Barranquilla siempre ha vivido orgullosa de su hija Shakira Isabel Mebarak Ripoll, la más grande artista colombiana, y ella le retribuye su cariño casi siempre.
Por eso, no habría otro lugar más ideal para un homenaje a quien tantas alegrías y orgullo ha brindado que su propia tierra, que este martes la honró con un monumento en el Gran Malecón, cuya develación tuvo como invitados de honor a sus padres, William Mebarak y Nidia Ripoll.
La obra, una escultura de bronce de 6,50 metros de altura realizada por el artista plástico Yino Márquez y más de 30 obreros, es una digna representación de las caderas que no mienten.
El responsable del monumento detalló que con su trabajo buscó transmitir que Shakira es río y es mar “construir una simbología que nos permita observar en ella el concepto de trascendencia, el estar vertical con los brazos elevados y entre las manos sostener una luz nos permite simbolizar la trascendencia”.
Asimismo, que “las olas son en aluminio para darle más fortaleza a la simbología que quiero manifestar”, expresó el artista, quien se apoyó con el talento de jóvenes estudiantes y egresados de la Escuela Distrital de Artes de la ciudad.
“Gracias al alcalde por esta encomienda y a la EDA. Los alumnos y egresados de la escuela sirvieron para la elaboración de la escultura; de ahí están egresando talentos con el conocimiento de elaboración, lo que nos permite apoyarnos en ellos con sus capacidades técnicas”, indicó el artista barranquillero.
También explicó que la obra se ejecutó en bronce y conserva en la piel y cabello un tono trigo; además, al final de la escultura, la falda de la artista se convierte en unas olas elaboradas en aluminio que luego fueron cubiertas con un esmalte barniz para evitar que la intemperie las destruya.
“Para la fabricación de esta escultura, iniciamos primero modelándola en arcilla, luego le sacamos molde en silicona y fibra de vidrio, y al final la vaciamos en bronce. Es un vaciado en bronce y partes en aluminio”, apuntó Márquez.
Agregó que, bajo su concepto artístico, la escultura está ubicada en un sitio perfecto porque materializa la metáfora marveliana –de la escritora barranquillera Marvel Moreno–, quien en su obra “En diciembre llegaban las brisas” dice que Barranquilla está situada junto al río, cerca del mar. “Barranquilla en este caso es Shakira porque es la simbología de la mujer y la ciudad, y ella está ubicada en el malecón junto al río, cerca del mar”.
De manera específica, la escultura se encuentra en la unidad funcional 3 del Gran Malecón, que actualmente presenta un avance del 80%, por lo que se prevé que el acceso al público esté totalmente habilitado en el primer trimestre de 2024.
Además, en paralelo, avanzan las obras civiles, hídricas y eléctricas. También se llevará a cabo el paisajismo en el nuevo escenario.
La reacción de la cantante barranquillera no se hizo esperar, mediante su cuenta de Instagram publicó varias fotografías en las que se observa a sus padres en la escultura.
“Me hace feliz compartir esto con mis padres y en especial con mi madre en el día de su cumpleaños”, escribió la cantante colombiana.