Siempre polémica pero con la convicción de trabajar arduamente para sacar adelante su carrera como cantante. La costarricense Melissa Mora estrenó en agosto un video que, para ella, es el más importante hasta el momento porque la define mucho.
Dime que sí es el título del trabajo, un audiovisual que levantó tanto críticas como alabanzas por dos sectores muy diferentes de la población, pero que a Mora parece darle más fuerza y empuje para lograr su cometido.
Sobre esta producción, su carrera, planes a futuro y otros temas habló Melissa con Viva .
¿De dónde llegó la idea de hacer un video con una historia tan particular para el tema Dime que sí ?
Trabajo con mi productor Killa; la idea surge de él. Nos gustó la idea del peluche porque era como divertido y el modelo es mi hermano. Decidimos buscar una imagen fresca y joven que me ayude para verme más niña.
¿Qué refleja el video de su vida?
Refleja la sensualidad, refleja que ciertas veces las mujeres somos un poco lanzadas y queremos decir: “dime que sí”; la verdad es que en mi vida personal aplico la canción.
¿De dónde viene la inspiración de la letra, usted fue parte de la creación?
Había palabras que tuve que adaptarlas más a como somos las mujeres, porque la letra la hizo Killa; hice unos cambios pero todo fue dirigido por él.
¿Las otras canciones que ha presentado también son obra de otras personas y usted las interpreta?
Sí, creo que hasta ahora, que este es mi primer sencillo, me metí un poquito a hacer algunos cambios y adaptarlos a mi manera.
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¿Le gustaría escribir canciones en algún momento?
Sí, tengo algunos borradores, pero no es el momento en el que me siento segura para sacar una canción escrita.
¿Está contenta con el mensaje y la letra de las canciones que ha interpretado?
Sí, es parte de lo que estoy vendiendo; en algún momento haré otro tipo de canciones.
¿Qué expectativas tiene de su trabajo a partir de este nuevo video?
Mis objetivos ahorita son que Costa Rica esté contenta con mi nuevo material y que mis fans queden complacidos y también darme a conocer en otros países.
¿Si hay algo que no le gusta durante la producción, lo dice? ¿Tiene injerencia en las decisiones?
Vieras que no, yo disfruto mucho de mi trabajo. He tenido muchas veces diferentes cosas que no me gustan, pero las hago porque son parte del trabajo y son retos.
Si en algún momento se topa con algo que no quiere hacer... ¿decide hacerlo porque es la imagen que quiere vender?
Sí, o ciertas pruebas; por ejemplo, no solamente en fotos sino también en programas que he estado que tal vez no me gustan las pruebas de resistencia, pero tuve que hacerlas porque son retos, son parte del trabajo que hago.
En este momento está apostando todo al género urbano. ¿Le gustaría hacer algo diferente más adelante?
Alguna balada, también amo la ranchera y la música de banda pero en este momento no tengo público para hacerlo, porque ese género es más mexicano. Así que me quedo con lo urbano que es lo que vende mis shows .
Es lo que vende, pero a usted ¿qué es lo que le gusta de cantar reguetón?
Primero, porque en los shows les transmito alegría a la gente y eso se siente. Además, para una mujer es más fácil cantar balada; por eso (como un reto) quiero hacer cosas diferentes como el reguetón; me siento cómoda y lo disfruto muchísimo.
Ha tenido mucho apoyo de otros artistas del género como J-Maly, Banton y Osmani García. ¿Qué significan estos espaldarazos para su carrera?
Es muy bonito porque son experiencias diferentes y me gusta que me tomen en cuenta. Espero crecer, seguir haciendo dúos con grandes artistas, hacer un nombre y dejar en claro que hay una mujer que representa la música urbana y que se sale del esquema.
¿Cómo compara su trabajo como modelo y en la televisión con el de la música?
Es muy diferente porque cuando sos modelo cuidas tu figura pero tienes una vida muy normal; al ser cantante es muy difícil porque se anda de gira promocionando, hay que compartir con fans y ser más activo en redes sociales. Estar en una tarima cantando es muy diferente a hacer una pasarela.
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¿En qué se diferencian para usted?
En la pasarela solo se es una cara bonita: hay que pasar, desfilar y ya; pero en tarima hay que saludar a las personas y si el ambiente está muy apagado saber manejarlo y contagiar a la gente con el carisma.
¿Técnica y profesionalmente cuáles son las exigencias que ha tenido como cantante?
Muchas. Ahora estoy en clases de canto con la profesora Cristina Vargas; recibo las lecciones una vez a la semana desde aproximadamente cuatro semanas (la entrevista se realizó a finales de agosto).
¿Qué otro tipo de clases recibe?
De dicción, modulación, interpretación y manejo de escenario.
¿Por qué se decidió tomar clases ahora si ya hace mucho tiempo está cantando?
Porque ahora mi mánager me lo aconseja; quiero crecer porque ahora lo veo como una profesión. En algún momento cometí el error –bueno no fue un error– fue una experiencia de estar en un programa de televisión y eso me quitaba todo el tiempo y no tenía tiempo para mis shows y para grabar.
¿Cuándo comenzó el sueño de ser cantante?
El sueño de ser artista, desde niña. Cuando tenía 15 años me contrataron para un catálogo de ropa y ahí fue creciendo todo esto... se fueron abriendo las puertas.
“La decisión de cantar llegó porque si hacía eventos de modelo no podía cobrar muy diferente a las demás; entonces, me propuse hacer algo distinto y creé el show de Melissa Mora para cantar y bailar”.
¿Cuándo fue esa primera presentación, ese primer contrato para el show de Melissa Mora?
La primera experiencia fue antes de tener a mi hija; surgió que abrían el Tango India VIP. Después de tener a mi hija, cuando era novia de Bryan (Ganoza), hicimos un evento en San Carlos y ahí canté, alegré a la gente y me di cuenta de lo diferente que era a hacer una pasarela. Con los covers tuve la experiencia de trabajar en Miami y Nueva Jersey 15 días, y como siempre lo he visto como un trabajo, parte del dinerito que me llegó lo invertí en mi primer video: A mover el Bam Bam.
¿De cuánto fue esa inversión?
Como $3.000. De esa gira en Estados Unidos me quedó mi platita e invertí.
¿Ganó algo con el video del Bam Bam ?
Claro que sí, porque uno se va de gira, hubo trabajos en la frontera panameña y varios trabajos con Banton.
Los videos y esas contrataciones la llevaron al show que hizo en los Billboard y a un desfile por la alfombra roja de los premios Tu Mundo. ¿Qué le han dejado esas experiencias?
Es bonito porque son experiencias que hay que vivir. Lo de los premios ya lo pasé, ya lo viví y ahora lo que queda es trabajar; si tengo que volver a vivir esas experiencias, excelente, pero estoy concentrada trabajando.
¿Qué opina de las críticas que recibió por sus presentaciones en los showcase de los Billboard?
Ellos me critican porque no estuvieron. Yo fui de las mejores presentaciones que hubo en el showcase y no lo digo yo, lo dicen las demás personas; este año cerré el show y la gente estaba como loca y ese era mi objetivo: darme a conocer, rodearme de gente conocedora. La gente habla porque ellos están aquí y yo estaba allá.
¿Qué le dice a la gente que la critica?
Que sigan igual, yo no les voy a cambiar la opinión. Yo vivo y trabajo para quienes me apoyan y les gusta mi trabajo.
Siendo sinceras, todo este trabajo está basado en su apariencia física, ¿está trabajando a partir de ella o considera que no es así?
No, pero ayuda mucho. Es obvio que mis seguidores quieren verme, todo empieza por ahí, pero de que hay talento, hay talento. Si no hubiera talento, no tuviera personas que me siguen.
Pero, por ejemplo, sus canciones no se escuchan en radio solo se ven en videos...
Aquí no tanto, pero afuera me apoyan más. Estoy feliz por el momento porque si no me apoyan en mi propio país, tengo muchas visitas en mis videos de YouTube, se venden mis shows y ese es el objetivo.
Todo el país ve sus videos, la gente está pendiente. Consideraría en algún momento no grabar videos y solo grabar audio. Lo ve factible.
Sí, pero con solo el audio se puede mover la canción pero no tiene el mismo efecto; todos los artistas tienen que hacer video, van de la mano.
¿Haría un disco arriesgándose a dejar la imagen un poco de lado?
Sí, claro que sí. Yo podría sacar mi disco ya con los artistas que he colaborado, pero no lo voy a hacer porque quiero hacerlo como solista con canciones nuevas.
Hubo muchos comentarios en el canal de YouTube sobre el video, pero ahora los comentarios están bloqueados. ¿Que fue lo que pasó?
Yo trabajo con un personal en mi página. Cuando hay comentarios negativos se eliminan para que mi entorno no sea feo o negativo. Yo quiero cosas positivas en mi vida. Si tanto le molesta a la gente lo que hago, ¿por qué se meten a mi página, ven mi perfil y escriben? Yo no me tomo el tiempo para escribirle algo a alguien que no signifique nada para mí. Ahí es donde se ve –como decimos los ticos– la chimazón; la gente chimada lo que hace es criticar.
¿Esas críticas le han robado el sueño?
En algún momento ciertas cosas sí me duelen porque uno dice: ‘¿por qué la gente dice estas cosas si a mí me ha tocado trabajar duro?’, pero yo voy en mi línea. Si le hiciera caso a todo lo malo que dice la gente, no sé dónde estuviera.
¿Se ayuda con tecnología para arreglar su voz en los videos?
Por supuesto que uno está en un estudio de grabación y tiene que masterizar la canción y es normal en cualquier artista; para mí eso está bien.
¿Va a seguir modelando?
También, no lo descarto; sigo haciendo fotos porque tengo contratos por año, pero ahora lo hago menos.
Usted misma dice que es una persona muy creyente y con mucha fe; incluso, contó que el día antes de grabar el video Dime que sí fue a la Romería?
Sí, llegué a las 3 a. m. Le pedí a la Virgen por la salud de mi mamá, de mi familia, la mía y por la grabación del video. No soy una persona de meterme en iglesias, de vez en cuando hacemos células en mi casa para estudiar la Biblia. Soy más de creer en los 10 mandamientos y le agradezco a Dios todo lo que me da.
¿Quiere seguir vendiendo su imagen sensual, esa va a seguir siendo su carta de presentación?
Sí, puede ser que con el tiempo vaya cambiando, pero por ahora sí. Cada quien toma la imagen sensual como quiera, eso depende de los ojos de cada persona. Yo no voy a dejar de ser así porque me haga más o menos, cada quien piensa lo que quiera.