Coronarse como Miss Costa Rica era uno de sus mayores sueños y, aunque buscó convertirlo en realidad hace dos años, fue hasta este 2016 cuando la vida le concedió su deseo.
La alajuelense Carolina Rodríguez fue electa el viernes como la nueva soberana de la belleza costarricense, un título que logró, según afirma, con esfuerzo, disciplina y perseverancia, y con el cual espera actuar en favor del medio ambiente, de las poblaciones vulnerables y de la salud.
Asímismo, la mujer más hermosa del país se describe como una chica auténtica, amante de los deportes –practica la natación desde niña– y que encuentra en el ejercicio la válvula de escape del estrés que le provocan algunas situaciones cotidianas.
Carolina proviene de una familia dedicada al comercio de mariscos. Es hija de una ama de casa y de un empresario, y la menor de dos hermanos. Ella tiene 27 años.
“Mi familia significa todo para mí: son mi apoyo y mi sostén. Todo lo que soy se lo debo a ellos, que me han enseñado el valor de trabajar por las cosas que quiero y de esforzarme por lograrlo. Mi mamá es un ángel que Dios puso en mi camino, es mi mejor amiga en todo momento; y mi papá es un hombre ejemplar y trabajador que siempre se ha sacrificado por nosotros”, dice, con los ojos húmedos, la profesora y traductora de Inglés.
El apoyo de su familia y de su novio de hace 10 años, Juan Pablo Porras, fue crucial en el exitoso paso que tuvo Rodríguez por la edición 2016 de este certamen, que más que premiar su belleza física y su inteligencia, significó un reconocimiento a la constancia y al deseo de hacer bien las cosas.
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Rodríguez es humilde al reconocer que la corona y banda de la que se apropió hace dos día no fue una tarea fácil. La trabajadora de la transnacional IBM compitió al lado de otras nueve mujeres, todas talentosas, bellas y rivales.
“Nunca subestimé el poder ni la capacidad de ninguna de mis compañeras, porque si algo he aprendido de la vida es no juzgar lo que alguien puede hacer o lo que es capaz de hacer; por eso todas, por igual, fueron mi competencia”, sentenció durante una entrevista que concedió a Viva este sábado, en la que hizo un repaso por su vida personal, la gala de coronación del viernes pasado y de su proyección a futuro.
Esta es parte de la conversación con la Miss Costa Rica 2016.
Sin contar el Miss Costa Rica, ¿cuál ha sido su mayor logro en la vida?
Mi etapa de nadadora. Fui sumamente disciplinada y entregada. Fui campeona nacional en diferentes categorías y en Juegos Nacionales. También fui campeona internacional.
Ganó la corona en una segunda participación. ¿Tiene un sabor especial el triunfo?
Sabe mejor porque en este segundo intento tuve más competencia, tuve más expectativa por medio de las personas porque se dijo que yo era una de las favoritas, entonces siempre esperaron más de mí. Representé lo que quería representar, a esa mujer integral... Por eso creo que el triunfo fue bien merecido. Soy imparable y seguiré luchando por lo que quiero en mi vida.
¿Por qué el jurado se fijó en usted y no en Elena Correa o Andrea Castro, las otras finalistas?
Eso es difícil porque no sé qué estaba pensando el jurado o qué buscaba. Hubo un empate, incluso. Las tres somos muy diferentes, pero creo que en mí pudieron conocer diferentes aspectos de mi vida, que creo que pudieron haberles llamado la atención.
Se “trabó” en la respuesta decisiva... ¿Pensó que por eso se le reducían las opciones de ganar?
Cuando dijeron que había un empate, mi mente quedó en blanco. Era algo que no me esperaba. Me puse nerviosa y se me vinieron todos los sentimientos encima y se me hizo un colocho a nivel mental. Estaba asustada y abrumada en ese momento y lo que me dije fue: ‘Respire, Carolina; empezó bien, termine bien’... y eso fue lo que hice. Nunca pensé que iba a ser derrotada.
¿Qué opina de los abucheos que recibió Elena Correa de parte de un público que estaba volcado a su favor?
Honestamente, agradezco que quisieran apoyarme y que estuvieran de mi parte porque eso significa mucho para mí; sin embargo, no comparto que en ese momento a ella la pusieron en la línea del fuego, porque yo sé lo es estar ahí.
”Esa noche no fue perfecta para mí, tuve mis errores al igual que Elena; yo me pongo en los zapatos de ella. Para mí no estuvo bien, todas estábamos luchando por un sueño y dando lo máximo”.
¿La desconcentró esa reacción de la gente?
Honestamente, sí. Me sentí mal porque pude haber sido yo la víctima y no me hubiera gustado. Soy del pensamiento de que, si no me gusta que me hagan algo, no se lo voy a hacer a otra persona.
Ser Miss Costa Rica era uno de sus grandes sueños... ¿Qué habría pasado de no ganar?
Lo hubiese tomado como un triunfo personal porque no me di por vencida, lo intenté una segunda vez y si no se daba era porque no era para mí. Siempre he sido muy positiva. Hubiera seguido con mi vida normal, como la primera vez. Ya había pasado por eso y lo tomé de la mejor forma.
¿Qué fue lo primero que pensó cuándo la anunciaron ganadora?
Agradecí a Dios porque todo el esfuerzo se vio reflejado no solo en esa noche sino durante todo el proceso. Todas las mañanas le pedía a Dios la sabiduría, la fuerza, todo lo necesario para hacer las cosas bien y aunque hubo momentos de victoria y otros no tan buenos siempre luché contra todas las adversidades.
¿Qué representa esta corona para la mujer costarricense?
Que la mujer costarricense, cuando quiere lograr algo y se lo propone, puede alcanzarlo.
¿Cuáles son sus cualidades de reina?
Soy una mujer auténtica, muy disciplinada, entregada y responsable. Soy analítica y con estrategia, porque al igual que en lo deportivo, los concursos de belleza son competencias que requieren de un plan para alcanzar la meta.
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¿Cuál fue su estrategia?
Demostrarle a la organización quien es Carolina. Siempre quise estar atenta con las personas, con mis compañeras y siempre disfrutando de cada momento.
¿En qué temas se enfocará durante su reinado?
Uno sería concienciar a las personas sobre el cuido del medio ambiente en temas como la reforestación y el cuido del agua. En segunda instancia me gustaría enfocarme en la indigencia; es un tema que me conmueve mucho. La tercera causa sería en fomentar el deporte porque sé del impacto positivo a nivel físico, mental y de la salud que este tiene.
¿Cómo lo logrará?
Soñar es gratis; tener fe es gratis… tengo ambas. Ahora, como Miss Costa Rica, creo que se abren puertas para trabajar con expertos que me puedan ayudar a cumplir esos sueños. No soy experta en esos temas, pero necesito la ayuda de la organización y de gente de afuera para que juntos podamos cosechar todo esto.
Hay gente que no cree en los concursos de belleza. ¿Por qué considera que sí se puede creer en esto?
Mi experiencia en concursos de belleza ha sido de superación personal, en el momento que se empieza a luchar por esa meta y derribar los obstáculos a nivel personal y social ya es digno de admirar. Aquí no todo es superficial: aquí se crece como persona, se aprende a ser disciplinada y se forma carácter.
Pero, además, estos concursos presionan muchas jóvenes con perfiles a seguir... ¿Qué piensa de eso?
Bajo ninguna circunstancia debemos pensar que el físico es lo que me define a mí como persona. Cada quien es un ser único y especial. El mejor consejo es sentirse a gusto con lo que soy y aceptar como Dios nos hizo.
Se declaró en favor de las cirugías estéticas. ¿Tiene operaciones?
Solamente una, que es el implante de busto.
¿Cuáles son sus armas para el Miss Universo y poner el nombre del país en alto?
Una de mis armas es mi personalidad. Siempre he proyectado mi luz propia y mi esencia, que creo que nadie me la va a apagar, a menos que Dios así lo decida. Mi otra fortaleza es la fe en Dios y además estoy anuente a aprender y tener una mente abierta.
¿Le gustaría ser famosa?
El término “famoso” es muy subjetivo. Para muchos, el hecho de yo fue virreina me puso en el ojo público, para otros. Ahora que soy Miss Costa Rica me hace famosa, pero yo lo veo como que sigo siendo la misma persona, nada más que alcancé uno de mis sueños y tengo una responsabilidad de por medio.
”El hecho de ser famosa, no sé por qué, pero no me cabe en la cabeza porque para mí este término de ser famoso o no, encaja en la medida en que las personas reconozcan sus esfuerzos.
¿Con qué figuras o personalidades le gustaría compartir?
Es interesante. Me gustaría compartir con el Presidente de la República para hablar con él sobre temas que existen ahorita porque como costarricense quiero saber qué es llevar en el hombro el cargo de todo un país. Me encantaría poder hablar con Nery Brenes o Hanna Gabriel, grandes deportistas costarricenses que han dejado en alto el nombre del país.
Créditos: Fotografías: Luis Navarro. Locación: Estudio fotográfico de Grupo Nación. Vestuario: Nicky Polet. Zapatos: Calzado del Barco. Cabello: David Suárez, Image Design Salon & Spa. Maquillaje: Alejandra González, Televisora de Costa Rica.