Hace unos días se subió a un Uber; ella creía que pasaba inadvertida, como cada vez que está en Costa Rica. Sin embargo, en esta ocasión fue todo lo contrario: el chofer se volteó y le preguntó si ella era Karla Gómez, la misma que salía en algunos programas de la televisión mexicana. Ella primero se sorprendió y luego asintió.
Mientras está en Costa Rica, rara vez la identifican, por ello disfruta de su tierra como una tica más; pero todo cambia cuando aterriza en México, donde trabaja como conductora y actriz de telenovelas, que llega hasta los hogares latinos varias veces al día.
En territorio azteca, tiene seguidores que la esperan afuera de su trabajo con regalos, tarjetas y además, frecuentemente le piden fotos. Karla ha consolidado su carrera como conductora y más recientemente como actriz y se ha convertido en uno de los rostros más consentidos de Televisa.
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Actualmente es presentadora del bloque musical de la exitosa revista matutina, Hoy y es una de las conductoras del programa de estilo de vida de TDN, Ponte Fit. Además, a inicios de año terminó de grabar Mi marido tiene más familia, telenovela en la que tiene un papel antagónico.
Su carrera ha estado cargada de éxitos en programas como Es de noche y ya llegué, Parodiando, Recuerda y gana, Netas divinas (ha sido conductora invitada en varias oportunidades). También ha estado en Teletón, Nuestra belleza México y en especiales que realiza la cadena para la independencia, día de los muertos y fin de año.
Pero su inicio fue en Telehit donde trabajó por aproximadamente 12 años. Ella fue seleccionada durante un casting para ser parte de una nueva generación de conductores del canal juvenil de música. Allí tuvo varios programas, pero fue Telehit News el espacio que la sacó de su zona de confort y con el que empezó a dar sus primeros pasos en la televisión.
Hoy no puede estar más agradecida con la también costarricense Vica Andrade y su esposo, el productor Guillermo ‘Memo’ del Bosque, quienes asegura fueron los que le dieron la oportunidad de entrar a ese mundo artístico que tanto le apasiona.
“Vea como es la vida, la que me abrió a mí las puertas para trabajar en televisión aquí (en México) fue Vica, porque ya (ella) tenía varios años en México, ya trabajaba en televisión aquí y ya era esposa de Memo y me llamó para avisarme que había un casting en Telehit para los nuevos conductores y yo tuve la inquietud y fui y me quedé. Siempre estaré agradecida con Memo y con Vica” afirmó.
Llegar a ese canal fue un sueño cumplido, ya que la doctora frustrada (como ella misma se dice) recuerda que de adolescente era fiel seguidora de Telehit, un canal que le parecía “muy chiva” y en el que quería estar algún día.
Sin embargo, la costarricense nunca planeó ser actriz, ni mucho menos conductora; ella era modelo y sus frecuentes viajes a México iniciaron cuando apenas tenía 18 años para cumplir con contratos laborales, que también la llevaron a Europa.
Estando allí le comentaron la oportunidad de estudiar en el Centro de Educación Artística (CEA) y probó suerte. Estudió por dos años actuación y posteriormente complementó sus estudios en la escuela Argos, de Casa Azul. Sin embargo, su trabajo siempre giró en torno a la conducción, por lo que dejó de lado la actuación, hasta que en el 2014 el productor Juan Osorio la llamó para formar parte de la exitosa telenovela Mi corazón es tuyo, al lado de Jorge Salinas, Silvia Navarro y Paulina Goto, donde interpretaba a una madre de siete hijos que falleció pero que los cuidaba siempre.
"Para mí es más nuevo porque yo me dediqué todos estos años a ser conductora y quería hacerlo bien y dejar un buen nombre en la conducción y yo creo que si uno quiere hacer todo a la vez y no tiene la experiencia entonces a lo mejor no lo hace bien. Tal vez con un poco más de experiencia te podés dar el lujo y eso fue lo que hice. Me gustó mucho y ahora quiero abrirme más camino en la actuación”, detalló.
El año anterior Osorio la volvió a contactar, esta vez para formar parte de Mi marido tiene más familia con un personaje completamente opuesto al que hizo en su debut en telenovelas: una esposa interesada y una mala madre. Allí compartió créditos con Gabriel Soto, Daniel Arenas y Silvia Pinal.
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El melodrama ha obtenido un gran éxito internacional y se ha convertido en una gran oportunidad para que Karla termine por despegar su carrera como actriz.
Esfuerzo
Simpática, extrovertida, con los pies sobre la tierra y siempre recordando de donde viene son algunas de las características que definen a la moraviana quien ya suma más de dos décadas de trabajar en México.
Pero así como ha tenido éxito Karla, de 42 años, ha tenido que afrontar varios retos, ya que desde neutralizar el acento, hasta la ausencia de su familia en México han sido difícil. Han sido años de esfuerzo y por eso hoy disfruta la vida y su trabajo “con locura y pasión”.
“Tengo una lista infinita de aprendizajes. Aprendí a lidiar con mis propios miedos e inseguridades. Hoy soy una persona muy distinta que la que llegó a México, la persona que soy hoy tiene un camión de recuerdos, de oportunidades, una maleta grande de risas, de momentos lindos, de entrevistas bonitas y programas, entonces recuerdo de aquella chiquilla de 18 años que llegó aquí como modelo la primera vez y jamás iba a imaginar todo lo que este país me iba a dar. Yo tengo que agradecer que México me ha abierto puertas enormes, me ha dado trabajo y todo me lo he ganado, porque aveces uno habla de todo lo bonito pero uno pasa muchas cosas en el camino: fríos, momentos difíciles, angustias, te sentís solo muchas veces”, destacó.
En México, Karla tiene casi todo, desde su pareja y su trabajo, hasta la mayoría de sus amigos, sin embargo, en Costa Rica está su mayor tesoro, por el que se desvive, el regalo más preciado que le ha dado la vida: su familia.
Ella se define como casera y por ello trata de visitar a su familia al menos tres veces al año. Para la tica, no hay nada mejor que visitar el país y comerse una olla de carne, hacer empanadas de chiverre, salir a caminar con su mamá o ir a recoger a sus sobrinos a la escuela.
Ese ha sido, posiblemente, el mayor reto que ha tenido que enfrentar por más de dos décadas.
“A mí me encanta a lo que me dedico, me encanta mi trabajo, amo ser de Costa Rica, amo ir a Costa Rica pero yo amo sobre todo la familia que tengo y disfrutar de las cosas más simples que tal vez uno al estar ahí no las ve. Mi familia es el regalo más grande que me ha dado la vida y ese ha sido el aprendizaje más grande personalmente, aprender a estar lejos y que pasan los años y la familia va creciendo y estás lejos y te perdés cumpleaños, días de la madre, años nuevos, tus sobrinos van creciendo, tus tíos van quedando en el camino porque fallecen y uno tiene que aprender a vivir con eso ”, afirmó.
Su mamá, Rossy Ramírez, es la persona más especial y que más admira. La define como una mujer valiente, madre soltera que siempre veló por ella y sus hermanos Roy, Karina y Stephannie con quienes disfruta cada momento que los tiene a su lado.
La luz de sus ojos son sus sobrinos, la joven María Fernanda y el pequeño Ethan a quienes se lleva a México durante las vacaciones.
“He tenido que aprender a estar lejos de ellos y vivir con eso, porque la vida es hoy y la vida se va muy rápido y también disfrutar lo que tenés ahora. Todos somos muy afortunados, solo que el ser humano se queja mucho”, añadió.
Quienes se han convertido en parte su familia y en un apoyo mientras ha estado en México, han sido los otros ticos que trabajan en el medio artístico de ese país, como las actrices Maribel Guardia, Mariluz Bermúdez, Anastasia Acosta, la modelo Brenda Kellerman y el fotógrafo Pablo Solano.
Es amante de los animales y tiene 14 años de disfrutar su vida junto a su perrita Lua, quien la acompaña los domingos a dar paseos en bicicleta y a todos los viajes que realiza.
Oportunidades
Su gran versatilidad como conductora le ha permitido trabajar en proyectos que nunca se imaginó. Uno de ellos fue ser designada como el enlace para un concierto de Coldplay, en donde los fondos que se obtuvieran se destinarían para ayudar a los damnificados del terremoto de México en 2017.
Ese día trasmitió en vivo para Telehit, el Canal de las Estrellas, Univisión, MTV y VH1.
“Fue una transmisión simultánea para varias cadenas por la importancia de lo que significaba. De hecho, creo que ha sido una de las experiencias más fuertes que me han pasado, haber vivido ese terremoto y luego poder ayudar. Eso fue muy especial”, dijo.
Por más de 10 años fue ficha exclusiva de Televisa, no obstante el año anterior finalizó contrato con la empresa y pese a que continúa laborando allí no le cierra las puertas a nuevos proyectos.
“Ya tienen más de dos años haciendo muchos cambios y a mí se me cumplió el ciclo y creo que todos los ciclos son buenos, lo importante de aquí es que sigo teniendo trabajo y estoy agradecida con eso y la verdad es que mi relación con la empresa es buena y si me voy a otra empresa, también lo hago con los brazos abiertos porque no se cerró de una forma negativa o en malos términos.Vamos a ver qué pasa, creo que ahí afuera hay un montón de oportunidades principalmente en actuación”, destacó.
Aunque no sabe que pasará mañana, ni dónde estará en 10 años, Karla solo espera ser una mujer plena y feliz, disfrutando de la playa que tanto le gusta y siendo un mejor ser humano con su familia.