Cuando se dieron a conocer los nombres de los famosos que serían parte de la sexta temporada de Dancing with the Stars, muchos se sorprendieron al darse cuenta que Coco Vargas estaba dentro de la lista de seleccionados. Esto generó todo tipo de comentarios y teoría sobre las verdaderas razones que motivaron a la bloguera a ser parte de un proyecto de canal 7, luego de que constantemente criticara los programas de Teletica Formatos.
Ante estos señalamientos, Vargas, quien es educadora, asegura que su llegada a esta competencia se da por tres razones. La primera es la parte económica, pues recibe un pago por el trabajo y el esfuerzo que le ha tomado construir su personaje, mientras que la segunda es porque el show le sirve como plataforma para darse a conocer de forma masiva y llegar a otros públicos, que no lograría captar por medio de sus redes sociales. Por último, pero no menos importante, es que vuelve a tener la oportunidad de bailar, después de haber estado más de 20 años alejada de esta pasión.
“Fueron muchos los que me tildaron de vendida cuando anunciaron que sería parte de la sexta temporada del programa y la verdad no es así. Después de muchos años de consolidar el personaje de Coco Vargas en las redes sociales, finalmente se me da la oportunidad de llevarlo a un medio más masivo, lo que me beneficia a mí y a Teletica, porque saben todos los comentarios que puede generar mi participación. Además, seamos honestos, todos trabajamos para recibir un pago por nuestra labor y tener claro eso no me hace distinta al resto”, afirma Vargas.
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Esta mujer de 42 años, actualmente combina su labor en Dancing con su programa semanal La comarca, que es producido por Yok Medios y que le permite estar en contacto con sus más de 270.000 seguidores en Facebook. Para ella, su papel en la competencia sirve de plataforma para compartir algunas de sus facetas más privadas con su público. Por ejemplo, unos cuantos se sorprendieron al darse cuenta de que es madre de Raquel Garzón, de 14 años, y de Saúl Garzón, de 8 años.
Junto a su esposo Camilo, con quien planea cada noche el siguiente paso a dar en su carrera, Vargas siente que está en uno de los momentos más importantes de su vida, no solo por su llegada a la competencia de ballroom, sino también porque ahora tiene más herramientas para llegarles a esas personas que no la conocen y compartir su mensaje que, en los últimos dos años, ha estado más enfocado en la realidad política y social de Costa Rica.
“Hay quienes me decían que cómo iba a ser parte de Dancing cuando criticaba algunas cosas de los programas de Teletica Formatos. Lo que la gente no ha logrado entender es que lo hacía casi siempre con Tu cara me suena, porque existían cosas del montaje con las que no estaba de acuerdo, pero el estar ahora aquí no significa que desdigo todo eso. Al contrario, el estar ahora dentro me permite ver el enorme esfuerzo que hace la producción por sacar al aire un programa como este, que es una franquicia de la BBC, y con la que tienen que cumplir ciertos estándares de calidad. Eso me da una mayor seguridad”, explica.
Vargas, cuyo nombre verdadero es Silvia, reconoce que el ser parte del programa de Teletica Formatos hizo que perdiera algunos seguidores en sus redes sociales; no obstante, en las últimas semanas se han unido a su perfil de Facebook más de 24.000 personas. Esto, asegura, ha significado la “mejor limpieza de energía” porque se han ido quienes todavía no han entendido su mensaje. Eso sí, siempre agradecerá a quienes cada día le demuestran su apoyo y cariño, a pesar de no ser seguidores de la competencia.
“Debo decir que a los que más amo son a los haters porque su reacción en mis redes sociales generan todo tipo de comentarios e interacciones con mis otros seguidores. La verdad es que soy una persona de números, así que yo mido mi trabajo a través de ellos y eso me funciona. Además, cuando alguien que me apoya ve cómo me atacan y me defiende, hace que el esfuerzo por compartir contenidos de calidad sea recompensado”, expresó Vargas, a quien hace dos años le ofrecieron ser parte de Dancing with the Stars, pero no aceptó ya que no se sentía segura de asumir este reto.
Si hay algo que esta bloguera no está dispuesta a negociar, y se lo ha dejado claro a la producción y lo confirma cada día, es ceder ante lo que ella considera más valioso: la franqueza y la honestidad que siempre la han caracterizado; es decir, si hay algo con lo que no se siente cómoda, no dudará en expresarlo, especialmente por la comunicación tan abierta que ha tenido con el canal.
Entre risas dice que, de momento, todos los famosos y bailarines se llevan muy bien y confiesa que tiene mayor afinidad con la exdiputada Andrea Morales y el locutor Jair Cruz. Sin embargo, como la misma Coco reconoce, “solo el tiempo dictará sentencia”.