A poco menos de cuatro meses para las elecciones presidenciales, y justo cuando arranca la campaña presidencial, Viva corta el banderín de una nueva serie de especiales dedicados a los gustos personales y artísticos de los señores que aparecerán en las papeletas en febrero.
Navegando el lado más sensible de estos humanos, que se dedican al complicado mundo de la política partidaria, el primero de los especiales es sobre la música que mueve las fibras de los once candidatos a la presidencia de Costa Rica. Todos fueron interrogados sobre la materia, dándole énfasis a sus talentos musicales así como a la música nacional.
A manera de resumen, algunos datos reveladores de los contendientes a mandatarios son que, prácticamente, todos han desarrollado, de alguna u otra manera, algún talento musical, y si bien ya no tienen tanto tiempo para dedicarle a la expresión, todavía guardan cariño por la creación de notas.
Es notable que, entre los grupos musicales costarricenses mencionados, hay dos que casi estuvieron en boca de todos: Malpaís y Escats, además de Rogelio Cisneros, de Gaviota.
En próximas ediciones también podrán conocer otros gustos personales de los políticos, como sus preferencias en literatura y cinematográficas, así como temas de moda, estilo y las políticas culturales que incluirían en sus gobiernos.
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Johnny Araya / Partido Liberación Nacional
Afirma gustar de melodías que vengan acompañadas de letras con “alto contenido político”, destacando la música que tenga un “mensaje”. Sin embargo, no tiene tanto tiempo como para escuchar música periódicamente; pocas veces le da play a un disco en casa, pero cuando va en el carro sí lo hace, especialmente cuando va a la playa.
“Me gusta muchísimo la música trova, desde Silvio Rodríguez, Pablo Milanés, para citar los dos cubanos, hasta Joaquín Sabina”, comenta. Al igual que Sabina, otro español al que disfruta muchísimo es Joan Manuel Serrat.
Dicho eso, no es sorpresa que a Johnny Araya le encante la música de Malpaís, una de las grandes agrupaciones tradicionales de Costa Rica. No solo le gusta, sino que se declara seguidor: “Es uno de los grupos que más me entusiasmaba ir a escuchar”, dice.
Los últimos años de su alcaldicia indican que le interesa ser inclusivo con el talento local, pues su Municipalidad se encargó de abrirle puertas a varias bandas locales. Incluso, dijo que cree que la apertura de más espacios para la música nacional en la radio es un “esfuerzo que es importante hacer”.
Carlos Avendaño / Partido Restauración Nacional
El líder del Partido Restauración Nacional no detalló muchísimo sobre sus gustos musicales, pero dijo que el lugar en el que más escucha canciones es en su carro, que porta una pequeña colección de “música variada”, como le llama él.
Para Carlos Avendaño, entran dentro de la categoría de “música variada” artistas como Jesús Adrián Romero, Danilo Montero y otros grupos musicales cristianos, así como obras que alientan lo espiritual.
También es poseedor de una guaca de música instrumental. “Me gusta mucho el saxofón y me gustan mucho los violines”, cuenta.
“Hace poco adquirí un disco de música costarricense instrumental, con marimbas, y ese es el tipo de música que regularmente escucho”, añadió.
José Manuel Echandi / Partido Avance Nacional
Recuerda que de niño tomaba una raqueta y simulaba tocar guitarra. Siempre quiso aprender a dominar las cuerdas, pero no tuvo oportunidad, así que ahora se desquita con su hijo, a quien le ha comprado dos guitarras acústicas. Con o sin talento musical, está claro que el político lleva la música en la sangre, y se concentra en géneros como el rock y el jazz, además de música popular costarricense.
El concierto más reciente al que asistió fue el de Joan Manuel Serrat, en el 2008, pero siempre recuerda con mucha ilusión el de los Derechos Humanos, de 1988, en el que vio a Bruce Springsteen, Peter Gabriel y Tracy Chapman.
Su banda favorita es Toto, y frecuentemente escucha estaciones de radio como ADN y Radio 2. "Ahí está la música que me gusta y me tranquiliza", dice. Lo relaja el rock suave y melodioso.
En materia de música costarricense, hace hincapié en Malpaís. "Me parece muy buena la música de Fidel Gamboa, que ya no está. Mi canción favorita de ellos es Contramarea, que habla de un amor entre un tico y una nicaragüense. Hay otro grupo que se llama Escats, que también me gusta muchísimo".
Otto Guevara / Movimiento Libertario
"Mi relación es de escucha y de baile", alega Guevara. "Soy salsero, de música tropical, que es lo que normalmente escucho. Gilberto Santa Rosa y Marc Anthony son los dos principales exponentes de los cuales me gusta muchísimo su música. También me gusta la voz de un cantante como Luis Miguel, que indudablemente hace interpretaciones extraordinarias".
A Guevara la música no le llega solo por sus gustos, sino por los de sus hijos, que le han inculcado una que otra cosa, como Ojo de Buey, una banda costarricense de reggae que tenía un integrante que era compañero de su hijo en el colegio.
De música nacional, también le gusta el trabajo de Escats y Gaviota, con "la voz inconfundible e incomparable de Rogelio Cisneros", en sus propias palabras.
Una sorpresa es que el político ha tocado flauta y piano, por plena convicción de su madre. "De chiquillo, mi madre la pulseó. Me tuvo en clases de flauta durante un año, luego estuve en clases de educación ritmo auditiva, luego me metió en piano donde estuve cuatro o cinco años. No tenía oído; si usted me quitaba la partitura, hasta ahí llegaba. Ahí me di cuenta de que sin oído está uno jodido", dijo.
Óscar López / Partido Accesibilidad sin Exclusión
Le encanta la trova y la música romántica, y menciona a dedo a algunos de sus intérpretes favoritos: “Disfruto a Miguel Ríos, me parece que debió haber sido más exitoso porque qué tipo para cantar bonito y hacer canciones tremendas. Desde luego que (me gusta) Facundo Cabral, Mercedes Sosa, por supuesto, y el infaltable de Silvio Rodríguez”.
Dice que le encanta visitar recintos “sanos” donde “pueda escuchar música trova y hablar con la gente”. Aunque de la trova a lo romántico hay un pasito, y allí se encuentra otro de sus gustos. “Me encanta Ricardo Montaner, que para mí es un fuera de serie, y Ricardo Arjona. Esos dos, para mí, son buenísimos... y el Buki, por supuesto”.
Dice que a varios de ellos los ha podido escuchar en vivo: “He ido al de Vicente Fernández, El Buki, Joan Sebastian, Arjona, Franco de Vita, que es un monstruo”, comentó.
De su adolescencia trascendieron revelaciones importantes, como que amaba la música de Soda Stereo. “Yo usaba el pelo largo, con cola; era muy roquero. También disfrutaba de los Enanitos Verdes”, comenta, aunque también le gustan artista anglosajones, como Air Supply, Lionel Richie y Chicago.
Sergio Mena Díaz / Partido Nueva Generación
Dice que dejó de tocar el órgano a los 21 años, instrumento del cual sacó afinidades tropicales en su juventud. Sin embargo, hoy día, cuando visita la casa de su padre, a veces se sienta en el órgano y le saca filo a canciones como Perfidia y Juana la cubana. Es su placer esporádico.
Al candidato lo mueve la música en español, especialmente la costarricense. “He sido seguidor de Porpartes y Pato Barraza, en fin, de los esfuerzos nacionales”, alega. “Tampoco soy superfan, pero sí los escucho cuando puedo. También me gusta Escats, una banda que me parece muy buena. Ahora soy aficionado al pop suave, como el de Escats, y un poco más rápido”.
Considera que es “lamentable” que “nadie” apoye el talento nacional. De cara a esto, propone: “Yo trataría de crear algún incentivo para las casas radiales, tal vez desde el punto de vista fiscal. De hecho, tengo una audiencia con la Cámara Nacional de Radio y uno de mis puntos es ese, a ver qué me dicen”.
Otra de las relaciones de Mena con la música son los conciertos. Ha ido a ver a Ricardo Montaner y a Alejandro Sanz, acá en Costa Rica, entre otros artistas.
Héctor Monestel / Partido de los Trabajadores de Costa Rica
Don Héctor es un roquero de pura cepa. “Soy de la generación del rock. En ese sentido, me declaro un roquero del buen rock, del original, de los grandes clásicos, de Led Zepellin, Rolling Stones, y hasta de corrientes más modernas, no solo en ingles, sino también en español”.
Ama a Pink Floyd, y por ello al rock progresivo, y también ha nadado en las aguas del jazz, un género que dice que le encanta. “Hace rato que no ando en conciertos y esas cosas, pero sigo más o menos familiarizado con los grupos nuevos, no solo por gusto o cultura, sino porque mis hijos generalmente me acercan a ella”, agrega.
Su melomanía también lo ha llevado a enamorarse de música costarricense, y en ese sentido destaca la labor del finado José Capmany. “Incluso éramos medio amigos”, recuerda.
También le gusta la música de Rialengo. A todo esto, no es para menos que también se haya acercado a la música con sus propias manos: “Soy bajista”, revela, “pero no soy profesional. De vez en cuando, cuando tengo tiempo, lo conecto y punteo. Más que tocar, punteo; me pongo detrás de alguna salsa o hasta un jazz”.
Justo Orozco / Partido Renovación Costarricense
De Justo Orozco y su personalidad se sabe casi todo. El candidato se ha encargado de hacerle saber a todos su ideología y forma de pensar, prácticamente sin ningún tipo de censura. Pero, como todo ser humano, son quizá sus rasgos más íntimos y sensibles los que el público desconoce, como que se ha perdido en las seis cuerdas de su guitarra.
Al instrumento llegó durante sus estudios en la UCR, donde, para graduarse, tenía ciertos requisitos, como dominar un segundo idioma, mantener buena presentación personal y saber tocar un instrumento. “Lo que bien se aprende hay que ponerlo en práctica”, dice.
En cuanto a sus musas, Orozco pone en el trono a los cantantes Alberto Vásquez, Leo Dan, Palito Ortega y Mari Trini, todos apegados a su música predilecta: la romántica, las tonadas de amor. Su pieza favorita de Leo Dan es El caminito, y esto lo respalda recordando su vida de años atrás: “Diay, estaba joven, y cuando uno era joven, era inquieto”, dice sobre la canción.
Por lo demás, a Justo no le interesa mucho hablar sobre música, y desviaba las preguntas hablando sobre otros temas.
Luis Guillermo Solís / Partido Acción Ciudadana
Él y su esposa son acreedores de una gran colección de discos que se ubica en su sala, entre los que destacan obras de Jarabedepalo, Julieta Venegas, The Police, Marvin Gaye, Rosana, Debi Nova, Björk, Robbie Williams, Manuel Obregón y Pablo Milanés, entre docenas más.
Es fiel admirador de la música costarricense, y alega que le gusta mucho Sasha Campbell, Manuel Monestel, Cantoamérica y Son de Tikizia. “Cuando me siento más optimista, me gusta oír a Debi Nova, tiene unos ritmos que me gustan. De los viejillos, me recuerdan la juventud cuando salen piezas de Vía Libre, Abracadabra o esos que salen a tocar melodías del recuerdo”.
No tiene iPod ni usa la computadora para escuchar música; solo la escucha en discos. No ha ido a muchos conciertos recientemente, y dice que es probable que su última presencia en un show fuera en el de Gilberto Santarrosa.
Toca piano y sabe leer música desde niño. En casa, conserva un piano en perfecto estado, que le fue regalado por su madre, también en la infancia. El piano tiene más de 50 años, y es probable que su hija le saque provecho, pues lleva clases de piano.
José María Villalta / Frente Amplio
En su casa de habitación, conserva una pequeña pero especial colección de música. Cerca de la cocina, una repisa resguarda discos de Silvio Rodríguez, Víctor Heredia, Joan Manuel Serrat, Pedro Guerra, Bernardo Quesada, Vivaldi Shubert y El Reino de Bombón.
Su agenda es apretada; no va a conciertos, por lo menos no desde hace tres o cuatro años, según recuerda. “No es por falta de gusto, sino por falta de tiempo”, dice.
No es poseedor de un iPod ni ningún reproductor que no sea su computadora, desde donde disfruta de las melodías. Estudió guitarra clásica en la UNA, mas no terminó.
“Me gusta la música instrumental, la que refleja las tradiciones culturales de los pueblos, la música latinoamericana, pero también me gusta mucho el rock y el reggae; es un gusto diverso, no me cierro a ningún género”, comenta.
Resalta la labor artística de al menos dos agrupaciones costarricenses: Malpaís, que dice que todavía le gusta, pero que “con la partida de Fidel Gamboa hubo una gran pérdida”; y Sonámbulo, de la cual dice que su “fusión de ritmos latinoamericanos me parece sabrosa”.
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Participaron en la recolección y elaboración de estas entrevistas los siguientes periodistas de la revista Viva, de La Nación: Gloriana Corrales, Fernando Chaves, Katherine Chaves, Yendry Miranda, Jessica Rojas y Alexánder Sánchez.
Actualización, 05/10/13, 11:09 a. m.: Se cambió un verbo por uno más preciso en el texto de Óscar López.