Adrián Méndez envía audios por WhatsApp y contesta llamadas con su voz impecable. Esto es parte de su milagro, o como lo llama él, de la guerra que ganó. Durante su proceso a él le realizaron una traqueotomía y era posible que le costara volver a hablar o que lo hiciera sonando distinto.
Sin embargo, “instrumento de trabajo” está bien.
“Apenas me quitaron ese tubito me regresó la voz. Eso me tenía preocupado. Solo podía hablar por señas”, dice Adrián.
El narrador deportivo de Teletica Radio y de TDMás ha sido una de las figuras del medio que generó más atención, luego de que trascendiera lo crítico de su estado tras contagiarse de covid-19.
Sin embargo, Adrián logró recuperarse y tras 52 días internado en el hospital Max Peralta, en Cartago, obtuvo la salida. Hoy, el narrador enfrenta secuelas físicas por el tiempo que estuvo encamado. Por ahora no puede caminar y recibe terapia física para recuperar la movilidad de sus piernas.
Los brazos, sin embargo, ya los mueve un poco más.
“Me puedo mover muy poco, no puedo caminar, estoy con terapia física y respiratoria”, cuenta.
Mientras va mejorando él está en casa de sus padres, don Rodolfo Méndez, también narrador, y de doña Damaris Brenes.
Adrián egresó del centro médico con un tanque de oxígeno, que la mañana de este viernes 3 de junio, cuando se realizó esta entrevista, él no estaba utilizando pues respira mejor. Su saturación es de 90 y se siente bien, agradecido.
En estos días de reposo cuenta con la compañía de su esposa, Ivonne Solano, y de sus hijos Mariana y Sebastián, quienes luego de preocuparse por su papá, hoy están felices de estar con él.
“Estar con la familia es otra cosa. A uno lo reconforta estar en contacto con toda la familia. En el hospital solo podían ir una vez al medio día y el ingreso era solo para adultos. Me siento bien porque estoy en mi casa. Estoy bien chineado. Mi esposa viene. Me siento muy bien. Agradecido”, dice.
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Vencedor
Adrián estará incapacitado por todo junio. Posterior a su recuperación sabrá cuándo podrá retornar a su trabajo. “Hay que ver cómo reacciona el cuerpo, debo recuperar la movilidad”, dice.
Emocionalmente se siente bien, aunque cuenta que en Teletica le ofrecieron asistencia psicológica. El experto en temas deportivos destaca que todo lo ve positivo, principalmente luego de enterarse de los buenos deseos y oraciones de personas que deseaban que él saliera adelante.
“He sentido apoyo. Tengo tantos mensajes de gente que no conozco y que han orado. Los amigos en Guatemala; creo que eso me ha dado mucha fortaleza para la recuperación”, cuenta.
Adrián es uno de los colaboradores de canal 7 que se contagiaron de covid-19. Otros de sus colegas que estuvieron hospitalizados fueron Christian Sandoval, Juan Ulloa y Fabián Borbón; sin embargo, fue el narrador quien permaneció más tiempo hospitalizado y en condición delicada.
“Al quinto día de estar contagiado me empezó a faltar el aire. Llamé al 911 y me llevaron al hospital, al área de covid. Pasé una noche pero no saturaba bien. Al siguiente día me empezaron a hacer procedimientos más avanzados: me pusieron como un globo (que cubría su cabeza), no lo aguanté. No me faltaba la respiración, pero entré como en pánico. Te cae el sudor en la cara, no podés hacer nada. Es una sensación muy fea”, recuerda Méndez.
Luego de esto Adrián no mejoraba y los médicos decidieron que era necesario intubarlo.
“Eso avanza muy rápido. El momento más difícil fue en el que llamé a mi esposa como para despedirme. Le dije que me iba a despertar. Ya terminé ahí. Me despedí de ella y de inmediato me durmieron, es como desinflar un globo. Me durmieron y listo. Hasta que desperté”, rememora.
Adrián estaba convencido de que iba a poder recuperarse, además, reconoce que era la única opción que tenía para seguir luchando y lograr sobrevivir.
“Le dije convencido (al médico) que lo hiciera y al final pasó (que se recuperó). Lo que me cuentan es que hubo un momento crítico en el que me entró una bacteria. Le dijeron a mi familia que prepararan el funeral. Ahí empecé a evolucionar.
Estuve pegado a una máquina que me dio soporte al pulmón, dicen que es muy fuerte. Cuando desperté hay mucho que no recuerdo, tuve alucinaciones”, dice Adrián, quien menciona que estuvo consciente los últimos 15 días.
“Yo soñaba cosas y después no sabía si soñaba o había pasado realmente. Pensaba que podía caminar. En la UTI (Unidad de Terapia Intensiva) me imaginaba un baño y que yo iba, pero ese baño no existió”, añade. La lucidez regresó un día que su mamá lo visitó: mientras iba despertando empezó a entender lo que pasaba.
Tras su experiencia, Adrián incentiva a las personas a que se cuiden y se vacunen. Recalca que la covid-19 “no es un juego, sino una realidad ante la que hay que estar preparados”.
“Yo digo que lo que viví es como una guerra con diferentes batallas: las fui pasando una a una. Logramos ganarle la guerra al covid”, asegura.
Durante el proceso, Adrián perdió entre 25 y 30 kilos. Cree que “el sobrepeso” fue uno de los factores que hicieron que él se complicara.
“Me arrepiento mucho de esos malos hábitos. Quiero tener una vida sana y hacer ejercicio cuando recupere la movilidad. Estar bien físicamente es lo que deseo”, asegura.