Cuando una película de hace cinco años es la más vista esta semana en Netflix, es claro que las opciones de buen cine en esa plataforma de streaming se han ido agotando conforme pasan las semanas del #quedateencasa. Si ese ha sido su caso, Google Play: Películas le está guiñando el ojo.
A pesar de la omnipresencia de Google, su servicio de alquiler y compra de películas en línea no es lo primero que se viene a la cabeza cuando se habla de la “guerra del streaming”, que enfrenta al dominante Netflix con competidores agresivos como Amazon Prime, HBO GO y Apple TV+. Es muy probable que aún teniendo usted un teléfono con sistema Android, al día de hoy aún no haya tenido la curiosidad de explorar lo que Google ofrece en su “videoclub”.
Venga, acompáñenos.
¿Qué es? Google Play es la tienda virtual por medio de la que el gigante tecnológico ofrece contenido, sean apps, libros, películas, música o programas de televisión. Si usted tiene el sistema operativo Android en su teléfono celular o tableta, ha sido por medio de Google Play que ha descargado los apps que a diario utiliza.
Una de las divisiones del servicio es Google Play Películas, en el que el usuario puede alquilar o comprar filmes en formato digital. A esta puede acceder desde su computadora por medio de play.google.com, y en su dispositivo móvil con el app Play Películas (viene preinstalado en la mayoría de teléfonos con sistema Android). En algunos smart TVs, como los Samsung y LG, también tienen la posibilidad de instalar el app de Google Play Películas, o bien hacerlo mediante dispositivos auxiliares que permiten conectar a Internet un televisor digital más viejito, como el Google Chromecast o un Roku.
Los usuarios de dispositivos Apple encontrarán algunas limitaciones en su uso (no pueden, por ejemplo, descargar las películas).
¿Google Play incluye series de televisión? Sí pero no: a pesar de ya estar disponible en más de 100 países (incluido Costa Rica), el servicio de Google solo ofrece series de televisión en menos de una decena de naciones, la mayoría parte del G8, como Estados Unidos, Francia, Japón, Canadá y el Reino Unido. En otras palabras, a menos que usted se la juegue y logre relocalizar el VPN de su dispositivo en alguno de esos mercados de primer mundo, Google no es su opción para ver series (que de por sí no hace falta, que ya entre Netlix, Amazon y HBO hay programas de televisión de sobra. No sea buchón).
¿Cómo funciona Google Play Películas? Para poder utilizar el servicio, lo primero es que usted ya tenga una cuenta de Google (la misma que utiliza para Gmail, por ejemplo), y que esta esté ya relacionada con una tarjeta de crédito vigente.
Al ingresar en Google Play Películas debe estar registrado (logueado) con su cuenta de Google, y a partir de ahí se le mostrarán las películas disponibles en categorías, como “Novedades”, “Películas más vendidas” y clasificaciones por género, como infantiles, cine de acción, filmes recientes, terror, románticas, etcétera.
La plataforma le permite crear una “lista de deseos” en la que usted puede ir agregando las películas que le llaman la atención y que quisiera ver más adelante, al estilo de la “Mi lista” de Netflix en la que uno suma todo el contenido que jura verá en un futuro, aunque luego se olvide de buena parte de lo que incluyó ahí.
Hasta esta parte, usted aún no ha incurrido en gasto alguno. Ya casi llegamos ahí...
¿Cuál es la diferencia entre alquilar y comprar? Cuando usted compra en Google Play Películas, el filme es suyo, de modo intangible. Haga de cuentas que es el equivalente a que lo hubiese comprado en DVD y lo tenga en un estante de su casa, disponible para verlo tantas veces como quiera. En su perfil de Google Play las películas que compre estarán siempre en su videoteca virtual.
Si su opción es alquilar la película, la experiencia viene a ser similar a cuando nos tocaba ir al videoclub del barrio a escoger una cinta en VHS, llevarla a la casa para verla en un lapso de un par de días y devolverla al término del plazo establecido (si usted es menor de 30, ignore toda la anterior referencia). En este caso la ventaja es que todo el trámite lo puede hacer desde su teléfono y sin salir de casa, además de que no hay multas ni la obligación de devolver el casete rebobinado (¿se acuerdan?).
El alquiler vence en 30 días o 48 horas después de que comience a ver la película (lo que ocurra primero). La calidad del video será en HD en los dispositivos que así lo soporten.
Es importante tener presente que en Google Play si bien todos los filmes que se ofrecen pueden comprarse, no todos los títulos están disponibles para alquilar. Y esto hace una gran diferencia en precios.
¿Cuánto cuesta? La respuesta es compleja, pues los precios no son estándar, y varían de título en título. Pongamos algunos ejemplos:
Sonic, la película (2020): el reciente filme animado sobre el popular personaje de videojuegos era la película más comprada en Costa Rica en Google el 8 de junio. Ahí, alquilarla por 48 horas le costará ¢2.100, mientras que comprarla le costará ¢10.000.
Parásitos (2019): el laureado filme surcoreano, ganador del Óscar a la mejor película, se vende en Google por ¢4.800, mientras que el alquiler por dos días es de ¢2.900.
Avengers: Endgame (2019): la película más taquillera de todos los tiempos no se anda por las ramas para cobrarle a quienes desean verla en Google Play, pues adquirirla ahí le costará ¢11.000. No hay opción de alquilarla (para que tenga la referencia, ese filme es parte del catálogo de Amazon Prime Video, sin costos adicionales).
A Walk in the Clouds (1995): un drama romántico con Keanu Reeves que está lejos de ser una joya dentro de la filmografía del popular actor. Esta película, que perfectamente se puede pasar un domingo en la noche en televisión nacional, en Google Play se “valora” muy por encima de lo sensato, pues para comprarla deberá pagar ¢11.000 (y ¢12.000 si la desea en HD). Haga de cuentas que en el cajón de películas en DVD en baratillo de cualquier Walmart, en Estados Unidos, esta película no le costaría más de $5. Y tras de todo, no es posible alquilarla en Google.
Un buen día en el vecindario (2019): un gran ejemplo de una película reciente, de reconocida calidad y que no todo el mundo alcanzó a ver en cine, pues su estreno este año se dio cuando el coronavirus empezaba a asustar a la gente de las salas cinematográficas. Alquilarla en Google Play Películas cuesta ¢2100, y la compra es de ¢7800 (un mejor precio que si, por ejemplo, la adquiriera en Blu-Ray).
¿Vale la pena Google Play Películas? Como mucho en la vida, todo depende. Este servicio es ideal para quienes no quieren pagar una suscripción de monto fijo en plataformas de streaming a las que no les saca suficiente provecho. Así, si usted es de los que paga por inercia Netflix o Amazon Prime y no ve más de una o dos películas al mes, entonces deje de botar la plata y opte por algo On Demand como lo que le da Google, donde solo paga por lo que consume, sea mucho o poco.
También es una opción válida para quienes acostumbran comprar películas piratas en DVD, como las que se ofrecen en minisupermercados, abastecedores y en los pocos videoclubes que aún funcionan en el país. No nos hagamos los inocentes: cuando uno adquiere una copia quemada de Unidos, de Pixar, a ¢1.000 en una pulpería menos de un mes después de su estreno en cine, es claro que se trata de un producto ilegal que viola todas las leyes de derechos de autor: usted lo sabe, el dueño del súper lo sabe, y el pirata que distribuye esos discos paqueteados en bazares y panaderías también lo sabe.
No le vamos a decir que deje de hacerlo (es cosa de cada quien) pero sí que tome en cuenta que muchos de esos DVD terminan estorbando en la casa una vez que se vio la película, además de que es común que incluyan advertencias en coreano o ruso y que el audio sea de calidad clandestina, mientras que en un servicio como Google Play las copias son legales, en HD y no ocupan espacio físico. Así que, independientemente de si es por razones éticas o prácticas, alquilar filmes en digital podría ayudarle a sentirse mejor.
Finalmente, Google Play es una excelente opción para el cinéfilo, tanto el que busca estrenos como el amante de los clásicos. Este servicio es uno de los primeros en recibir los estrenos de los grandes estudios, una vez que concluyen su paso por las salas de cine, al contrario de Netflix, a donde los principales filmes de Hollywood llegan añejos y, en muchas ocasiones, con años de atraso. Por eso, a relación de costo, es más económico alquilar una película reciente como Jojo Rabbit a ¢2600 en Google y verla en HD sin salir de casa que hacerlo en el cine, donde entre parqueo, boleto y comida no gastará menos de ¢10.000 (sin tomar en cuenta todo lo referente a los actuales protocolos de salud en espacios públicos).
Esto es aún más ventajoso para quienes buscan películas clásicas que no están disponibles en servicios de streaming de mensualidad fija. Netflix, por ejemplo, es especialmente flojo en su catálogo de títulos consagrados, mientras que en Google Play Películas usted puede, por ejemplo, alquilar o comprar El silencio de los inocentes por ¢2300 y ¢5600, respectivamente, y lo mismo con Psicosis (¢2.100 alquiler, ¢3.000 compra); Los imperdonables (¢2.300 y ¢8.100); Los puentes de Madison (¢2.300 y ¢8.100), y La naranja mecánica (¢2.300 y ¢8.200).
Hay cine tico: Punto a favor de la plataforma de Google es que tiene disponibles algunos filmes costarricenses, que como bien sabemos son difíciles de conseguir en la mayoría de servicios de streaming. Así, por ejemplo, entre los títulos locales ahí ofrecidos están Maykol Yordan de viaje perdido, de Miguel Gómez; Apego, de Patricia Velásquez; y Presos, de Esteban Ramírez. Además, al parecer pronto podrían incorporarse ahí las aplaudidas cintas nacionales El despertar de las hormigas, de Antonella Sudasassi; Violeta al fin, de Hilda Hidalgo, y El baile de la gacela, de Iván Porras, que ya pueden añadirse a la lista de deseos, más aún no verse.
Algunas anotaciones: Google Play Películas le incluye para cada película un tráiler o avance (verlo no tiene costo), así como la calificación que el filme tiene en el agregador de críticas Rotten Tomatoes, lo cual es muy útil cuando se quiere conocer de antemano la calidad de los títulos. Un aspecto negativo es que no todas las películas cuentan con audios o subtítulos en español.
Le invitamos a que explore el servicio cinematográfico de Google y saque sus conclusiones. Al final de cuentas, lo caro o barato que le resulte dependerá estrictamente de usted y lo fiebre que sea para ver películas. Buen provecho.