La legendaria cantante de ópera estadounidense Jessye Norman murió este lunes a los 74 años, según informó su familia en un comunicado.
La soprano ganadora del Grammy murió debido a un choque séptico y a una falla multiorgánica, resultado de complicaciones de una lesión de la médula espinal sufrida en 2015, según el comunicado obtenido por AFP a través de una portavoz.
“Estamos muy orgullosos de los logros musicales de Jessye y de la inspiración que brindó a audiencias de todo el mundo que continuarán siendo una fuente de alegría. Estamos igualmente orgullosos de sus esfuerzos humanitarios que abordan cuestiones como el hambre, la falta de vivienda, el desarrollo juvenil y la educación artística y cultural", se lee en la declaración familiar.
Norman nació en Augusta, Georgia, en setiembre de 1945. Su pasión por la música apareció de forma orgánica, pues nació en una familia de músicos que, a pesar de no haber realizado estudios formales académicos, aprendieron a convertirse en músicos por mera afición: su madre era pianista y su padre cantaba en un coro local.
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En su temprana adultez, Norman recibió una beca para ir a la Universidad Howard, donde se graduó en 1967. Posteriormente, ingresó a la Universidad de Michigan, donde obtuvo una maestría en 1968.
Al año siguiente, ganó la Competición Musical Internacional ARD en Múnich y se abrió las puertas para realizar una carrera de lleno en el mundo lírico. Su debut operístico fue en 1969 como Elisabeth en la obra Tannhäuser de Richard Wagner, junto a la Ópera Estatal de Berlín.
Su regreso a Estados Unidos fue muy bien recibido, pues de hecho significó su consagración. Para 1983 debutó en su propio país en el Metropolitan Opera con Les Troyens de Hector Berlioz. Fue un concierto de grandes luces, pues se realizó en el marco de la celebración del 100.º aniversario de la compañía.
Su carrera operística se recuerda con especial aprecio por su personificación de Ariadne, Casandra, Dido, Alceste y Leonora en Fidelio.
La soprano ganó cuatro Grammys en la categoría Opera Recording. Los ganó en 1989, 1990 y 1999. En la categoría Classical Vocal Solo, ganó en 1985 por su interpretación de canciones de Ravel.
Además de Ravel, Norman fue ampliamente aclamada por sus grabaciones de canciones con orquesta de temas de Mahler, Strauss, Berlioz, Berg y Schoenberg.
Su trayectoria la terminó coronando como una de las grandes voces afroamericanas que alcanzaron el éxito profesional en Estados Unidos, junto a nombres como Marian Anderson, Leontyne Price, Grace Bumbry, Martina Arroyo y Shirley Verret.