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Para Laura Rodríguez cada etapa de su vida es un nuevo reto: de adolescente estudió y recibió clases de actuación, canto y baile; en sus años 20 se dedicó a ejercer su carrera como periodista; a los 30 decidió dedicarse por completo a su familia; y ahora, recién entrando a sus 40, lucha por abrirse un espacio en Hollywood.
En el 2019 la expresentadora de Telenoticias -apoyada por su esposo, Bryan Radinsky-, tomó la decisión de hacer maletas e irse con él y la hija de ambos -Valentina, de 9 años-, a vivir a Los Ángeles, California. Confiesa que fue muy difícil abandonar su tierra, su familia y sus amigos; sin embargo, era la única opción que tenía si quería perseguir su sueño de ser actriz.
“Esto fue un plan de vida. Así como cuando uno va haciendo sus planes para ir a la universidad, para ir a trabajar, yo siempre vi esto en mi futuro y la vida me presentó, gracias a Dios, a un compañero que apoyó mis planes. Desde el primer momento él me dijo: ‘Ok, vamos a hacerlo, pero antes nos vamos a organizar bien’”, relata la comunicadora quien hace ocho años renunció a Teletica.
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Desde que llegó a Estados Unidos han pasado dos años, dos años en los que ha aprendido a hablar mejor el idioma inglés, a manejar en carreteras de seis carriles y a moverse por una gran ciudad. Pero también han sido dos años en los que ha aprendido a ser más humilde, paciente y perseverante, pues hacer una carrera en el medio artístico no ha sido para nada fácil. Sin embargo, poco a poco, para ella han aparecido pequeñas oportunidades que le han permitido dar sus primeros pasos dentro de la industria.
La comunicadora, quien ahora se hace llamar Laura Radinsky, habló con Viva desde su casa en Los Ángeles, un lugar que afirma le permite sentirse en paz, armonía y con la energía positiva para salir adelante cada día.
-¿Cómo ha sido esta nueva etapa en su vida?
-Ha sido una experiencia que me ha permitido crecer muchísimo. Me ha hecho una persona más humilde, me ha hecho aprender todos los días, a poner todo en las manos de Dios, porque a pesar de las cosas tan difíciles que el mundo está pasando, siento que en el último año, en mi caso, las cosas han ido acomodándose en el lugar donde yo esperaba que se acomodaran.
“Yo llegué aquí hace dos años y antes de venirme para Estados Unidos estaba viviendo en la playa, era madre y esposa a tiempo completo. Iba a programas como Intrusos o La Roncha de invitada, pero estaba muy desconectada del medio en comparación a como estuve los 10 años que estuve en canal 7 y los cinco que estuve en VM Latino.
“Pero aunque fue hace mucho tiempo, para mí son recuerdos muy bonitos que llevo en mi corazón y fue una etapa muy grande de aprendizajes. Me siento muy agradecida con esa experiencia tan buena porque ahorita me está permitiendo ir creciendo un poquito más”.
-¿Por qué Hollywood en específico?
-Cuando yo tenía 15 años estaba en un grupo de chicas que se llamaba Eclipse Latino y nos preparaban en canto, baile y actuación todos los días, pero yo dejé esa etapa porque entré a VM Latino a los 18 y empecé a hacer televisión. Sin embargo, yo siempre pensaba que yo era una actriz y que actuaba como periodista, entonces siempre tuve un llamado en el corazón de venirme para Los Ángeles para tratar de hacer carrera en Hollywood.
-¿Cómo ha sido el camino en Hollywood?
-Me vine y al poco tiempo apareció la pandemia, por lo que hasta diciembre del 2020 obtuve mi permiso para poder trabajar... es decir, ha sido un proceso muy largo. Hasta diciembre me empecé a mover sola, sin manager, sin contratos y sin nada; yo lo único que estoy haciendo es llevar documentos, presentarme, o enviar correos presentándome.
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“Y en estos pocos meses ya se me ha presentado la oportunidad para participar de extra en una película, acabo de terminar de grabar dos comerciales y lo que he hecho ha sido porque he ido tocando puertas y he aprendido a que cuando me equivoco pido humildemente disculpas y a seguir adelante. Yo creo que es un camino de muchos retos porque es otro idioma, extrañas a los tuyos, hay que acostumbrarse al rechazo también y a no tomarse las cosas personalmente y seguir adelante.
“Creo que es un camino difícil, que no es para todos, un camino en el que hay que tener mucha paciencia, tener realmente las ganas en el corazón y la mejor disposición para cada proyecto. No ha sido fácil, es un camino para gente valiente”.
-¿Han habido personas que la han tratado de desalentar?
-A todos en la vida nos pasa que, cuando tenemos un sueño, una meta o cuando queremos lograr algo, van a haber voces que siempre nos van a decir: ‘usted no lo va lograr’, o ‘usted no es suficiente’, o ‘usted ya quemó todos los cartuchos’, o cualquier cosa, pero esas son las perspectivas de los demás, ellos están viéndote a través de sus experiencias y de lo que puedan pensar de sí mismos. Yo creo que hay que cerrar los oídos y pedirle mucho a Dios que le siga manteniendo vivo el deseo y el anhelo de cumplir las metas con humildad, con mucha educación, con mucha paz en el corazón, pero alejándote siempre del ruido que te pueda alejar de tu meta.
“Hay mucha gente que cree que yo me quiero venir a convertir en la próxima Angelina Jolie y así no funciona; hay que trabajar, aprender todos los días de esto. En mi caso, creo que ese llamado siempre estuvo y la gente que me conoce de toda la vida sabe que yo decía que en algún momento quería estar aquí”.
-¿La han rechazado en proyectos?
-En este pequeño y corto camino hasta ahora...sí, sí han habido rechazos. Hubo un proyecto que me gustó mucho porque era para interpretar a un agente del FBI y no hubo respuesta. Yo estaba muy emocionada porque ya había pasado una ronda, ya me habían hecho entrevistas y cuando mandé el casting no me llamaron. Pero me fui muy agradecida, dije ‘muchas gracias’ porque uno también va aprendiendo, uno no sabe si el día de mañana, o en unos cinco años, esa persona va a querer trabajar con usted en otro proyecto.
-¿Por qué decidió cambiarse el apellido?
-Es parte de esto, yo no quería, pero sinceramente mi nombre Laura Rodríguez estaba bastante ocupado acá por muchas otras personas, entonces decidí cambiar el apellido y pues me ha ido bien. Además, aquí es muy normal que cuando uno se casa lleve el apellido de su esposo. Pero honestamente me ha costado mucho y a veces me encuentro diciéndome ‘Laura Rodríguez’.
-Me decía que ha sido muy difícil este proceso, pero imagino que, de cierta forma, también ha sido gratificante...
-Sí, hay una parte de mí que no se hubiese perdonado el no haberlo intentado, una parte de mí no hubiese sido feliz, no se hubiese sentido realizada. Yo estoy pidiendo al menos una oportunidad y me siento muy feliz de darle ese ejemplo a mi hija.
“Además, me siento muy feliz de regalarle esto a la Laura Rodríguez de siete años que siempre soñó esto; a la Laura Rodríguez de Telenoticias que estuvo haciendo su trabajo como periodista por tanto tiempo, y a mi esposo, que me ha apoyado. Y aquí voy a estar hasta donde Dios me dé fuerzas.
“Esto es un llamado del corazón que todos tenemos independientemente del negocio. Es eso que cuando vemos dentro de nosotros mismos lo encontramos; y yo, desde que tengo uso de razón, he tenido ese deseo, esta llama y ese anhelo en el alma”.
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Actualmente, Laura Rodríguez es parte de las 100 mujeres en Estados Unidos que aspiran a ser portada de la afamada revista Maxim y las votaciones abren el 20 de abril. En ese sentido, lo único que la aspirante a actriz le pide a los costarricenses es que voten por ella, para estar cada vez más cerca de su sueño.
