Caminar al videoclub de la esquina; disputarse con otro cliente la única copia disponible del estreno que todo el mundo quiere ver; cuadrase frente al tele; bolsón de palomitas, darle play al DVD (o al VHS, ¿se acuerdan?).
Con cada vez menos videoclubes dando la pelea, el alquilar una película hoy es más un ejercicio intangible y digital. Aún así, el feeling sigue siendo el mismo: meter el cine en nuestra casa.
La plataforma online Claro Video bien puede funcionar como un videoclub para sus suscriptores, gracias a su surtido de filmes en modalidad de Pago por Evento (PPE). El uso es sencillo: al pagar por la película, el cliente tiene 24 horas para verla a su antojo.
Los títulos más frescos tienen un costo de ¢1.750. Entre estos destacan bombazos recientes de taquilla como Rápido y furioso 7 ; Mad Max: Fury Road ; 50 sombras de Grey y Avengers: La era de Ultrón .
La videoteca también ofrece filmes más entrados en años por ¢750, igual por 24 horas. Esta sección abarca, por ejemplo, las sagas de Harry Potter , Los juegos del hambre , y Parque Jurásico .
Dichos montos se cobran adicionales a la mensualidad de ¢4.000 que abre acceso al enorme catálogo ilimitado de películas, series y documentales que se ofrecen en www.clarovideo.com .
El servicio es exclusivo para clientes de telefonía Claro, quienes reciben de forma gratuita el primer mes de afiliación. Recuerde que también puede descargar la aplicación de Claro Video para dispositivos móviles.