“Siento una gran calma porque he logrado todo lo que he querido y más”, comenta Enrique Martín. Quizás por su nombre de pila no sea muy conocido; hasta podría pasar inadvertido. Pero cuando se menciona Ricky Martin, la frase inicial cobra demasiado sentido.
En sus 30 años de carrera ha vivido de todo: fue de los primeros latinos en hacer el crossover al mercado anglosajón, ha tenido muchas de sus canciones de número uno en las listas de popularidad, ha vendido más de 60 millones de discos, ha sido honrado por la Academia Latina de la Grabación como Persona del año y ha sido nombrado por Billboard como “un icono internacional y embajador global de la música latina”.
Las mujeres también lo consideraban todo un sex symbol ; cualidad que disminuyó cuando, desde el 2011, se convirtió en una de las figuras más reconocidas de la comunidad homosexual.
En la actualidad, es padre de los gemelos Valentino y Matteo; y, desde el 2013, es coach en el programa australiano The Voice , trabajo que, dependiendo de la perspectiva con la que se analice, se puede tomar como un gran éxito o como el peor fracaso para un artista que, en la década anterior, podía llenar hasta el Madison Square Garden, en Nueva York (Estados Unidos).
Este martes, el artista lanza su décimo disco de estudio, A quien quiera escuchar , que sigue la línea pop que lo ha caracterizado desde siempre.
Este álbum –que es el sucesor de Música + Alma + Sexo (2011)– está conformado por 10 canciones en español; mientras que la versión deluxe tendrá 13 temas. Fue producido por el mismo astro puertorriqueño, el español Rayito (Malú, David Bisbal y Chayanne), el cubano Yotuel Romero (Orishas) y el estadounidense Belief (Sia).
Como Martin quiere que este nuevo material llegue a todos los oídos posibles, hará diferentes versiones para Turquía y Alemania. De hecho, su primer sencillo, Adiós, también está en inglés y en francés.
Con motivo del lanzamiento de A quien quiera escuchar , el puertorriqueño concedió una entrevista a Viva desde Australia, país donde vive desde hace tres años. Su representante fue muy enfática con el tiempo: debía de durar 15 minutos, no más, no menos.
Sin embargo, cuando apenas habían pasado seis minutos de conversación, la mánager cortó la llamada entre este diario y el artista “porque se ha acabado el tiempo”.
Antes de que la representante interviniera, Martin explicaba cuál incidencia ha tenido en su carrera el haber aceptado, en el 2011, que era homosexual.
“Es lo mejor que me ha pasado en la vida, admití que soy gay por una cuestión de dignidad y autoestima. Ahora yo me quiero más y eso se percibe a kilómetros de distancia”, respondió satisfecho antes de que colgaran la llamada. Actualmente, él está soltero.
Acá un extracto de lo que Ricky Martin alcanzó a hablar con Viva antes de que cortaran la conversación.
Tiene 30 años de estar inmerso en la música. ¿Qué siente al mirar hacia atrás?
Lo que más tengo es puro agradecimiento, soy un hombre muy afortunado. He logrado todo lo que he querido; estos años he estado rodeado de diferentes seres humanos que me han ayudado a cumplir mis sueños, porque es algo que no hecho solo. He tenido grandes representantes, productores y músicos que me han ayudado a ser quien soy.
”Estoy agradecido porque en este tiempo he podido llevar mi idioma a muchas partes del mundo; he hecho crossover , teatro, televisión. Disfruto de mi biografía y, a este punto, tengo esa calma por haber logrado todo lo que he querido”.
Si bien es cierto que las letras son bien sentimentales, el disco es bailable. ¿Cuándo volverá el Ricky Martín de las baladas?
Para mí es el más romántico que he lanzado, porque ¿quién le dice que no al romanticismo? Nadie. Pero tienes razón, también trabajamos la fusión, porque soy latino y, aunque viva en Australia y he pasado casi toda mi vida en Estados Unidos, aún tengo esa vena latina que me gusta explotar en mi música.
”No siento que ese Ricky Martin se haya ido, solo fue que evolucionó. Las letras siguen siendo bien románticas, pero la música va más rapidita para encontrar un balance. Es un disco con mucho romanticismo y con el coqueteo necesario para pasarlo bien en una fiesta”.
Ha dicho que el vivir en Australia le ha permitido fusionar culturas. ¿Cómo siente que esto ha influido en el nuevo trabajo?
Es una experiencia que me ha hecho mezclar muchas cosas y también me ha hecho volver, de alguna manera, a mis raíces, a mis orígenes musicales.
”He vuelto a lo maravilloso que es disfrutar de un buen piano, un buen acordeón, un buen chelo o una buena trompeta. Creo que esa fusión provocó que fuera uno de mis discos más ricos, musicalmente hablando. Una vez más, estoy llevando mi bandera a todo el mundo.
”Espero que sea aceptado en países no hispanoparlantes. Para eso, vamos a hacer diferentes versiones para Turquía, Alemania. Estamos trabajando fuerte para romper las fronteras y unir culturas”.
En entrevistas, usted dijo que este disco sería de los más personales que ha compuesto. ¿Qué lo llevó a materializar lo que ha vivido?
Lo que hago es encerrarme en un estudio durante nueve meses y no hago otra cosa que no sea crear música. Todo fluyó de una manera tan linda, tan orgánica. Cuando empecé a trabajar este disco tenía un lienzo en blanco delante de mí; no tenía idea de qué iba a hablar, porque habían sido años bastante ocupados en lo profesional.
”Antes de empezar a grabar tengo un tema con el cual me obsesiono, y empiezo a tratar de escribir sobre este tema, pero esta no fue la ocasión. El primer tema lo grabé en Australia y fue Mátame otra vez y, honestamente, yo lo que quería era compartir cosas por las que he pasado, pero también compartir cosas que he visto en esta vida.
”Salió un disco bastante romántico, pienso yo, y también con su toque de fiesta y coqueteo. Es donde estoy, no tengo una careta, estoy hablando con transparencia cosas que he vivido, cosas que hasta mis mismos compositores han compartido.
”Cada historia tiene nombre y apellidos, y tiene una fecha. No quiere decir que todo lo que estoy hablando en este disco es lo que haya pasado en el último año”.
Precisamente, la canción Isla Bella es dedicada a Puerto Rico, su tierra natal…
(Interrumpe) ¡Sí! Es una canción que habla de mis sentimientos, de la nostalgia que me da cuando estoy fuera de mi tierra. Todo aquel que ha tenido que dejar su país para buscar una mejor vida en otro se va a identificar, venga o no de una isla.