La cineasta Paula Heredia recuerda cómo un día, en Nueva York, la sorprendió mucho escuchar una noticia sobre un tucán que había perdido la mitad de su pico, víctima de maltrato animal en Costa Rica.
Observar cómo poco a poco esta historia fue acaparando los titulares de los principales medios de comunicación en todo el mundo, y cómo se promovía la aprobación de leyes que protegieran los derechos de los animales, fueron algunas de las razones que la impulsaron a crear el documental El Tucán que inspiró a una nación , que se transmitirá este miércoles 3 de agosto, a las 9 p. m., por Animal Planet.
Esta producción audiovisual de hora y media de duración, hace un repaso por la historia de Grecia, un animal al que le partieron la mitad de su pico, y de cómo un grupo de rescatistas de animales y veterinarios reclutaron a un equipo de expertos voluntarios para que reemplazaran esta parte de su anatomía.
En una entrevista con Teleguía , Paula Heredia habló sobre la realización de este documental y de cómo busca contribuir a la creación de leyes que promuevan la defensa de los derechos de los animales.
--¿Cómo fue el proceso de producción del documental?
Creo que, como pasa con ciertos proyectos, a veces estas historias llegan como choques a tu vida y te das cuenta de que quieres hacer algo. Hay muchos casos de animales que son abusados, pero el caso específico de Grecia, era hacer una película sobre todo el movimiento que se generó a su alrededor para ayudar y promover leyes a favor de los animales. Además, creo que su historia sienta el precedente de que la tecnología se puede utilizar para colaborar en el bienestar de estas criaturas.
--¿Cuáles fueron esos temas que quiso abordar en esta historia?
Queríamos que el hilo narrativo fuera Grecia, dándole seguimiento desde que entró al Zooave, porque no sabíamos si iba a vivir o a morir. Sabíamos que el proceso de la reconstrucción de su pico nos daba la oportunidad de entrar a distintos escenarios, para saber qué era lo que estaba sucediendo en cada uno de ellos, desde la fabricación del pico hasta los movimientos de las personas que buscan promover leyes a favor de los animales.
--¿Qué fue lo que más la sorprendió de esta historia?
Yo, siendo costarricense y salvadoreña, tengo la posibilidad de conocer lo que es vivir en sociedades democráticas. Costa Rica tiene una amplia historia de cómo llevar su rutina diaria a la vida democrática. Me sorprendió gratamente confirmar que los ticos saben que tienen derechos, pero que se involucran activamente en ejercerlos. Todo esto lo documentamos durante poco más de año y medio.
--¿Ese es el principal mensaje del documental?
Sí. La verdad es que el principal mensaje es que todos entendamos que siempre podemos hacer algo para cambiar lo que está mal. Una muestra de ello es Grecia, que sobrevivió contra todo pronóstico, haciendo de Costa Rica un ejemplo, y ese no es un trabajo fácil.
--¿De qué forma se ejecutó el trabajo de campo en la filmación?
Trabajé muy de cerca con muchas personas de aquí de Costa Rica, desde los diferentes frentes: Grecia, la participación del Estado y la de los grupos especialistas y ambientalistas. La historia se cuenta muy bien, así que será capaz de inspirar a muchas personas.
--¿Considera que esos tres frentes definen lo que es ser tico?
Desde mi percepción personal, creo que sí, porque son seres humanos conscientes de sus derechos, pero que también tienen claro que esto conlleva un trabajo de cumplir con sus deberes. Eso, para mí, los define, aunque ellos no estén tan consciente de esta virtud.
Véalo. Miércoles 3 de agosto. Animal Planet. 9:00 P.M.