La banda mexicana de rock alternativo Hello Seahorse! dará su primer concierto en Costa Rica este sábado, en el festival Transitarte.
La presentación será en la tarima de Radio Hit y Revista Warp, ubicada al frente de la Estación del Atlántico, en barrio La California.
A las 9:30 p. m. será su concierto, en el mismo escenario en el que durante el fin de semana tocarán otras bandas extranjeras y locales, como 424, Huba & Silica, Passiflora, Alphabetics y Florian Droids.
Tras siete años de carrera, la música de Hello Seahorse! ha hecho eco en importantes círculos artísticos, destacando como una de las grandes promesas de su país.
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Su último disco, Arunima , del 2012, debutó en el primer puesto de ventas de la tienda digital iTunes México. Ha pasado por festivales musicales de gran talla, como Vive Latino, Rock al Parque, South by Southwest (SXSW) y Coachella.
Además de haber sido nominada al Grammy, la banda ha colaborado en un tributo a Caifanes, un disco de remixes de Zoé (Denise fue parte del grupo de cantantes del MTV Unplugged de la banda), ha tenido al cantante Chetes de invitado en un disco, y concretó una gira por México al lado de Café Tacvba.
La agrupación está conformada por Denise Lo Blondo Gutiérrez, Fernando Oro de Neta Burgos, Gabriel Bonnz! de León y José Joe Borunda, el guitarrista de la banda, quien respondió preguntas a Viva .
Dejando de lado los géneros y tendencias musicales, ¿cómo se describe a Hello Seahorse!?
Es difícil a veces describir lo que uno hace, pero yo creo que lo que buscamos a la hora de tocar y componer es generar una conexión con el público, y siempre ser honestos con la música y el sonido que emitimos. La banda ha pasado por distintas fases, hemos experimentado con distintos sonidos y nos gusta seguir por esa misma línea. Somos personas cambiantes y siempre estamos tratando de experimentar.
Se dice que al inicio querían que la música sonara a la mar y que remitiera a la inocencia. ¿Creen que todavía mantienen ese concepto?
En parte, sí. A veces no sabemos de dónde vienen las ideas; funcionas como un canal y surgen. En un inicio, sí era evidente que la banda tenía un sonido juguetón, inocente e infantil. Con el disco nuevo, buscamos combinar colores, desde lo oscuro, con lo que siempre hemos experimentado, hasta tonos más alegres y coloridos.
¿Por qué dejaron de hacer canciones en inglés?
Sentíamos que estábamos en esta parte del mundo: hablamos español. Pensamos que siendo un idioma tan rico hay que explotarlo y usarlo más. Desde entonces, se ha vuelto el idioma oficial de la banda. No estamos en desacuerdo con bandas que canten en inglés ni mucho menos, y tampoco descartamos la posibilidad de en algún momento volver a usarlo.
¿Es difícil la vida del artista independiente en México?
Sí, es difícil para todos. La música, las artes, no es una carrera que la emprendes por el afán del dinero. Es algo que requiere mucho sacrificio y a veces no es retribuido económicamente, pero sí lo es en cuestión de orgullo, trabajo y respuesta de la gente, que reconoce que lo que haces lo haces de corazón. En México hay mayores oportunidades que los países centroamericanos, porque afortunadamente sí hay una infraestructura de empresas interesadas en la promoción. Nosotros hemos sido muy afortunados, y aunque seguimos siendo independientes, reconocemos que es una labor que requiere mucha dedicación y aliados y gente que comparta tus sueños y crea en ti.
¿Brinda presión el ser una banda independiente relativamente exitosa, con acercamientos a reconocidos artistas de su país?
Hace algunos años, yo veía imposible compartir escenario con Zoé o Café Tacvba, o tocar en Coachella. Siempre hemos sido de objetivos a corto plazo y bien definidos; hay un nivel de presión pero generada por nosotros mismos. Hemos tratado de mantenernos fieles a nuestras condiciones y de hacer las cosas a nuestra manera.
¿Qué aprendieron al tocar en festivales como Vive Latino, Rock al Parque, SXSW y Coachella?
Ha habido buenas experiencias y otras no tan buenas. Los festivales siempre son un poco intensos; rápidos y es una dosis de adrenalina muy fuerte. Nos quedamos con conocer nuevos amigos y darles nuestra perspectiva, que sintamos todos que somos parte de algo muy bueno e importante, como lo es el rock y la música en Latinoamérica. Es bueno reconocer que la música y las bandas están abriéndose fronteras, puertas y llegando a lugares que antes otros artistas hubieran pensado que no se podría.
Se van a presentar en Transitarte, en una tarima en la que van a compartir con varias bandas de Costa Rica. ¿Tienen contacto con la escena musical de acá?
Un poco, sí. Afortunadamente, el año pasado tuvimos la oportunidad de ir a Panamá, y de entrada vimos el entusiasmo de las personas. Yo tengo una banda amiga de Costa Rica, que es Cocofunka; su vocalista, Javier Arce, es un buen amigo e inclusive habíamos hablado el año pasado de que los recibíamos acá y ellos allá a nosotros. Afortunadamente, no estamos tan lejos y tenemos varias cosas en común. Yo siento que de alguna manera nos va a ser familiar llegar a Costa Rica; no siento que nos lleguemos a sentir extraños o extraviados. Hay un poco de expectativa por los fans de allá, que están entusiasmados, y nosotros también lo estamos.