Roma
El célebre pintor colombiano Fernando Botero tomó parte en las celebraciones del Jubileo en Roma con una original exposición en la que revive con una mirada contemporánea el Viacrucis de Cristo, como un homenaje al calvario de los que sufren.
La exposición, que incluye 27 óleos de gran formato y 34 dibujos, de propiedad del Museo de Antioquia, ubicado en Medellín, la ciudad natal de Botero, permanecerá abierta hasta el 1 de mayo en el prestigioso Palacio de las Exposiciones de la capital italiana.
"Viacrucis" cuenta con una mirada 'pagana' los últimos días de Jesucristo, cuando fue hecho preso, condenado a muerte, crucificado y sepultado.
"El tema es religioso pero con una visión seglar, pagana, porque Botero se toma libertades en la descripción de las narrativas, no es fiel, ni le interesa serlo", explica Nydia Gutiérrez, curadora jefe del Museo de Antioquia en una charla con la AFP.
En efecto, el Cristo del maestro colombiano es obeso, aparece crucificado en el corazón de Nueva York, es maltratado por un policía latinoamericano y cae varias veces por las calles de un pueblo típico suramericano.
Como artistas de la talla de Miguel Ángel, el Greco, Velázquez, Rafael, Rembrandt y Caravaggio, Botero, de 83 años, se mide libremente con el tema religioso, las formas, el volumen, los colores y mantas respetan su estilo y deformaciones, en ocasiones abundantes y rechinantes.
"Están cargadas de las virtudes de Botero, de la capacidad de comunicar valores culturales propios en un lenguaje universal", explica Gutiérrez.
La pasión de Cristo según Botero fue realizada entre 2011 y 2012, dos años en que el maestro colombiano pintó y dibujó personajes bíblicos, todo un desafío para un pintor y escultor que brilla por sus figuras gordas, bonachonas, ingenuas, irónicas.
"La excusa de un tema dramático pone a prueba sus capacidades de pintor, pero siempre ligado a asuntos culturales y personales, que lo hacen humano", dice Gutiérrez.
La serie, que permanecerá expuesta durante la Semana Santa romana, justo el año en que se celebra el Jubileo convocado por el papa Francisco, representa otra ruptura con su obra pasada, como los dibujos de Abu Ghraib del 2005 sobre los horrores y las torturas en esa cárcel de Irak, hablan del sufrimiento humano.
"Nosotros del museo de Antioquia quisimos traerla este año del jubileo a Roma porque creemos que le añade significado a esa reflexión sobre la tolerancia, sobre la compasión, el respeto por el otro", que pide el pontífice argentino, cuenta la experta.
"La pasión vista fuera del ámbito religioso se transforma en un drama tremendamente humano, increíblemente contemporáneo", dice.
Se trata de la segunda vez que la colección llega a Italia, ya que estuvo el año pasado en Palermo, Sicilia.
"Viacrucis" ha sido expuesta en Nueva York, Lisboa, Panamá, Pereira, Cali, Santiago de Chile, Palermo y Roma.
Botero, quien pasa largas temporadas en Italia donde elabora sus esculturas, no asistió a la presentación a la prensa de Roma, patrocinada por la embajada de Colombia.