Un hombre corrió para tocar el ataúd de la reina Isabel II y fue derribado por los guardias de seguridad. Los hechos ocurrieron la noche del viernes, en Westminster Hall, donde reposa el cuerpo de la monarca antes del funeral, programado para el lunes.
El sujeto, cuya identidad se desconoce, hizo fila por 14 horas para poder entrar al salón. Imágenes difundidas en redes sociales muestran que el hombre, al estar en frente de el ataúd, empujó a una niña de 7 años y corrió hacia los restos de la monarca, logró tocar el féretro, pero en segundos fue detenido. Según la Policía, el hombre “fue arrestado bajo la Ley de Orden Público y fue puesto bajo custodia”.
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Por su parte, un portavoz del Parlamento dijo: “Estamos al tanto de un incidente en Westminster Hall, en el que un miembro del público salió de la cola y se dirigió al féretro. Ahora han sido retirados de la sala y la cola se reinició con una interrupción mínima”.
En declaraciones a MailOnline, Jon Williams, un civil que se formó detrás del sujeto antes de que se desarrollara el incidente, aseguró que el hombre no habló con nadie en la fila.
“Una señora gritó mientras sucedía que era bastante desconcertante. Aunque lo detuvieron y la gente mantuvo la calma y siguió adelante”, comentó otro testigo.
Minutos antes del disturbio, el rey Carlos III y sus hermanos entraron al salón para rendir un homenaje a su madre.