La tercera temporada de The Crown, estrenada el año pasado, mostró a un príncipe Carlos que la mayoría de la gente desconocía. “Fue genial escuchar a tanta gente decirme que realmente sintieron pena por él”, dice Josh O’Connor, el actor de 30 años que lo interpreta, a través de una videollamada con El Mercurio.
Sin embargo, cree que en el próximo ciclo de la serie que explora la vida de la familia real británica, que se estrena en Netflix el 15 de noviembre, la respuesta a su personaje será diferente. Este período de la ficción creada por Peter Morgan cubre desde fines de los años 70 hasta 1990 y, por lo tanto, abarca gran parte de su compleja relación de Carlos y su primera esposa, Diana Spencer (interpretada por Emma Corrin).
“No creo que recibamos la misma simpatía por Carlos, pero espero que entiendan por qué él es como es en ciertos momentos. Estamos contando una historia de amor, dolor, divorcio, paternidad, maternidad y todo entre medio. Es una serie rica en melodrama. Al final, la esperanza es que la gente responda bien al show y no me odien demasiado”, agrega con una risa.
Desde el primer episodio de la cuarta temporada se puede ver que no será un período fácil para Carlos, no solo por su tormentoso matrimonio, sino también por una tragedia familiar. “Una de las principales razones por las que acepté este rol es porque sentí que este es un período muy significativo en su vida”, comenta O’Connor, quien finaliza su participación en la serie en este ciclo, al igual que el resto del elenco. Describe al Carlos de esta época como “un joven más aproblemado, aislado, desesperadamente necesitado de amor”, que conoce a Diana, “una mujer que representa todo lo que su familia le ha dicho que él necesita, pero él mismo no ha resuelto qué es lo que necesita”.
El británico es célebre por preparar exhaustivamente a sus personajes; para la temporada anterior incluso se hizo un libro con información que incluía hasta olores y texturas que le parecían relevantes para crear su versión de Carlos. “Esta vez hice mucha investigación sobre el matrimonio, la psicología que hay detrás, los efectos de un quiebre, los celos, todos los aspectos más emocionales del personaje en esta temporada en vez de ahondar mucho en la historia de Carlos y Diana”, explica, y agrega que no conocía mucho sobre la relación de ellos antes, aunque, “el que hayan estado tan en el ojo público significa que siempre están un poco en nuestro subconsciente”.
Recalca que quiso contar la historia de la forma más auténticamente posible. “Eso incluye momentos de verdadero amor, en que él realmente la quiso e intentó hacer funcionar su relación”, añade.
Tras haberlo interpretado en la serie al príncipe por dos ciclos -Dominic West está en negociaciones para asumir el rol en la quinta y sexta temporada-, O’Connor sacó algunas conclusiones sobre la trágica historia de Carlos y Diana.
"Supongo que lo más importante es que Diana tenía algo que Carlos realmente añoraba tener”, reflexiona. Se remonta a un momento del tercer ciclo, en que el príncipe cita a “Ricardo II” de Shakespeare. “Él quiso decir ‘yo soy igual que ustedes, háblenme como un humano, olvídense de la corona’. Es un momento hermoso, que me hizo entender que Carlos realmente quería ser un hombre del pueblo, ser visto como una persona normal. Y es difícil para él que Diana haya sido la princesa del pueblo sin tener que hacer nada. La gente sentía que la conocía en una forma que no sentían con Carlos”, sostiene.