A Madonna solo le bastaron $35 para pasar de ser una perfecta desconocida procedente del estado con mayor producción de camiones de los Estados Unidos, a convertirse en la mundialmente venerada Reina del Pop.
Madonna Louise Verónica Ciccone, nombre completo de esta hija de inmigrantes italianos y franco-canadienses, celebra este 16 de agosto 55 años de vida, éxitos, excesos, controversias, marcar tendencia y muchos amoríos.
Ante todo, ella festeja ser una estrella con luz propia, entorno a la cual gira el mundo de la industria; le guste o no a Lady Gaga, a los religiosos o cualquiera otro de sus muchos detractores.
Con su carrera, se ganó títulos de nobleza como la Reina del Pop, la Diosa del Pop y hasta el de Madre del Pop. Desde sus comienzos, cosechó premios, tantos que uno se pregunta dónde los guardará.
Es poseedora de siete premios Grammy, tras ser nominada en 27 ocasiones; además, ha recogido 20 estatuillas de los MTV Video Music Awards, tres de los American Music Awards, 14 premios Ascap y 39 Billboard Music Award, solo por nombrar algunos de los más importantes reconocimientos.
Ha vendido unos 220 millones de álbumes en todo el mundo, sin contar las ventas de sus sencillos. Y su música, temas como Like a Virgin , Vogue o Take a Bow , han acompañado a diferentes generaciones en sus tornamesas, walkmans , discmans y reproductores digitales.
La prometedora estudiante de danza, originaria de Míchigan, llegó a Nueva York con $35, al final de la década de 1970 . Quería ser bailarina profesional. La música le tenía otro camino, pero, en el fondo, ella sabía muy bien lo que quería en su vida: “Fama y fortuna y conquistar el mundo”, como se lo confesó a la cadena MTV.
Si alguien se cuestiona si en verdad en estas casi cuatro décadas de carrera alcanzó su meta, es solo cuestión de un breve repaso. Es una gran bailarina (su pasión inicial, como se lo dijo a Ellen DeGeneres), cantante, productora y hasta directora de cine, escritora y actriz .
Despegue. Los primeros cinco años de la década de 1980 fueron claves para un despegue astronómico. Hay hechos que hasta la fecha son imborrables, como su presentación en los primeros MTV Video Music Awards (1984) .
Si bien ahora casi cualquier estrella juvenil es más pecaminosa que lo que mostró la artista en esa gala, en aquel momento, Madonna dejó a los estadounidenses con la boca abierta cuando apareció en un vestido de novia, revolcándose por el piso y mostrando más de lo públicamente permitido para la época.
Ella dijo a la misma cadena, un par de años después: “El sexo mueve al mundo”.
Con cada año que transcurrió, cualquier cosa que hizo marcó tendencia. No solo en la música, también en campos como la moda, donde por años su estilo original inspiró a millones.
Aunque para muchos podía ser demasiado llamativo, por las cadenas, el cuero, las medias rotas y demás, ella se impuso y aseguró que era algo muy suyo. “A quién más se le ocurriría esto”, dijo en la década de 1990 al canal MTV.
En el siglo XXI, Lady Gaga parece experta en crear polémica, pero si una artista supo sacar réditos de los escándalos, antes que cualquier otro, esa es la intérprete de Vogue .
Controversias. Hay muchas polémicas y escándalos, pero es imposible pasar por alto las diferencias con la iglesia católica. Madonna, por ejemplo, aseguró que los crucifijos son sexis porque aparecen hombres desnudos. Como respuesta, el papa Juan Pablo II pidió a los feligreses que no asistieran a su gira Blond Ambition (1990), según recuerda la revista Time .
La fórmula no se le agotó: sexo, símbolos religiosos (en el 2006, ella se crucificaba como parte del show en su gira), excesos y música contagiosa son parte de su carrera.
Perfeccionista de pies a cabeza, vivió años pasándole por encima a quien fuera necesario. Eso es una jugosa anécdota que los medios citan y a los fans poco les importa: igual compran sus discos y asisten a sus giras, ayudándola a ser una de las cantantes más adineradas.
Eso sí, aún no tiene el lujo de ser parte del club de los $1.000 millones, selecto grupo de personas que acumulan esa fortuna, según cálculos de la revista Forbes .
En el amor se considera una romántica, según se lo confesó en una entrevista a Cynthia McFadden, del programa 20/20, del canal ABC .
Novios los ha tenido de todos los tipos. Estuvo casada con Sean Penn y Guy Ritchie ; se sabe que fue pareja de Prince, Camille Barbone, Mark Kamins, Carlos León (padre de la primogénita de la artista), y una lista que se extiende hasta nuestros tiempos, incluyendo al veinteañero Brahim Zaibat.
Si la artista alcanzó su objetivo de conquistar el mundo, ¿ahora qué sigue? Sin duda continuará disfrutando junto a sus dos hijos biológicos Lourdes y Rocco, así como sus hijos adoptivos Mercy James y David Banda.
Además, se mantendrá con su estilo de vida nada sencillo, porque, como le aseguró a McFadden: “Nunca intenté tener una vida convencional”.