Si algo caracteriza a Nicole Coco Roper Díaz es su resiliencia. La fortaleza de esta joven continúa inspirando a miles de personas. Este miércoles 21 de junio contó que nuevamente está hospitalizada.
Luego de luchar contra un severo cáncer cervical, Nicole fue sobreirradiada y producto de ello enfrenta serias secuelas físicas. Por ello, ha estado hablando en días recientes de posibles tratamientos que podrían ayudarle, como el trasplante de riñón, que está analizando.
Este miércoles, Nicole, la segunda hija de la exmodelo Lynda Díaz, contó las razones que la llevaron nuevamente a un centro médico.
“He estado en el hospital desde ayer en la tarde (martes). Tengo infección en los tubos (de la ostomía) y tenemos que cambiar los tubos de emergencia. También vamos a tener que analizar y ver si tenemos que agregar unos tubos de metal para ayudar un poco también a la vejiga”, informó a través de una historia de Instagram.
En esa red social, Coco Díaz es seguida por más de 60.000 usuarios, a quienes les habla con absoluta transparencia y esperanza en su proceso de enfermedad.
En el corto video, Nicole, quien es madre de la pequeña Ellie Roper, de cuatro años, comentó que si bien aún no se le había asignado un cuarto en el hospital, al menos “tengo el dolor controlado”.
Además, en estos días, se ha referido a cuánto la ilusiona venir en noviembre a Costa Rica para ofrecer su charla Café con Coco.
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Paz en tiempos de lucha
Nicole se ha caracterizado por hablar con gran sinceridad de sus dolencias físicas y de la situación que afronta.
Hace más de dos meses se sometió a una compleja cirugía que supuestamente le ayudaría a mejorar su calidad de vida, ya que intentaría disminuir el daño de la sobreirradiación que recibió cuando luchaba contra el cáncer cervical. El resultado no fue el esperado.
“La cirugía se complicó mucho y no pudieron completarla, lo que significa que no hay manera de poner otra bolsa al frente y no se puede operar más. Los tubos de atrás se quedan (tras la sobreirradiación a Coco le hicieron una ostomía, por lo que siempre lleva bolsitas en su cuerpo). Había demasiado daño de radiación pegado a la piel. Si seguían tratando (retirar el daño) me hubieran matado”, lamentó Nicole, de 28 años, quien estuvo en cirugía el lunes 10 de abril.