“Jenny Castillo fue una gran estrella para mi generación, que fuimos los chiquillos que crecimos con Las estrellas se reúnen. Verla estar en televisión y tener ese pegue con todo y las giras, la hizo muy famosa en tiempos donde no era nada fácil serlo”, así recuerda el experto en música Alberto Zúñiga la importancia del trabajo artístico de la cantante Jenny Castillo quien falleció este martes 7 de julio, a los 55 años.
La artista logró alcanzar un estatus de estrella en las décadas de los años 70 y 80 gracias a su particular voz y forma de interpretación con temas como Plegaria de una niña y Pobre gorrión, cuando apenas era una niña. Castillo falleció después de tener complicaciones tras haberse sometido a una cirugía gástrica semanas atrás.
“Tenía una voz muy particular, no había otra parecida en el país aunque creo que después salieron varias imitaciones. Parte de su éxito fueron los arreglos de sus canciones que correspondían a todo un estilo de música popular romántica que estaba en lo más alto en esas épocas; ella se ajustó al momento y la pegó”, agregó Zúñiga.
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Según el experto, para esos tiempos Jenny Castillo y el cantante Memo Neyra eran los artistas más populares.
Con él concuerda el productor Alfredo Chino Moreno, quien ya tenía una amplia trayectoria en radios y en la escena musical cuando Jenny llegó a lo más alto de la música en el país.
“Era una persona con una sonrisa permanente, con una mirada dulce. Siempre estuvo acompañada de su ángel guardián que era su papá. Él se encargó de impulsar su carrera y gracias a eso pegó muchas canciones. El público la quería mucho”, recordó Moreno.
Según Moreno, el éxito de Jenny también se debió al buen olfato de productor que tuvo su padre porque supo escoger las canciones y los arreglos correctos. “Eran muy buenas personas los dos, se les notaba que tenían una buena intención en lo que estaban haciendo”, agregó.
“Es una gran pérdida para la música del país. Era muy buena cantante, no sé por qué dejó de cantar tan temprano porque los costarricenses la querían mucho. Su partida me duele mucho, primero como persona porque es un ser humano, luego como artista porque tenía un gran talento”, comentó la cantante Sandra Solano.
La intérprete reconoció que Castillo tuvo atributos que la llevaron pronto a convertirse en una estrella de la época. “Destacaba mucho por su edad, porque comenzó muy jovencita. Sé que ganó un festival, participó en programas de televisión muy bonitos, fue una novedad para el país”, agregó Solano.
El locutor y comediante Opo Marín fue amigo de Castillo durante varios años, se conocieron desde muy jóvenes. Durante años mantuvieron un contacto cercano y hasta departieron en una entrevista cuando Marín trabajaba en la radio Omega.
“Jenny dejó una huella muy importante en la música porque en esa época no era usual ver a una mujer en un escenario cantando y menos cantándole al amor siendo tan niña. Fue una de las consentidas de Santiago Ferrando (presentador de Las estrellas se reúnen) junto a otros artistas como Memo Neyra o David Loáciga; era impresionante verla compartiendo escenario con personas adultas”, recordó Marín.
El comunicador confirmó además que la voz de Castillo se convirtió en un sello propio que hacía que el público la identificara fácilmente.
Otra artista que recuerda a Jenny con mucho cariño es la cantante nacional Vanessa González. Ellas departieron en el 2017 en el programa Tu cara me suena, de Teletica, cuando González tuvo que representar a Castillo en la competencia.
“Yo la había escuchado muchos años antes, mis papás me contaban que era una gran cantante y para mi sorpresa costarricense. Cuando tuve el honor de conocerla descubrí que era una mujer muy tranquila, amable y callada, pero cuando cantaba le movía a uno todas las fibras”, contó González.
Ambas tuvieron la oportunidad de estar juntas en el escenario de Tu cara me suena y Vanessa afirma que la conexión como artistas fue impresionante para ella. “Vimos la manera de cómo emular su sonido, de cómo manejar el escenario para que nos viéramos como en un espejo. Fue una de las experiencias más bonitas que tuve, creo que quien vio la presentación logró sentir la buena comunicación que logramos”, concluyó la intérprete.
“Desde pequeña fue una de las ahijadas de don Santiago Ferrando, él le dio muchas condiciones para ayudarla en el programa porque aunque era muy pequeña tenía grandes cualidades. El público la quería mucho primero porque era una niña muy sencilla y a la gente le gusta eso, después porque cantaba hermosas canciones; recuerdo que no le tenía miedo a las cámaras para nada”, explicó Jorge Flores, quien fungió como productor del programa Las estrellas se reúnen.
Despedida
La familia de Jenny Castillo informó de que este miércoles 8 de julio se llevará a cabo la vela en la capilla del Magisterio, en Paseo Colón, a partir de las 10 a. m. Debido a la situación que vive el país por la pandemia del nuevo coronavirus los familiares tomaron la decisión de organizar la despedida con horarios para que las personas cercanas a Jenny puedan decirle adiós.
Así las cosas, los primeros en poder asistir serán los compañeros del INS y Bomberos que trabajaron con Castillo; luego, cada hora, habrá un cambio de grupo.
Dentro de la capilla solo podrá entrar una cantidad mínima de personas con el fin de mantener las distancias sociales y quienes asistan deberán hacerlo guardando todos los protocolos de salud como el lavado de manos, uso de alcohol en gel y de mascarillas o caretas.
A las 11 a. m. la visitarán los compañeros de la Universidad Latina, luego la familia Castillo, la familia Chaves Molina, la familia Quesada y otros amigos cercanos.
El funeral será este jueves 9 de julio, en la iglesia de Moravia, que también bajo los protocolos de salud solo puede recibir el 50% del aforo.