Han pasado cuatro meses desde que –el viernes 19 de julio– Paola Chacón se coronó Mis Costa Rica. No ha sido fácil llevar el título, la estudiante de Administración de Empresas de 28 años ha enfrentado todo tipo de críticas, no solo por su físico, sino también por un audio que se filtró en redes sociales en donde ella hablaba mal de otras compañeras.
Y aunque en un inicio sintió que el mundo se le venía encima, resurgió de las cenizas: aprendió a amarse tal y como es, a ser más cautelosa a la hora de hablar y a no criticar a las demás personas.
Hoy a menos de una semana de tomar el avión que la llevará rumbo al Tyler Perry Studios en Atlanta, en el estado de Georgia en Estados Unidos, para participar en el Miss Universo el domingo 8 de diciembre, la tica hace un balance de lo que ha sido este torbellino de emociones y de lo que representa ver un sueño cumplido, por el que ha trabajado por más de cuatro años.
¿Ha valido la pena llegar hasta acá?
-Ha sido un recorrido complicado y muy difícil, con muchas tristezas, pero también con mucha felicidad y puedo decir que en este momento de mi vida cada lagrima, risa, tristeza y desolación ha valido la pena.
“Yo no me vengo preparando desde hace cinco meses, yo me he preparado por cuatro años para ir al Miss Universo y representar a Costa Rica, es un orgullo total”.
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Las primeras semanas de reinado usted mantuvo un perfil muy bajo ¿Qué pasaba con Paola Chacón?
-Estaba pasando por un proceso muy duro, porque fui muy atacada primero físicamente y luego por los audios que salieron a la luz. Me sentía muy triste, lloraba todos los días, no comía y ahí realmente entendí que es una depresión, porque uno puede decirlo o investigarlo, pero ya vivirlo en carne propia es totalmente otra cosa. Es algo que, por más que usted se sienta apoyada por su familia, por la organización y por sus amigos, te hace sentirte triste y sola.
“Fue un proceso en el que tuve que perdonarme a mí misma porque fui muy atacada por un error que cometí, pero, como todo ser humano, no soy perfecta.
“En ese proceso me reprochaba muchas cosas: cómo había cambiado, por qué dije eso, por qué había tanta confianza. Me dejé llevar por el calor del concurso y pues soy humana y me equivoqué, me agarré de Dios y fue lo que me hizo salir de la depresión, de ese agujero negro”.
¿Cómo vivió esos momentos con su familia?
-Fue muy fuerte porque lo que yo sentía en ese momento lo sentían ellos, me veían llorar todos los días. Yo luché por ese Miss Costa Rica desde hace cuatro años en donde trabajaba, estudiaba, iba a los concursos y ayudaba a la familia.
“Mi sufrimiento era el de mi hermana y de mi mamá. Fue tanto acoso que hasta ellas tuvieron que cerrar las redes sociales, porque les enviaban mensajes ofensivos e incitándome a matarme. Esas dos primeras semanas de reinado fueron realmente muy difíciles”.
¿En algún momento pensó en renunciar a la corona?
-Pues no, nunca lo pensé, pero cuando me levantaba siempre me cuestionaba por qué me pasó a mí, por qué si yo he luchado tanto por esto; pero nunca me pasó por la cabeza entregar la corona. Todo el mundo me decía que entregara la corona porque no era justo, pero yo sí creo que fue justo, porque un concurso de belleza no lo gana ni la más alta, ni la de la cara más bonita, ni la de cabello perfecto, es un todo, un conjunto.
“Una Miss Costa Rica tiene que irradiar luz de adentro hacia afuera y es algo muy importante que todas tienen que tener en cuenta: la entrevista, la puntualidad, la forma de hablar. Es decir, son muchos factores los que inciden y que tal vez el público no ve.
“Ojalá que esto le sirva de ejemplo a las otras chicas que vienen a participar más adelante”.
¿Qué la hacía llorar?
-Veía tantos comentarios tan hirientes y de tanto leer llega un punto en el que usted se lo cree.
“A mí me atacaban mucho porque tenía muchas arrugas, pero son líneas de expresión y me encantan mis líneas de expresión y aprendí a amarme porque hasta dude de mi misma en algún momento porque me creía lo que me decía la gente.
“Lloraba de ver a mi familia mal, de no sentir el apoyo del público y creo que todo es un proceso y una tiene que aceptar las equivocaciones y los errores, pero tiene que levantarse y salir adelante”."
¿Cuándo se enteró usted de los audios?
-No habían pasado ni dos horas. Eran de un grupo de WhatsApp que tenía con dos concursantes más desde que inició el Miss Costa Rica.
“Y cuando salieron tuve que sentarme a escuchar todo porque tal vez eran conversaciones que no había iniciado yo, o que no recordaba y si pasaba algo hablábamos con la cabeza caliente. El audio eran varias conversaciones unidas”.
¿Qué enseñanza le dejó?
-Que hay que ser muy prudente con las personas, que antes de criticar es mejor verse en un espejo y pensar lo que uno dice porque cuando yo escuché los audios era otra persona y hasta a mí me da vergüenza escucharme, dije muchas malas palabras y en esos cinco meses era otra Paola Chacón.
“Para mí ha sido un aprendizaje muy grande de que una tiene que dejar de criticar tanto. Y bueno sí, me equivoqué y lo lloré y tal vez mucha gente no cree en mí, pero soy un ser humano y aprendí. Creo que también aprendieron muchísimas personas.
¿Cambió su concepto de la amistad después de que salieron los audios?
-Por supuesto, porque fueron cosas que dije en un grupo de mucha confianza, en el que hablábamos de todo las tres y yo las andaba jalando de arriba para abajo durante el concurso y yo creía que era una amistad sincera y habíamos hecho planes de ir a ciertos lugares y demás.
“Todavía tengo mis amigos, pero sí cambió, en el sentido de que uno nunca puede confiar en todas las personas y que uno nunca termina de conocer a la gente.
“Con ellas dos era con las únicas que yo hablaba”.
¿Cuánto duró ese proceso de depresión?
-Fueron 22 días en los que yo no quería salir, no me quería maquillar, ni comer, ni nada, porque cada vez que hablaba del tema lloraba. Estaba muy sensible y ya ahora puedo decir que es una etapa superada, que realmente me ayudó a crecer mucho y que me va a ayudar a crecer muchísimo para el Miss Universo.
¿Cuándo fue ese punto de inflexión en el que usted dijo hasta aquí?
-Yo soy muy creyente y casualmente cada domingo que iba a la iglesia tocaban un tema con el que yo me identificaba y eso me ayudó mucho, pero cuando yo dije ‘no voy a llorar más por esto, tengo que salir adelante con esto y tengo que prepararme para el Miss Universo fue un día que fui a Calle Génesis (fundación que ayuda a las personas que viven en la calle) y un señor me contó su historia y realmente lo que a mí me pasó no se compara a lo que muchas personas han pasado toda su vida.
“Yo dije ‘yo no voy a llorar más’, porque lo que me pasó a mí fue un error que ya me perdoné y que ya superé, así que no más lagrimas”.
¿Cómo recuerda ese momento?
-Es como una impotencia, porque a mí me gustaría devolver el tiempo y corregir todo, pero yo creo que en esta vida nada es casualidad, me tenía que pasar a mí para aprender y ser mejor persona.
¿Cambio su concepto del bullying después de este capítulo?
-Yo siempre he tenido muy claro lo que es el bullying, pero sí es muy diferente vivirlo en carne propia y yo investigué y leí muchísimo porque cuando estaba en este proceso quise saber sobre el acoso cibernético y me topé con la sorpresa que habían muchas personas que habían recibido tanto acoso y es increíble lo que un ser humano es capaz de hacer detrás de una computadora.
“Yo soy una mujer de 28 años y pude entenderlo sola, pero hay niños qué tal vez no tienen la madurez suficiente y les pasan haciendo bullying constantemente por una apariencia física o por un nivel socioeconómico.
“Yo creo que nadie tiene el derecho de señalarlo a una, ya sea por un aspecto físico o por un error que uno haya cometido”.
Cuando retomó su rutina ¿percibía que la gente se le quedaba viendo?
-Es curioso porque no me reconocían, cuando yo iba a algún lugar me decían ‘uy pero usted no se parece a la de la foto en redes sociales’, entonces es hasta ahorita que saben quien soy porque estoy más activa.
Usted también recibió muchas críticas al ser electa...
-Sí y me acuerdo que a ellas dos (las del grupo de WhatsApp) les dije ‘sepan que si no gana esta candidata o esta otra, la van a criticar muchísimo porque son las dos favoritas para el público’.
“Yo sabía que la que ganara iba a tener meses difíciles, pero por supuesto cuando te atacan por un aspecto físico, como mi rostro, o porque tengo muchas arrugas, o porque parezco una señora, pues sí duele porque soy mujer y las críticas destructivas duelen muchísimo. Pero hay que aprender a respetarse, a amarse con los defectos y las virtudes y cuando uno ama todas esas cosas se nota a la hora de expresarse. Todas las personas somos hermosas.
¿Cómo ha sido la preparación al Miss Universo?
-Ha sido una experiencia muy bonita. Me he preparado mucho en oratoria, en ingles -aunque sé que no es fundamental, pero sí es importante comunicarse con las otras chicas-, clases de pasarela, en mi físico -que me dicen que es uno de mis fuertes y que es algo que llama muchísimo la atención de las latinas y espero seguir con ese parámetro-.
“También estoy muy emocionada porque muchos diseñadores nacionales me están apoyando y han apostado por mí en las buenas y en las malas”.
¿A qué aspecto debe prestarle más atención en el certamen?
-Cuando una tiene experiencia en los concursos de belleza, se va dando cuenta cuál es su talón de Aquiles, o qué hay que mejorar.
“De la Paola Chacón de hace dos años, que fue mi último concurso, puedo decir que soy más segura. Y yo creo que eso fue algo que me hizo falta en otros concursos de belleza; porque usted puede ser muy bella, la mujer más divina de todas, pero si usted no tiene seguridad, eso lo notan, entonces creo que eso es lo más importante.
“Antes yo quería encajar en lo perfecta, pero aprendí que no somos perfectos”.
¿Qué mensaje va a llevar al Miss Universo?
-Yo quiero ser una Miss de las causas sociales, entonces es algo que me voy a enfocar al 100%. Me voy a enfocar en Calle Génesis, quiero ser luz en las tinieblas de otras personas.
“También hay una fundación con la que quiero trabajar después del Miss Universo y que es de chicas que son violadas por sus familiares y espero que la próxima Miss Costa Rica pueda continuar con esto y apoyar otras causas sociales, porque ganar esta corona te da una proyección muy grande donde sos el centro de atención y lo que una hace se proyecta a muchas personas y creo que cuando usted ayuda a otras personas las bendiciones son muchísimas”.
¿Cuál va a ser su estrategia?
-Disfrutarlo, voy enfocada 100% en mí. Muchas veces una pasa pendiente de las otras concursantes y pierde su rumbo y para mí, lo más importante es enfocarme en mi misma.
¿Qué características tiene Paola Chacón que la pueden llevar a destacar entre las demás candidatas?
-Creo que mi empatía, creo que hago clic con cualquier tipo de personalidad y eso es sumamente bueno, porque a veces es muy complicado llegar a relacionarse bien con todas las personas. Creo que también el hecho de que yo soy muy determinada en lo que hago y mi físico.
¿Hasta donde cree que puede llegar en la competencia?
-Creo que hasta el top tres. Todo se tiene que atraer con la mente y yo he trabajado muchísimo, me he esforzado muchísimo por cuatro años así que mi meta es ganar.
El hecho de que Natalia Carvajal haya llegado hasta el top 10 el año anterior ¿le da una responsabilidad mayor a usted?
-Creo que no, las dos somos completamente diferentes, ella llevaba otro proyecto. Lo más bonito de los concursos de belleza es que siempre hay chicas diferentes y nosotras somos completamente diferentes. Yo estoy enfocada en mi Miss Universo y en todo lo que he trabajado durante todo este tiempo.
¿Conoce a las aspirantes?
-Sí, a la mayoría. Una siempre tiene que analizar al contrincante, verlas. Incluso he hablado con algunas por redes sociales.
¿Qué ha representado la confianza en sí misma en todo este proceso?
-Creo que la confianza es todo. Si una confía en el trabajo que ha hecho, en una misma puede lograr muchas cosas y no solo en el Miss Universo, sino en la vida.
¿Cómo ha sido el apoyo de su familia?
-Ha sido fundamental, yo vengo de una familia numerosa y siempre nos hemos apoyado desde pequeñitos. Mi papa es panadero y yo trabajo desde muy pequeñita, todos le ayudabamos a hacer pan pero como éramos tantos siempre hemos tratado de apoyarnos unos a otros. Yo trabajo desde que tengo 15 años, cuando salía del colegio me iba a trabajar a un restaurante de mariscos y los sábados y domingos para poder quitarle un poco de peso a mi papá y a mi mamá, porque éramos demasiados.
¿El éxito sabe más cuando se hacen tantos sacrificios?
Totalmente. Yo siempre he sido una mujer muy esforzada para poder pagarme mis estudios, he tenido que sacrificar muchas cosas.
“Y la mayor satisfacción ahora es saber que estoy cumpliendo una de mis metas más grandes cuando inicié en los concursos de belleza lo veía superlejos porque era tímida, insegura, todo me daba miedo, me daba miedo hablar y la evolución ha sido grande y no solo porque llegué al Miss Costa Rica y lo gané, sino porque superé muchos miedos que jamas pensé que iba a superar”.
¿Qué le dice a la Paola de hace 10 años atrás?
-Que sea más segura, que se ame tal y como es, que sea más cuidadosa a la hora de hablar.
¿Cuál es su mayor temor?
Morirme y no estar en paz. Pero en este momento puedo decir que puedo morir en paz.
“Estoy en una de las mejores etapas de mi vida porque superé tantas cosas, lo que me pasó fue una prueba de fuego donde realmente tenía que confiar en mi misma para seguir adelante y lo que yo pasé no se lo deseo a nadie, ser atacada por la mayoría de Costa Rica no es bonito, pero lo superé y eso es lo más importante”.
Créditos:
Fotografía: John Durán. Locación: Hotel Presidente Costa Rica. Styling: Adriana Chávez/Coral Boutique. Cabello y maquillaje: Mauricio Jiménez. Zapatos: Calzado del Barco.