Color más música, es igual a arte. Esa fue la fórmula que aplicó el artista argentino Wos en su primer concierto en Costa Rica, este sábado 15 de abril. Durante dos horas, en el Parque Viva, el rapero llevó a su público por una descarga de rimas intensas, que acompañadas a la perfección por luces de colores lograron que sus fans conectaran mejor con sus letras.
Fue una combinación bien pensada, tal vez con un análisis previo para que el oído se confabulara con la visión y, de esta manera, recibir de una manera más directa el mensaje de las canciones.
LEA MÁS: Fufu: la voz no binaria del rap y el trap tico
En La Guácima, cientos de personas se reunieron para cantar con Wos sus éxitos, pero también para demostrar que la escena urbana en nuestro país es sólida, no solo por sus artistas, sino también por un público que conoce y valora a los buenos exponentes.
Antes de que el argentino saliera a escena, entre la audiencia se divisaron muchas camisetas de la Selección de fútbol de Argentina. Remeras con rayas horizontales de colores blancas y celestes, muchas de ellas con el número 10 en la espalda y destacadas con los grandes apellidos de Messi y Maradona. ¿Qué tiene que ver el fútbol con el rap? En este caso todo, porque no hay Argentina sin fútbol y, en la actualidad, no hay Argentina sin rap.
Wos es uno de los más importantes representantes del género de su país, viene de una camada de artistas que dieron sus primeros pasos en las batallas de freestyle pero que encontraron en la composición y producción musical su camino. Son los nuevos representantes de la música argentina, así como también lo han sido grandes del rock, el ska y el tango. Wos es la prueba fiel del poderío del rap de su país.
Azul, blanco, negro, rojo... y púrpura
A eso de las 8:30 p. m. y luego de muchos coros del público cantando “Wooosito, Wooosito”, en las pantallas se proyectó un faro gigante con una luz blanca intensa, la cual alumbró a la audiencia. Fue una señal para no despegar la vista de la tarima.
Con una gran presencia escénica apareció Wos. De fondo, el color rojo de la pasión fue el gran protagonista. El artista, acuerpado por una banda de batería, bajo, guitarra eléctrica y teclados, comenzó a cantar Buitres. Desde ese momento el Centro Printea, del Parque Viva, comenzó a vibrar, no solo por la intensidad que se vivía en el escenario, sino porque todo el público brincó a más no poder al ritmo del argentino.
De seguido, el rojo pasó al azul, explorando con ritmo la tranquilidad y la confianza. Siguieron tonos pasteles mucho más alegres, también hubo algo de neón. El repertorio siguió su camino con Culpa, Alma dinamita, Convoy Jarana y Okupa.
Wos fue de poco hablar, tuvo un par de intervenciones directas hacia el público, pero rapeando fue como se expuso más a sí mismo. Con las letras de sus temas compartió sentimientos que, de acuerdo a la reacción de sus fans, ellos también experimentan. El desahogo de todos fue cantando.
“Traigo unos versos que son reflexiones que aparecen en los domingos de ansiedad”, dijo. De pronto, el color verde arropó la escena y sonó Lleno de zafiros.
En ese espacio, Wos aprovechó para dar una pequeña muestra de improvisación, esa que lo llevó a dar sus primeros pasos en la música. Con rimas excitantes, el argentino le dedicó unas barras a nuestro país. Mencionó el ‘Pura Vida’ y también honró el talento futbolístico de Keylor Navas. La gente respondió emocionada.
El show de Wos fue pura energía, candela de la buena. Con su baterista hizo un back to back de beatboxing y con su guitarrista y bajista pasó toda la noche interactuando: se trató de una complicidad envidiable, que los llevó a viajar del rap a los sonidos del rock y del ska. Las fusiones que presentó Wos en su concierto, gracias a la versatilidad de tener instrumentos en escena, fue impactante.
Blanco, negro, amarillo, rosa y celeste desfilaron en el escenario junto a canciones como Contando ovejas, Melón vino, Canguro, Mirá mamá, Gato Negro y, por supuesto Púrpura, con la que cerró su gran actuación.
Wos llenó su primer show en suelo nacional. Posiblemente esta no será la única visita del sudamericano a nuestro país, porque su público costarricense lo admira, pero sobre todo, lo respeta.
Fufu, el poder tico
En la apertura del concierto de Wos, Fufu se encargó de poner la nota de música costarricense.
Su presentación fue una descarga de adrenalina. Con una visible emoción, Fufu se dejó llevar por los sentimientos más de una vez y mostró su agradecimiento hacia el público que recibió sus canciones con cariño.
La alegría de cantar en su tierra natal y de ver que la audiencia aplaudió y coreó todas sus canciones, no pudo ocultarla. En más de una ocasión, a Fufu se le cortaba la voz de la emoción. Brincó, bailó, gritó, sonrió y posiblemente dejó salir algunas lágrimas de felicidad.
Nitro, Que se vengan, Delitos, Again, Complicado, Jarabe y Fanta, Sleepy, Rápido y la nueva Tiki Taka; fueron parte de la lista de canciones que interpretó.
Fufu, quien ha desarrollado su carrera en los últimos años desde Estados Unidos, tuvo una presentación intensa de principio a fin y los ticos le demostraron un gran respeto por su trabajo.