Cuando se habla de Navidad, en Heredia hay un barrio que sobresale como ningún otro. Se trata de la Cruz del Norte, de San Joaquín de Flores, un lugar en donde los vecinos iluminan sus calles y brindan un espectáculo visual a toda persona que los visita.
A lo largo de cuatro cuadras sobresalen miles de bombillos y figuras navideñas en las casas, aceras y postes de luz. Al mismo tiempo, los vecinos ofrecen ventas de comidas y manualidades en sus propios hogares, para así celebrar la época festiva.
A pesar de que es el cantón más pequeño de Costa Rica, miles de visitantes llegan de todas las partes del país. Algunos lo hacen como un recorrido por su vehículo para tomar videos y fotografías, mientras que otros se bajan para disfrutar con la comunidad.
Algunas de las comidas que se pueden encontrar en este colorido barrio son las tradicionales de la temporada, como tamales, tortillas, café, pan salado o dulce, galletas y churros, o bien, también se pueden degustar elotes y carnes hechas a la parrilla.
En cuanto a las manualidades, se pueden encontrar variados artículos de Navidad hechos por los emprendedores locales. Algunas ideas, que funcionan a la perfección para los regalos son pulseras, joyería, bolsas de tela y decoración para el hogar.
La tradicional inauguración de las luces y el árbol de navidad tuvo lugar el pasado 25 de noviembre, pero para la suerte de los ticos, este espectáculo permanecerá abierto al público todos los días hasta el 25 de diciembre.
La iluminación de las luces arranca a las 6 p. m., apenas comienza a caer la noche. Estas se mantienen a todo color hasta las 10 p. m.
Si usted quiere visitar el lugar, puede tomar como punto de referencia a la Parroquia de San Joaquín de Flores y de ahí dirigirse caminando hasta el barrio, el cual es difícil de perder por su cantidad de luces.
A continuación, le mostramos cómo luce el ambiente en el barrio La Cruz de San Joaquín de Flores.