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La Academia de las Artes y Ciencias Cinematográficas de Hollywood ratificó su decisión de expulsar al director Roman Polanski.
El pasado mes de abril –alegando que la Academia no había seguido el protocolo establecido en el reglamento– Polanski demandó a la institución tratando de frenar su salida, pero su alegato no fructificó.
Polanski fue condenado en 1978 por violar a una niña de 13 años, pero huyó a Francia antes de que pudiera ser sentenciado. Ha permanecido en el exilio desde entonces, viviendo en países como Francia, Polonia y Suiza.
Por ese motivo, tanto él como Bill Cosby fueron expulsados de la membresía de la Academia en 2018. Específicamente se les acusó de violar los estándares de conducta de la organización.
En respuesta a la apelación, la Academia tuvo en cuenta diferentes pruebas presentadas por Polanski, que incluyen más de 400 páginas de exposiciones y un memorando detallado de su abogado, así como una declaración grabada por el propio realizador.
Según la entidad, existió una larga deliberación al respecto pero finalmente acordaron continuar con el procedimiento de expulsión de Polanski.
En esa reunión, la junta votó por ratificar la expulsión por un margen superior a los dos tercios.
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“Los propios Estatutos de la Academia dejan claro que la Junta tiene amplia potestad para expulsar a los miembros por causa justificada y hacer todos los demás actos necesarios u oportunos para la administración de los asuntos y el logro de la misión y sus propósitos”, escribieron los abogados de la organización cinematográfica.
“Además, la Junta tiene potestad para determinar el procedimiento para una audiencia o investigación”, agregaron en respuesta a la demanda del cineasta polaco.
Más casos.
Polanski, quien actualmente tiene 85 años de edad, no solo ha sido acusado de un caso de violación. De hecho, ya suman cuatro mujeres que aseguran haber sido abusadas por el cineasta.
En el 2017, una mujer de Los Ángeles –identificada como Robin M.–, se presentó en una conferencia de prensa para informar que Polanski la había atacado sexualmente en 1973, cuando tenía 16 años.
Tan solo unos meses después, le tocó el turno a la actriz británica Charlotte Lewis, quien también acusó al cineasta de abusar sexualmente de ella cuando tenía 16 años.
La última en poner a Polanski en el ojo de la justicia fue Renate Langer, una exactriz alemana de 61 años quien aseguró ante la policía suiza que el director abusó sexualmente de ella en febrero de 1972, cuando tenía 15 años.
