A Carlos Ramos no solo se le apagó la risa, sino que está furioso. Debido a la emergencia sanitaria por el covid-19 y la crisis económica que enfrenta el país, el Grupo Radiofónico Omega suspendió al comediante del programa De 5 a 7 y el conocido humorista está en desacuerdo con la decisión.
El Porcionzón argumenta que la carta en la que se le comunicó su suspensión por dos meses del programa “solo sirve para papel higiénico”, “es confusa” y “es injusta” por que “solo a él” se le habría aplicado la drástica medida.
“La carta no sirve para nada, solo para pedir el Bono Proteger. Yo necesito una carta distinta, bien especificada, que oficialice la situación. Que diga el porqué me están mandando para la casa”, expresó Ramos.
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“Pero no solo eso. La carta dice que fui suspendido por prestar servicios profesionales, eso no es cierto, pues yo estoy en planilla, tengo orden patronal de la Caja Costarricense del Seguro Social y mi patrón es el Grupo Radiofónico Omega. Tengo 19 años de trabajar en la empresa. Además, la carta dice que se aplica porque bajó la pauta publicitaria y, al menos en el espacio De 5 a 7 (donde trabajaba Ramos) o como le pusieron ahora, la pauta sigue con los patrocinadores de siempre”, agregó.
Sin embargo, Omega contradice a Ramos en todos sus argumentos. Javier Hernández, miembro de la junta directiva de la compañía, dice no entender el malestar del comediante.
“En primer lugar, Ramos trabaja en esta empresa con prestación de servicios profesionales. Insisto, por servicios profesionales. A él no se le aplicó una suspensión de contrato, como la que autoriza el Ministerio de Trabajo, simplemente se le notificó que el programa De 5 a 7 se suspendía y que, por ende, a él también”, aseguró Hernández.
Actualmente, en la franja que ocupaba De 5 a 7, existe un espacio que se llama La risa se pega de 5 a 7.
“La risa se pega es un espacio humorístico temporal que dejamos para mantener la franja y no perder el público. Es temporal porque durará dos meses”, aseguró Hernández.
Con respecto a la baja por ingresos por publicidad que Ramos cuestiona, Hernández comentó: “Nosotros podemos demostrar que la pauta publicitaria, en toda la radio, si bajó en casi un 50% a causa de la crisis”.
"Además, podemos decir que Ramos no fue el único perjudicado con el asunto. A otros compañeros se les rebajó el salario y al comediante Rolando Carmona también se le aplicó la suspensión, al igual que a Ramos”, agregó el representante de Omega.
Ramos es consciente que Carmona fue suspendido del programa. Sin embargo, el Porcionzón considera que su colega no fue tan perjudicado, pues, según él, continuaría recibiendo una comisión especial por anunciantes.
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“En otras palabras, de todos, yo fui el único que me fui con una mano por delante y otra atrás”, expresó molesto.
A Ramos le pedimos la carta de suspensión emitida por Omega y la colilla salarial que podría demostrar su vínculo laboral con la empresa , pero el comediante se negó por un consejo legal.
“Yo tengo todo, pero por consejo de mi abogado no lo lo haré por ahora”, detalló Ramos.
Bono Proteger.
Ramos le dijo a La Nación que “no necesita” el Bono Proteger para subsistir durante los próximos dos meses, por lo que la carta que le fue entregada por Omega es irrelevante para sus intereses personales.
“A mi Dios me ha bendecido y tengo los medios para subsistir. Quiero que quede claro eso, porque ahí he estado viendo en redes sociales que la gente dice que cómo es posible que yo, teniendo un carro último modelo, ande pidiendo eso. No, yo no voy a pedir el bono”, expresó el comediante.
Ramos agregó que fue el personal administrativo de Omega el que sugirió solicitar el bono.
“Imagínese que me mandaron a pedir el bono Proteger, a ver si calificaba”, le comentó Ramos en el diario La Teja.
Sin embargo, Omega también rechazó dicha versión. Según Hernández, el comediante en persona fue quien solicitó la carta para pedir la ayuda gubernamental.
“Yo tengo testigos y todo. No puedo entender que diga eso, hasta me siento mal que lo diga. Él me dijo que necesitaba una carta para pedir el Bono Proteger y le dije que estaba bien”, expresó Hernández.
Salario alto.
Una razón de peso que habría pesado en la sonada salida de Ramos es su alto salario.
“Creo que me mandaron para la casa porque yo tengo el salario más alto. De esa manera, ellos pueden contratar a comediantes más baratos”, expresó Ramos, conjeturando sobre el tema.
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“De hecho, metieron a otra persona que me imita. Pero yo me pregunto, si no hay dinero, cómo es que meten a otros”, agregó.
En este sentido, Hernández no ocultó que el salario de Ramos habría tenido que ver con la decisión de Omega.
“Eso no lo podemos ocultar. Se nos hace imposible llegar a pagarlo (el salario de Ramos)”, comentó.