La mañana de este jueves, la célebre actriz mexicana María Rubio murió a los 83 años de edad. Rubio, conocida por su papel de Catalina Creel en Cuna de lobos, falleció tras sufrir un ataque al corazón.
Mi abuela, mi idolo, mi ejemplo a seguir ahora esta descansando con mi papá. Dos guardianes nos cuidan desde donde estén 🎭 #MariaRubio pic.twitter.com/Dwv19whGgW
— Fernanda Reyes Pedret (@FerPedret) March 1, 2018
Al parecer, la actriz se encontraba esperando el desayuno junto a su hija y un nieto, hasta que un paro cardíaco la atacó.
“A sus familiares y amigos les mandamos un abrazo solidario con nuestras más sentidas condolencias”, dijo la Asociación Nacional de Intérpretes (ANDI) de México en un comunicado.
A pesar de sufrir un enfisema pulmonar desde hace más de un año, Rubio se encontraba estable según los reportes médicos.
Patricia Reyes Espíndola informó que la muerte de su hijo Claudio hizo caer el estado anímico de Rubio.
Fallece a los 84 años la inolvidable actriz Maria Rubio... y sobrevive Catalina Creel. pic.twitter.com/zl6DH25enH
— Jenaro Villamil (@jenarovillamil) March 1, 2018
Claudio Reyes falleció junto a Maru Dueñas en diciembre pasado, tras un accidente automovilístico.
Por el momento, Adriana Reyes, hija de la actriz, manifestó que no desea dar ninguna declaración al respecto, y que será Reyes Espíndola quien se referirá al caso.
Una vida de maldades
La vida de una actriz imprescindible para México comenzó de manera irónica: con el anuncio de lo que, más de 80 años después, sería su muerte.
Rubio apenas tenía cuatro años de edad cuando un doctor tuvo que dar la mala noticia: la pequeña niña sufría una afección cardíaca que le provocaría el engrandecimiento prematuro del corazón.
No fue hasta los nueve años cuando Rubio logró asistir a la escuela. Su familia da testimonio del interés que la actuación provocó en ella desde niña.
"No todos los actores corren la suerte de que les toque dar vida a personajes como los que he tenido", dijo en una entrevista al diario Siglo de Torreón en el 2008, al repasar su vida.
Después de cursar la secundaria, estudió danza y posteriormente actuación en la Escuela de Artes Teatrales del Instituto Nacional de Bellas Artes, en México.
Aunque es recordada por sus papeles en culebrones mexicanos, Rubio también actuó para cine y teatro. Su debut fue en 1956 al aparecer en la obra El portal de Belén, que le serviría como una ventana para la televisión.
Tras más de 20 papeles en telenovelas (la mayoría en roles antagónicos), su representación por excelencia se vio reflejada en Cuna de lobos, una serie de 1986 considerada como una de las mejores en la historia de la televisión mexicana.
En Cuna de lobos, María Rubio interpretó a Catalina Creel, dueña de una gigantesca empresa farmaceútica que sostenía con su esposo. El personaje de Creel es recordado por ser uno de los villanos más fascinantes y temidos en la historia de los culebrones.
"La actriz mexicana será recordada como la villana que hizo sufrir como nadie en la pequeña pantalla y que su personaje, bautizado como reina de las villanas, supuso un antes y un después en su trayectoria", dice el crítico Rafael Gálvez en un obituario de la actriz.
Después de su papel como Catalina Creel, Rubio actuaría para otras telenovelas como Laberintos de pasión, Salomé, Amor sin maquillaje, Querida enemiga y Una familia con suerte.
Participó en otras tres obras de teatro y actuó para más de diez películas, entre ellas Con el amor no se juega, Nadie te querrá como yo y La hija del Huracán Ramírez.
Con su salud deteriorada, no dejó de recibir ofertas laborales. Su última participación fue en el 2011 con la telenovela Una familia con suerte, donde manifestó que se sintió "muy feliz con el personaje, pero ningún papel superará a Catalina Creel".