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En el 2017, Juan José Altmann, gerente de marca de Imperial, se propuso extender la presencia de la Barra Imperial en distintos puntos del país y enriquecer su oferta musical.
Un año después, Altmann se muestra satisfecho con los resultados de conciertos tan variados como los del reguetonero Yandel, el salsero Víctor Manuelle, la banda de reggae Los Cafres, y el afamado DJ Afrojack.
La Barra Imperial operó en Palmares del jueves 11 de enero –día del tope– y hasta el pasado domingo 21, y durante esos días logró reunir a 36.000, mil más que en el año anterior. La apuesta por la variedad, pagó.
Además, este año la marca patrocinará los festivales de las plataformas artísticas Grito Latino (3 de marzo) y Epicentro (22 de abril) y su propia actividad, Capital Imperial (2 de junio).
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Tras Palmares, ¿cuál es su balance de la Barra Imperial?
– Estoy muy contento porque superamos la cantidad de personas que esperábamos, la sobrepasamos. Eso quiere decir que la propuesta que llevamos a la barra y al escenario de El Patio funcionó. No solo resaltamos la cantidad, sino la diversidad de públicos que nos visitó; fueron públicos distintos a ver a Afrojack y Beenie Man, por ejemplo, y creo que todos los días el público varió.
¿Cuánta gente los visitó?
– No hemos cerrado los conteos, pero anda alrededor de las 36.000 personas.
¿Cuál fue el concierto que atrajo a más público?
– El que estuvo sold out fue el de Fyah Red (concierto con Beenie Man). El menos lleno fue el del domingo 21, dado que teníamos afuera el concierto de Wisin y solo pusimos una banda nacional (Buena Calle) y tal vez el otro fue el de Nocturnal (presentación de Technasia), que fue una actividad de calidad, pero más de nicho.
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El complemento de ese escenario fue El Patio, ¿qué colocaron allí?
– El año pasado yo le decía al equipo: ‘aquí nadie puede bailar’, para hacerlo más tranquilo, pero este años quisimos complementar. Si estaba en la barra Technasia, que afuera hubiera charanga; si estaba adentro Afrojack, que afuera estuviera Diesel tocando rock.
"El Patio nos permitió darle espacio a grupos nacionales consolidados –como Ojo de Buey–, pero también a otros como Sebas Guillem o Sapo & Myles, para tener un espacio adicional para talentos que se desarrollen".
Tras Palmares, ¿cuál es el enfoque de este año?
– Primero, queremos continuar nuestro compromiso con la música nacional. El año pasado nos vimos en las conferencias de Exponencial que fue un esfuerzo para eso y que ahora complementamos con la Barra.
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"Los músicos que asistieron a las conferencias fueron invitados a la Barra y ahí tuvieron contacto con mánagers y agentes que conversaron con ellos. Queremos seguir dándoles herramientas y las vitrinas para que se expongan".
Vienen dos festivales patrocinados por ustedes y su propia actividad, Capital Imperial...
– Capital regresará el 2 de junio, estamos terminando de afinar la propuesta. Vamos a estar también en el Grito Latino, que es otra plataforma que la marca ha venido apoyando, y que viene muy fuerte con los Cadillacs, Jumbo y otros grupos de rock, que en los personal me gusta esa propuesta.
Hace mucho la oferta de entretenimiento en Costa Rica es de grandes fiestas, lideradas por reguetón o conciertos muy puntuales. Entonces queremos romper ese esquema para dar otras opciones.
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También nos sumaremos a Epicentro, que ha tenido actividades puntuales y que ahora viene con una propuesta más grande que también reunirá talento internacional con artistas nacionales.
En todas las actividades habrá relación entre esas dos partes, ¿por qué quieren darle tanta importancia?
– Bueno, yo soy músico, aunque ya no toco (risas). Y por eso entiendo las dificultades que puede haber en el proceso de profesionalización. En estos días hablé con Cayeto de Ojo de Buey y él me contaba que él estudió administración y por eso ha podido llevar a cabo sus ideas.
"Pero sabemos que muchos músicos increíbles que tienen más retos en la profesionalización y no debería ser así, para eso existen mánagers, agentes, personal que les ayude".
Epicentro se percibe cercano al festival que hizo Imperial en tres ocasiones, combinando grandes artistas anglo y latinos. ¿Quiere recapturar a ese público?
– Creo que Epicentro, al igual que Grito Latino, vienen a dar una propuesta para esas personas que les gusta el rock, que tal vez no salen todos los fines de semana pero ahorran su dinero para montarse en un avión hacia un festival a Colombia, México o Estados Unidos y que buscan experiencia nuevas.
"Si bien vendrán algunas de sus –y nuestras– bandas favoritas, más que ir a ver una banda, queremos que vayan a vivir una experiencia. Ese es el objetivo de Imperial en todo lo que apoyamos: crear experiencias, que son, por así decirlo, la nueva moneda de cambio".
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"Tal vez cuando yo era adolescente, el momento más cool era conseguir en una tienda ese disco que era casi imposible encontrar. Ahora las personas comparten ese mismo sentimiento al ver en vivo a tal banda en tal festival, y tener el chance de poner un Instagram story. Esa es la nueva moneda de cambio de los jóvenes y eso es lo que tratamos de construir: experiencias memorables".
