El 2020 llegó para cambiar la rutina de todas las personas de una u otra manera y la de la chef Flora Sobrado de Echandi, no fue la excepción.
La popular Tía Florita, de 93 años, ha tenido que dejar de ver a su familia durante estos meses para evitar contagiarse de covid-19, más aún tomando en cuenta que por su edad se encuentra en el grupo de riesgo.
La Navidad no será muy diferente a lo que ha sido su 2020, ya que se quedará en su casa. Sin embargo, reconoce que extrañará las cenas navideñas de años anteriores, cuando compartía con toda su familia.
“El 25 de diciembre tradicionalmente nos reuníamos toda la familia en un almuerzo, pero esta sí será una Navidad diferente, ya que no me puedo reunir con toda mi familia solamente con mi burbuja”, cuenta Tía Florita quien hace algunos meses incursionó en el mercado de los alimentos preparados congelados.
Esto no es una sorpresa para su familia, ya que desde el inicio de la pandemia, la popular chef se ha cuidado mucho.
Doña Flora recuerda que años atrás esta era una época que disfrutaba muchísimo, pues, como buena chef, era la encargada de prepararle a su familia unos espectaculares almuerzos navideños. Asegura que cocinaba todo lo que les gustaba comer.
No obstante, desde unos años para acá, los roles han cambiado en su familia.
“Por muchos años disfrutaba complaciendo a mis hijos y nietos, yo les preparaba todo lo que me pedían, ahora eso ha cambiado y son las nietas las que me chinean a mí”, afirma.
Navidad para los niños
Aunque esta es una época que disfruta mucho, Tía Florita explica que en realidad la Navidad ya no es lo mismo que hace unos años atrás y detalla que esto se debe a que “anteriormente cuando mis hijos y mis nietos estaban pequeñitos, me hacía más ilusión”.
Sin embargo, ella no olvida cuál es el verdadero significado de la Navidad y las razones por las que finalmente se celebra esta fecha más allá de la comida o los regalos.
Asimismo, considera que acompañar este día con decoración navideña, regalos, luces y villancicos, hace que esta fecha sea una de las más cálidas del año para disfrutar en compañía de la familia. Es decir, sin importar si esta es grande o pequeñita, mientras estén los seres queridos al lado, hay celebración.
No obstante, seguirá creyendo que la Navidad quienes más la disfrutan son los niños.
“Sinceramente creo que los festejos de la Navidad deberían ser solo de los niños, dado a que festejamos el nacimiento del niño Jesús. Además, hay regalos, luces, música y todo lo que provoca alegría en un niño. Aunque creo que es una época en la que los adultos pueden alegrarse, alabar y festejar con los niños”, afirma.
Por ello, Tía Florita también tiene un consejo para la gente a la que la época los hace sentir tristes o nostálgicos, o bien que se encuentran en una situación que por una u otra razón no celebran la Navidad: “Encuentro que solamente se aferren mucho a Dios”.