Andrés Soto recuerda aquellos tiempos en los que veía la serie Arrow sentado en el sofá de su casa, en Moravia, y lo mucho que deseaba ser parte de una producción de este tipo.
Además, cuando era pequeño y su papá compraba películas en los aeropuertos de Estados Unidos para que él y sus hermanos pudieran disfrutar del cine norteamericano, Andrés soñaba con algún día ser el héroe (o villano) de alguna producción de cine o televisión. Simplemente le encantaba.
Hace siete años, luego de pensarlo mucho, finalmente Andrés decidió hacer maletas para emprender la aventura de su vida. Dejó en suelo tico su carrera de comunicador y a la familia que tanto amaba con el único objetivo de instalarse en Canadá e ir a la caza de su sueño.
Hoy, a sus 33 años, cuenta sonriendo que en aquella lista de sueños por cumplir logró colocar un check al lado de Arrow, la serie que tanto le gustaba. Fue en octubre del 2016 cuando el tico formó parte del capítulo A Matter of Trust, en el que interpretó a un guarda.
“Fue un sueño poder verme en Arrow. Es que 24 meses después de estar viendo la serie en Costa Rica, llegar y verme en el set listo para grabar, parecía como una mentira, de hecho fue el primer papel de televisión que me dieron. La verdad es que creo que soy afortunado, esto el resultado de mucho trabajo duro y sacrificio”, afirma Soto.
Con el incondicional apoyo de su padre Marcos Soto y su madre Ana Valverde, el actor viajó a Canadá con la intención de estudiar en un programa intensivo de actuación y encontró su oportunidad en el Vancouver Film School, una academia que le permitía prepararse y formarse como intérprete. Eso sí, ya algo sabía de ello, pues fue parte del elenco de Ondívedu, de Canal 9, y productor del espacio Así somos los ticos, también de la desaparecida televisora.
La carrera de los no
Andrés, quien en un principio se hacía llamar Alexánder (como una forma de honrar la memoria de su hermano menor Alejandro, quien falleció de cáncer), reconoce que si bien durante los últimos años ha podido ser parte de producciones bastante conocidas como Riverdale (dando vida a Carlos), The Good Doctor (como Sapo) o Legends of Tomorrow (interpretando a El Gato) conseguir papeles no ha sido tan sencillo.
“Cuando uno audiciona la mayoría de veces uno recibe un no por respuesta; pero creo que los sí, hacen que todo valga la pena. De todas formas, nuestro trabajo como actores es audicionar, no estar en set. Me refiero a que el 90% de mi tiempo estoy audicionando y trabajando para papeles que no voy a ver en pantalla. Es decir, por cada diez audiciones tal vez recibo un sí... tal vez. Y entonces hay que aprender a disfrutar los no: a disfrutar la audición, a disfrutar equivocarme o a disfrutar estar frente a un director de casting sabiendo de que tal vez no me van a elegir para el papel”, dice.
Disfrutar cada audición y no aferrarse a ningún papel, es lo que le ha permitido mantenerse en pie en esta carrera, de lo contrario ya se hubiese devuelto a Costa Rica.
Andrés asegura que es precisamente por la actuación que ha aprendido sobre la ansiedad y a soltar cosas que podrían angustiarlo innecesariamente.
“Creo que esta carrera nos enseña manejar la ansiedad y a darnos cuenta de que no controlamos nada. Puede ser que yo, por ejemplo, me preparé e hice un gran papel en la audición, pero después puede ser que no tengo la estatura porque la actriz es más alta que yo; o resulta que el director de casting no sabe por qué, pero siente que no soy digno de ese papel y resulta que es porque le recuerdo a su expareja, o lo que sea”, comentó Andrés.
Y aunque la mayoría de papeles que ha conseguido son pequeños, en la serie de NBC Debris, el tico obtuvo su primer papel estelar. Sin embargo, tras la primera temporada ,la serie fue cancelada.
En Debris, Soto interpretó a Efraim Muñoz, un inmigrante que ha perdido a su hermano y lo han separado de su familia.
“Fue muy importante para mí, porque pude conectarme con el papel fácilmente y me sorprendió cómo me llenó emocionalmente. Fue una experiencia que me hizo crecer y sanar muchas cosas personales: la experiencia de perder un hermano como lo perdí yo; extrañar a la familia y no poder estar cerca de ellos... Y a pesar de que fue un papel de ciencia ficción, fue lindo poder relacionarlo con la vida real”, narra.
Además, en diciembre del 2021, CBS estrenó la cinta para televisión A Christmas Proposal, en la que Andrés dio vida a Benneth, el villano de la trama.
En plenitud
Mientras se va abriendo camino en la televisión norteamericana, Andrés disfruta su presente. Divide su tiempo como profesor de actuación en la Vancouver Film School y como actor recurrente en The Flash y en Yellowjackets. Siempre, eso sí, se mantiene a la espera de que algún otro proyecto toque a su puerta.
En el plano personal, Andrés se encuentra comprometido con la cantante canadiense Brianne Rasinsky, con quien espera casarse en el 2023.
Además, en este 2022, Andrés pudo regresar a Costa Rica. El actor disfrutó a lo grande el reencuentro con su familia tras poco más de dos años de no poder venir por la pandemia y las restricciones impuestas.
Y mientras disfruta de lo que va cosechando y se concentra en sus planes de boda, Andrés no para de ponerse metas altas. Es un artista ambicioso y no pierde la esperanza de llegar a trabajar en algún proyecto de HBO Max, la plataforma de streaming que tanto lo seduce.
Sin embargo, Andrés no se apresura, sabe que el proyecto indicado llegará en el momento preciso.