Sin ningún tipo de filtro, la expresentadora Lynda Díaz apareció la noche de este lunes 18 de noviembre, en un video en vivo en su cuenta de Instagram, para explicar por qué salió de Mira quién baila y las razones por las que César Abarca no siguió siendo su pareja en la pista del programa de Teletica.
De acuerdo con la puertorriqueña, todo comenzó en el momento en el que empezó la temporada, en setiembre, cuando llevó a César a su casa, en Florida, Estados Unidos, para ensayar allá y viajar con él previo a la emisión de las galas. Ella explica que lo primero que le dijo al coreógrafo fue: “Lo que pasa en esta casa, se queda en esta casa”.
Sin embargo, según aseguró Lynda en el en vivo, el bailarín habría comentado algunas cosas sobre ella con la coreógrafa Yessenia Reyes, con quien él tendría una relación sentimental, según la exmodelo.
Reyes también forma parte del programa, donde hace pareja de baile con el creador de contenido y comentarista de farándula, Diego Bravo.
Según Lynda, situaciones que se daban al interno de su hogar comenzaron a filtrarse en “páginas de chismes”, esto la llevó a perder la confianza en su coreógrafo.
“Ya no me sentía cómoda, lo empecé a sentir más agresivo, no físicamente, sino como que me decía: ¿por qué no confía en mí?’; y empezó a crear en mí una ansiedad y ya yo no lo estaba disfrutando”, dijo.
Todo esto surgió, luego de que el presentador Édgar Silva anunciara durante el programa de este domingo 17 de noviembre, que César Abarca renunciaba a bailar con Díaz. Este lunes, ella hizo lo propio en la semana previa a la semifinal.
La gota que derramó el vaso fue una supuesta conversación que tuvo el coreógrafo Michael Rubí (quien también es parte del programa) con otra persona en redes sociales y que se filtró por ese mismo medio. De acuerdo con la puertorriqueña, este fue un montaje que salió a la luz justamente después de que la producción hiciera cambios de parejas en la competencia y que dejara a César fuera de la gala de este domingo 17 de noviembre, para que Lynda bailara con Rubí.
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Para Díaz, este supuesto montaje se hizo “con malicia” y con la intención de revelar detalles de su hogar.
“Luego de que pasa eso, yo, honestamente, me siento incómoda porque se perdió la confianza, ese respeto y las tantas veces que le dije a él: ‘Por favor, no le comentés nada a Yessenia’, porque yo sentía que algo podía pasar y pasó. Cuando Michael llegó a mi casa y se filtró esa supuesta conversación, él me decía que no había sido él y yo sabía que no, porque esa fue una conversación que yo tuve con César”, dijo.
Luego de esto, ella volvió a hablar con Abarca y le pidió “que por favor renunciara y él accedió y me pareció un acto muy valiente de César y muy digno. Sin embargo, al minuto la información ya estaba en redes sociales y yo decía: ‘¿cómo es posible?’”.
Lynda afirmó que después de lo ocurrido, Rubí se sentía muy afectado. Añadió que él y Bravo habrían tenido un altercado en los camerinos de Teletica, por lo que el bailarín ya no quiso continuar en la competencia y al quedarse ella sin pareja, no le quedó más opción que renunciar.
La exmodelo, de 52 años, afirma que no teme que la demanden por las alusiones que hizo en su transmisión en vivo, pues ella procedería de igual manera en Tribunales.
A pesar de la controversia, Díaz tuvo palabras de elogio para Abarca: “César es muy buena persona, viene de buenos padres y tiene buenos amigos”.
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