Hace un mes en los Premios Lo Nuestro, J Balvin obtuvo un reconocimiento como Ícono mundial. Lo recibió de las manos de nada menos que Daddy Yankee, una figura invaluable del género reguetón y uno de los líderes de todo este movimiento.
"No me siento un ícono porque un ícono eres tú, pero me siento un gran soñador", le dijo J Balvin a Daddy Yankee.
Jose Álvaro Osorio Balvin, de 34 años, ha soñado y logrado en grande. Estuvo en el festival Coachella, fue el primer latino en ser headliner (plato principal) en el Lollapalooza de Chicago y recientemente cantó Mi gente a todo pulmón en el medio tiempo del Super Bowl.
Montado en esa ola, Balvin estrenó este viernes 20 de marzo su álbum Colores, el sexto en su ambiciosa carrera, un disco en el que cada canción representa un color y un sentimiento en particular.
En este disco, Balvin muestra que su capacidad de poner a bailar no se quedó solo en la década pasada con los éxitos Ginza o Ay vamos, sino que aún tiene en la bolsa a su variado público: desde quienes quieren dembow puro hasta los que buscan reguetón más refinado.
El primer sencillo de este disco fue Blanco, uno en el que se autodenomina “el niño de Medellín”; sin embargo, a estas alturas de su carrera, Balvin es mucho más que eso: es un hombre de mundo, listo para conquistar cada rincón con su música.
Colores
Cuando Balvin lanzó el segundo sencillo del disco, Morado, empezó la pregunta: ¿será que cada canción tiene un color? Esto se confirmó a finales de febrero, cuando soltó la lista de temas y un tercer sencillo, Rojo.
Balvin declaró en una entrevista con el medio dominicano Alofoke que la idea de ponerle Colores al disco y asignarle uno a cada canción fue espontáneo, le surgió en un momento de ocio en su casa. Eso no quiere decir que todo se haya hecho a la ligera.
“Grabamos 35 temas y escogimos 10. Los otros 25 pueden salir para otro álbum o para dárselo a otros artistas”, le dijo a Alofoke.
“Cuando la gente escuche el disco quiero que realmente sienta que cada canción es un color diferente, porque las que sacamos una se parecía a otra que ya estaba, entonces la gente iba a confundir el concepto. Quería arriesgarme a solo sacar 10 canciones”, agregó.
La ambición no se quedó ahí. Cada canción del disco viene acompañada de un videoclip; el más elaborado el de Rojo, en el que se ve a J Balvin actuando como un fantasma que se queda en el mundo hasta cumplir una misión, algo así como la trama de Ghost (película conocida como La sombra del amor).
“En el video de Rojo, el 98% de la gente llora. Siempre soñé con hacer un video de reggaeton que le llegara a la gente. Quise ir más allá de música y sentir que somos vulnerables, que te haga pensar que puedes morir en cualquier momento (...) Yo quería que despertara algo”, explicó al medio puertorriqueño Rapetón.
El significado de cada color dentro del disco es explicado en Colores experience una serie de clips en los que J Balvin combina algunas notas de audio con los temas del disco. Esta es una producción exclusiva de Spotify, plataforma en la que Balvin estrenó su disco el jueves 19 a las 5 p. m. (hora de Costa Rica).
Sin embargo, Balvin es el primero en decir que cada persona tiene libertad de asociar una canción con el color que más le parezca.
Como una película
Desde el momento en el que disco salió, la emoción de la gente se volcó por el tema Amarillo, uno de los más animados de Colores y el que abre el álbum.
“Quería empezar bien arriba, que fuera como el tráiler de una película: o te engancha o no te engancha. Es lo mismo con el álbum, creo que la primera canción tiene que tener algo que haga decir ‘esta vibra me gusta’”, le explicó Balvin a Rapetón.
La energía del disco sigue en alto con Azul y luego Rojo, una canción más romántica pero igual de bailable.
“Fue casual que el disco iniciara amarillo, azul y rojo, como la bandera de Colombia”, dijo Balvin a Rapetón.
El disco continúa con Rosa, producido por Diplo de Major Lazer y con quien ya había colaborado en el tema Qué calor. Esta nueva colaboración es mucho más relajada.
“Se siente como sexi. La energía del color rosado es misteriosa pero (me recuerda a) la calma”, dijo Balvin en Colores experience.
Luego suena Verde, en el que se oye cantar a Sky, productor que ha trabajado con Balvin como desde la época del sencillo 6 AM (2013); esta fue su forma de devolverle el favor y presentarlo al mundo como un artista.
Negro es otra sorpresa agradable dentro del disco. “Negro es un perreo con un sabor ‘maliantoso’, es como el tema ‘calle’ del álbum. El sentido es como ese perreo que hace rato no se escucha. Como esos temas viejos de Héctor el Father”, aseveró.
Hacia el final oímos Gris, sobre una pareja que pelea y luego viene Arcoíris, canción en la que Balvin combina distintos sabores regionales.
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“Le llamo Arcoíris porque tiene de todo. Está ahí el sabor latino, el de Michael Brun de Haití, el de Nigeria y al final tenemos unos samples de una canción cubana, de Compay Segundo”, contó Balvin.
J Balvin en su estado más puro
El disco finaliza con Blanco, canción en la que Balvin no teme celebrar todo lo que ha logrado. Aparte de tocar en algunos de los mejores escenarios del mundo ha colaborado con marcas como Guess, BAPE y recientemente Nike.
En cada entrevista previa a la salida del disco Balvin afirma que le gustaría ser el primer billonario que se haya construido a punta de reguetón.
Gracias a Colores podemos ver claramente que si lo logra, es porque J Balvin siempre se ha enfocado en darle a la gente discos que se pueden escuchar de inicio a fin.
“Todo el mundo espera a que yo haga algo con Benito o con Myke Towers, o con todos los artistas que están duros ahorita, pero quiero que con este álbum la gente se conecte con J Balvin”, dijo a Alofoke. ”Si le gusta a la gente, pues la medalla me la llevo yo con mi equipo de trabajo; yo apuesto a mi trabajo”.