En el 2003, la televisión venezolana nos propinaba uno de los culebrones más memorables de esa década: la historia de Juana Pérez, una chica de 17 años que termina embarazada por error en una consulta con su ginecólogo (por inseminación artificial, ojo).
Virgen, apenas con educación secundaria y sometida a los prejuicios de una sociedad machista y religiosa, Juana la Virgen se convierte simultáneamente en ícono y paria de su comunidad.
El único camino para salir de su predicamento es el de la telenovela: sacrificarlo todo por estar al lado del único amor de su vida quien, muy convenientemente, resulta ser el padre de su hijo.
En el 2015, todavía es posible que las vírgenes se embaracen por error en la televisión. Sin embargo, el perfil de la heroína es completamente diferente.
En Jane the Virgin , Juana toma el nombre de Jane Gloriana Villanueva, una mujer joven de 23 años que es nieta de migrantes venezolanos en la ciudad estadounidense de Miami, en Florida.
Jane (interpretada por la actriz Gina Rodríguez) está terminando sus estudios universitarios, sueña con escribir novelas de romance –tipo las que escribía Corín Tellado– y tiene una relación estable con un guapo detective de homicidios (Brett Dier).
Justo cuando los planes de Jane se alinean para el futuro que siempre ha planeado –una carrera en enseñanza de escuela primaria, un matrimonio con su novio y, por consiguiente, la justa pérdida de su virginidad– la magia de la telenovela interviene.
De repente llega el embarazo no buscado (que no es lo mismo que decir ‘no deseado’); se aparece milagrosamente el amor verdadero; interviene el destino para acercar a Jane al padre que ha dado por muerto durante toda su vida, gracias a una intrincada mentira de su madre.
Se le suman, de a poquitos, los dramas con mafiosos, exparejas con dudosos estados mentales, abuelas que pierden la memoria después de caer por las escaleras y elaborados planes de secuestro.
De repente, en menos de cinco episodios, la vida de Jane pasa de ser un cuento de hadas estadounidense a ser un culebrón latino.
Principalmente, porque la historia incluye su propia telenovela: La pasión de Santos , interpretada por el padre de Jane, Rogelio (encarnado por el actor Jaime Camil, conocido en Latinoamérica por su actuación en la versión mexicana de Betty la Fea) .
Parodia. Se podría describir a Jane the Virgin como una telenovela, pero para hacerlo habría que sacrificar algunas de las características innatas del género.
Hay suficientes elementos de drama para mantener la tensión semanalmente (el vaivén de la relación amorosa de los protagonistas; los asesinatos; los hermanos gemelos que cambian de lugar).
No obstante, esta es una telenovela que reconoce los límites de su propia ridiculez y los explota para su beneficio.
Para quedar claros: en su concepción existen más elementos de comedia que de melodrama. El tono ligero de la historia incluye, por ejemplo, un narrador omnisciente (Anthony Méndez), al que la producción da crédito como “Narrador Latin Lover”.
En el 2013, cuando el canal estadounidense CW comenzaba a gestar Jane, habían pasado tres años desde que ABC cerró la última temporada de Ugly Betty , adaptación de la telenovela colombiana Betty la Fea .
En su estreno, en el 2006, el dramedy estadounidense dio un giro a la historia de la fea secretaria enamorada de su exitoso jefe: los productores trabajaron la trama para que fuera tan atractiva para los televidentes estadounidenses como para los latinos.
La cultura latina se convirtió en un elemento exótico, los exagerados momentos de drama servían tanto como para mover la trama como para aligerarla.
Había risas donde en una telenovela latina habría colocado suspiros melancólicos o gritos de desesperación. Betty, además, salía airosa de todos ellos.
Juana la Virgen , reimaginada por la escritora estadounidense Jennie Snyder Urman, también ha dejado ir todos esos elementos de shock , para convertirlos en una inteligente parodia.
“Quería que fuera en un tono diferente a Ugly Betty ”, aseguró Snyder Urman a la revista Deadline . “Sabía que tenía que ser cómica porque escribo cosas con esa energía, pero me tomó varias versiones del borrador para resolverlo. Una de las cosas centrales que resolví fue que el padre de Jane fuera una estrella de telenovela. Eso se prestó a la comedia, al cuento de hadas y a lo mágico”.
Jane Villanueva vive con su abuela y con su madre en Miami.
Su abuela Alba (interpretada por la actriz puertorriqueña Ivonne Coll) habla en español, pero subtitulado para el público estadounidense.
Alba se ha dedicado por completo a criar a su nieta, para lograr la causa que nunca logró con su propia hija, Xiomara (Andrea Navedo): hacerla llegar, pura y virgen al matrimonio.
Como primera estrategia de su plan a largo plazo, cuando Jane tiene 11 años, Alba le entrega una flor para que la estruje entre sus manos: “Esto es lo que sucede cuando pierdes tu virginidad”, le dice con rostro sombrío mientras Jane intenta, inútilmente, alisar los pétalos de la gardenia.
A sus 23 años, Jane tiene la misma flor colgada de su habitación como una presencia ominosa de la promesa que se hizo a sí misma, pero también a su familia. Por esta promesa ha retrasado consumar su relación con su novio de dos años, Michael, mientras que él asume que debe desposarla para llevarla a la cama.
En medio de sus planes, el destino gira sus tuercas para que Jane vuelva a encontrarse con un prematuro amor que la marcó a sus 18 años.
Rafael (Justin Baldoni) vuelve a la vida de la protagonista trayendo la mayoría del drama que desata los locos eventos que transcurren en los 19 episodios de la primera temporada.
Jane es, igual que Juana, una heroína que logra sobrevivir pese a todas las circunstancias. Esto incluye un embarazo no planeado, artificial, y la lucha contra una sociedad que, simultáneamente, la adora y la rechaza.
En Jane the Virgin hay mucho drama, hay mucho romance, pero sobre todo, la realización inmaculada de una mujer.
¿Dónde verla? En Estados Unidos, la primera temporada de Jane the Virgin estrenó en el canal CW desde octubre del 2014. En julio, el canal Lifetime anunció que había comprado los derechos para transmitirla en Latinoamérica. Se proyecta que estos episodios estrenen en noviembre próximo.Por su parte, la plataforma de distribución Netflix anunció que pondrá la primera temporada completa en su tienda estadounidense a partir del 12 de octubre. En la tienda latinoamericana, los episodios estarán listos para descargar a partir de finales de este año.La segunda temporada de la serie tendrá 22 episodios y se transmitirá en CW a partir del 12 de octubre.