamos estratégicamente para ver en qué momento le llegaba compañía, pero pasaron los minutos y después una y dos horas López seguía ahí, íngrimo pero muy a gusto con su soledad y con los diversos platillos que le fueron llevando las muchachas que atendían el restaurante. Total al final -con buena distancia, eso sí- terminaron conversando con él y en una pura risotada. Alcanzamos a escuchar cómo le preguntaban sobre las famosas anécdotas que ha protagonizado en las canchas durante los últimos años: la de Kendall Waston, la de la luna y Everardo Herrera y más recientemente, el bailecito con Marcel Hernández.
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Y bueno, al final, no nos quedamos sin saludarlo, así el periodista deportivo nos contó que ahora tiene un poco más de tiempo y apenas puede agarra el carro y toma camino a donde su intuición lo lleve. Le encanta desconectarse y también hacer esos rides en solitario, como un detox de chineazón en solitario. Pero qué va, no nos las hace el famoso Tavo, ¡pronto averiguaremos cómo anda ese corazón!
¡Un año a Cachete! Hablando de gente empunchada... el fin de semana de marzo del 2020, en que se ordenó el cierre total de bares y restaurantes a raíz de la pandemia, el periodista Luis Carlos Monge grabó su primer episodio de ¡A Cachete!, el hoy conocido programa de entrevistas del comunicador. En ese entonces la idea era hacerlo semanalmente en La Cantina del Reportero, propiedad de amigos y colegas periodistas de Canal 7.
Sin embargo, los cierres y todo lo que vino con la cuarentena obligaron al periodista a innovar sobre la marcha. Era eso, o echar para atrás en el proyecto que siempre fue su sueño. Fue así como se acomodó en la sala de la casa, convencido de que lo más importante para el televidente es el contenido. Semana a semana, ¡A Cachete! ha logrado mostrar esa faceta más real y a menudo menos conocida de algunas de las caras más familiares del país.
La exministra de Salud, María Luisa Ávila; Mauricio “Chunche” Montero; Melissa Mora y Édgar Silva han pasado por el set de ¡A Cachete! y se han apuntado a participar en las “excéntricas” dinámicas de Monge. El espacio, que según sabemos es de los que goza de mayor audiencia en Canal 8, también nos permitió descubrir una faceta más relajada y entretenida del luchador reportero. Un año al aire significa que algo se ha hecho bien, pues hoy más que nunca cuesta pegar un proyecto en tele. Felicidades al equipo de producción y ojalá les queden muchos programas más.