Netflix lo tenía claro desde el inicio: Narcos sobreviviría a Pablo Escobar, pues en su serie la verdadera protagonista es la cocaína.
Esta semana la plataforma de streaming estrenará la tercera temporada de Narcos , la cual se aleja ya del agotado repaso de la vida y muerte del abatido capo de Medellín para enfocarse en sus no tan explosivos competidores del Cartel de Cali.
No existe una cifra exacta de cuánto dinero movió esta agrupación entre 1980 y 1990, pero se especula que fueron miles de millones de dólares.
Narcos es un drama criminal que en su estreno, en el 2015, retrató la historia del líder del Cartel de Medellín, Pablo Escobar, valiéndose de amplias licencias creativas sobre la historia real del surgimiento del tráfico de cocaína desde Colombia durante los años ochenta. Sin embargo, ni siquiera la muerte de su protagonista en el cierre de la segunda temporada, sobre un tejado en un barrio pobre de Medellín, logró darle fin a la trama.
De acuerdo con Netflix, “ahora que la sangrienta cacería de Pablo Escobar ha terminado, la Administración para el Control de Drogas (DEA) centrará su atención en la organización de tráfico de drogas más rica del mundo: el Cártel de Cali, dirigido por cuatro poderosos padrinos”.
Esta banda operaba de una forma diferente a la organización de Escobar. El Cártel de Cali prefería sobornar a funcionarios, y a empleados del gobierno, aunque igual recurrió a la violencia cuando lo consideró necesario.
Los padrinos. El origen del Cártel de Cali inicia en los años 70, cuando tres hombres arman una banda delictiva llamada “Los Chemas”, que en sus inicios se dedicó a la piratería terrestre, a la extorsión y al secuestro. Pero luego, se introdujeron en el negocio de la cocaína, y cambiaron su nombre.
De acuerdo con el actor mexicano Damián Alcázar, quien interpreta a Gilberto Rodríguez Orejuela, uno de los padrinos, su personaje es “un hombre de negocios, pacífico, que prefiere corromper a la gente, no pone bombas por la ciudad ni anda armado como Pablo Escobar. No quiere guerra con nadie y menos con el estado. El Cártel de Cali es el que pasa a ser el protagonista de la historia y de cómo los atrapan a todos. Y para la audiencia sigue habiendo emoción, acción y drama policial”, le dijo al medio peruano La República .
En Narcos , Rodríguez es el líder del Cártel de Cali, el “jefe de jefes”, como le llaman sus compañeros.
Para Alcázar, esta serie capta la realidad latinoamericana, y no la exalta.
“¿A quién quieren que glorifiquemos? ¿A los políticos? ¿O a los grandes negocios que ya privatizaron todo? Creo que los temas no tienen por qué evitarse, al contrario, la gente debe enterarse de esta realidad. Se la damos maquillada y divertida, pero la realidad es terrible y existe. No se puede mirar a otro lado porque muchísima gente está muriendo. Aquí no se glorifica a nadie. Narcos es una ficción basada en una realidad y punto”, añadió el actor.
En la serie Gilberto trata de hacerse millonario con el negocio del narcotráfico, pero sin derramar tanta sangre. Sin embargo, esa aventura no será tan fácil pues la DEA está tras él y su hermano, Miguel Rodríguez Orejuela, interpretado por Francisco Denis (el primer actor venezolano en ser contratado por Netflix).
Miguel es el cerebro detrás del crecimiento del Cártel de Cali, y según una crítica del medio especializado Rincón TV , “A diferencia del cártel de Medellín liderado por Pablo Escobar, esta nueva red de narcotraficantes se muestra mucho más cauta con sus movimientos. Han conseguido levantar todo un imperio sin apenas hacer ruido y ahora no quieren aumentar las sospechas. Cobra especial importancia dentro de la trama Pacho Herrera, interpretado a la perfección por Alberto Ammann”.
Ammann encarna a un criminal de bajo perfil, quien dirige la conexión mexicana y la distribución internacional.
Para interpretar a Pacho Herrera, el actor argentino, tuvo que engordar 15 kilos y entrar en contacto con su lado más oscuro.
En una reciente entrevista que le concedió a El País , el actor alaba la labor de Netflix al expandir el mercado latino. “Son brillantes. No solo han abierto un mercado, el latino, de centenares de millones de personas. También han conseguido algo que parecía imposible, que los estadounidenses vean una serie en español con subtítulos”, le aseguró al medio español.
Además, dejó claro que en Narcos “no se salva nadie. Yo creo que no hay buenos, porque contra los malos no vale todo. Es interesante que en el mundo actual mucha gente sienta simpatía por personas como Escobar. En vida fue un héroe para muchos. Y décadas después de su muerte lo sigue siendo. Tiene que ver con el capitalismo. Se hizo rico, y desde su mismo nombre el capitalismo es un sistema que pone en el centro de todo al capital. Sí, ya sé que hay quien dice que se refiere también al capital humano”.
Y finalmente, el último de los padrinos, es Chepe Santacruz Londoño, interpretado por el portugués Pepe Rapazote. Londoño está encargado de dirigir el satélite de Nueva York.
Sin duda, esta temporada abrirá un mundo complejo y despiadado de nuevas figuras.
Atractivos. Estos nuevos episodios además contarán con una presencia española por partida doble: Miguel Ángel Silvestre y Javier Cámara.
Silvestre ( Velvet, Sense8 ) le dará vida a Franklin Jurado, el encargado del lavado de dinero del cártel. Y Cámara se hizo notar recientemente por subir a Facebook y a Twitter un vídeo ensayando una de las frases más reconocidas de Narcos : “hijueputa malparido”.
En la serie, el veterano español interpretará a un peligroso y misterioso narcotraficante que querrá quedarse con el poder tras la caída de Pablo Escobar.
De acuerdo con el crítico especializado en cine y televisión, Gabriel Sama “en la tercera temporada de Narcos han vuelto todos sus principales atributos: la combinación de ficción con video original de la época, la sólida cinematografía que revela una Colombia tropical llena de contrastes entre extrema pobreza y riqueza, y la complejidad de una humanidad sumida entre el deseo de hacer el bien y la enorme tentación del dinero y la corrupción que genera una violencia desmedida”.
A pesar de que será notoria la ausencia de Escobar, Narcos promete mantener latente la cruda narración para plasmar los diferentes conflictos jurídicos, políticos, policiales, militares y civiles que chocan frontalmente al intentar unir fuerzas para frenar el imperio de la cocaína.
La tercera temporada se estrenará el 1°. de septiembre.