Maribel Guardia atendió a varios medios de comunicación en México, este 3 de abril, luego de que el abogado de Imelda Garza saliera a hacer fuertes acusaciones. El representante legal de la exnuera de la modelo costarricense dijo, entre otras afirmaciones, que el testamento de Julián Figueroa podría haber sido falsificado.
Durante los minutos que atendió de la prensa, Guardia desmintió esta aseveración, argumentando que Figueroa dejó como único heredero a su hijo José Julián.
“Yo hubiera creído que es falso si me deja a mí la mitad del rancho, si lo hubiera dejado a Marco (Chacón) o si se lo hubiera dejado a una hermana o a un tío, pero se lo dejó a su propio hijo; todo. Le dejó todo a su propio hijo. Julián estaba casado por bienes separados. Yo creo que a quien quería proteger era su hijo”, declaró la actriz.
Por otra parte, Guardia aseguró que pasa por un mal momento, el cual la tiene con una constante sensación de inseguridad. Sumado a esto, dijo haber recibido amenazas.
“He estado muy con muchas amenazas y temo por mi vida, temo por mi seguridad. De hecho, tenía miedo ahora que venía en el aeropuerto que me metieran algo en el equipaje. Tengo miedo que se metan a mi casa. Ya no tengo seguridad en mi casa. Todo el mundo sabe dónde vivo, se metieron a la fuerza, rompieron la puerta. Entonces ya, la verdad tengo hasta miedo de estar en mi casa”, comentó.
Como contexto, hace un mes, autoridades legales llegaron a su casa para llevarse a su nieto, ya que un juez ordenó que la custodia del niño volviera a Garza, su madre. En aquella ocasión, Maribel denunció que el trámite legal fue violento y que entraron a la fuerza a la casa.
Por otra parte, varios periodistas le consultaron si seguiría luchando por la custodia legal de su nieto. Guardia fue enfática en que está feliz con que José Julián esté con la mamá y que únicamente quiso protegerlo al interponer una demanda contra su exnuera.
Eso sí, expresó que lo último que recibió de Imelda fue una amenaza, aunque no ahondó más en el tema.
“Yo odio estas cosas. Si hice esto fue por el niño y lo único que quiero es la seguridad y la protección del niño. Eso es todo, que el niño esté bien, aunque sea probable que no lo vuelva a ver nunca más”, aseguró Guardia.
“Mi deseo es llegar y que me den visitas puestas por la ley. No, no como de ‘ay, tal día’, si no, porque un juez diga: ‘lo verá cada 15 días, lo verá cada semana’. Así es diferente, porque entonces ya sería ante la ley”, añadió.