Ana Laura Madrigal no recuerda ninguna etapa de su vida en la que no estuviera cantando. Con su talento, el cual siempre le atribuye a Dios, es que ha logrado competir exitosamente en nueve galas de Nace una estrella.
Con 21 años cumplidos, la cantante oriunda de San Carlos se ha posicionado como una de las voces prominentes de la competencia de Teletica. A pesar de que es una persona relajada, admite que los nervios no disipan cuando está frente a las cámaras.
Sin embargo, su mayor enfoque es en sí misma y nadie más, por lo que, según cuenta, ella es su verdadera competencia.
“Los nervios nunca se van, pero ciertamente he derribado paredes. Del programa uno a hoy (la novena gala del 29 de octubre), el reto y la competencia ha sido conmigo misma (...). Yo no tengo ese sentimiento competitivo de decir: ‘Voy a pasarle por encima a quien se me atraviese’. Simplemente no, yo no soy así. No lo voy a hacer ni tengo pensado hacerlo”, explicó la joven.
En lo que respecta a las calificaciones y realimentación de los jueces (Ricardo Padilla, Debi Nova, Joaquín Iglesias y Marvin Araya), la cantante las recibe con buena actitud y las prioriza en su lista de áreas de mejora.
“Para mí son personas súper profesionales, que tienen una trayectoria y experiencia increíble. Son muy capaces de evaluarnos a cada uno. Realmente lo tomo muy en cuenta para crecer y como motivación para seguir”, contó.
El sueño de Ana Laura Madrigal: Usar la música para ayudar a pacientes
La joven sancarleña es estudiante de enfermería y uno de sus sueños es tener una clínica privada especializada en musicoterapia, un campo especializado en salud mental.
Según cuenta, esta especialidad busca ayudar a personas con enfermedades como Alzheimer o demencia, con el fin de que puedan recuperar sus memorias al escuchar canciones populares de su pasado.
El anhelo de la artista, quien se encuentra a tan solo tres cuatrimestres de completar su carrera pero interrumpió sus estudios para participar en el programa, es sanar a sus pacientes con la música.
“Desde que tengo memoria uso mi voz para expresarme y ha sido una herramienta para transmitir lo que siento (...). Siempre le he pedido a Dios que me ayude con la música, que es una oportunidad muy grande para mí. Que me dé las herramientas para poder lograrlo y que no sea solo para mí”, agregó.
Los horizontes de Ana Laura Madrigal más allá de San Carlos
Antes de su participación en Nace una estrella, Madrigal trabajó durante aproximadamente un año en La Fortuna, en San Carlos, en espectáculos de música loop. Su repertorio era en inglés y estaba dirigido principalmente a un público extranjero.
A pesar de esta experiencia, todavía no se sentía con mucha seguridad cuando hizo la audición en el programa. Sin embargo, se animó gracias al impulso de sus amigos y especialmente de Kike Ramírez, el cantante que alcanzó el segundo lugar en la quinta temporada de la competencia.
“Tenía muy poca fe de entrar. Dentro de mi cabeza era un 1% de posibilidad (...). Pero, en la primera y segunda audición puse todo en las manos de Dios. Dije que si esto era para mí, se lo agradezco y lo acepto, y si no es para mí, también”.
Logró ser una de los 12 adultos que compiten en el programa. Por esta razón, tomó la decisión de mudarse a San José y planea seguir viviendo en la capital para poder explorar nuevas oportunidades.
Más allá de su vínculo emocional con San Carlos, el cual considera su hogar por tener allí a su familia, amigos y mascotas, también cree que es fundamental expandir sus horizontes y salir de su zona de confort.
‘Yo quisiera pensar que Dios me va a dar la oportunidad de desenvolverme más en este ambiente (...). En mi vida, la música nunca se va a quedar de lado”, finalizó.