Natalia Monge no se detiene y, mientras va avanzando, está dispuesta a hacer lo que se requiera para el proyecto que integra, así esto implique no estar figurando frente a la cámara y ponerse “a jalar agua” si es necesario. Es de las figuras más reconocidas del medio costarricense y una de las fichas de Teletica que se consolida cada vez más.
Monge, de 37 años, se unió a Teletica en setiembre del 2021, cuando integró el panel de jueces de Tu cara me suena. Para diciembre, se vinculó como presentadora de la revista de espectáculos De boca en boca, espacio en el que días atrás ella y sus compañeros hicieron comentarios sobre el integrante de la banda BTS, Kim Namjoon, que fueron catalogados como “racistas e irrespetuosos”. Ella, quien desde sus inicios se mantuvo lejos de la polémica, habló días antes con Viva acerca de su crecimiento en el 7, luego de lo sucedido, también respondió preguntas relacionadas con el tema.
Presentar no le resultaba ajeno, pues esa era la función que cumplía en Informe 11, de Repretel, cuando le correspondía comunicar historias. A finales de julio del 2021, renunció para estar más cerca de sus hijos Amanda y Joaquín, hoy de 6 y 2 años, respectivamente.
Desde su ingreso a Teletica, los conocidos talentos de Natalia han sido potenciados. Además de presentar, la incluyeron en el staff de toros, donde presenta sus personajes e imitaciones que por tantos años escucharon en Pelando el Ojo. A partir del 27 de agosto será, junto a Yiyo Alfaro, la presentadora del reality de cocina Manos a la maseca.
Además de esta nueva oportunidad, Monge integrará el equipo que Teletica enviará a Qatar. Desde allá, ella presentará a sus personajes, pero también a Natalia, la comunicadora, quien tendrá a cargo una sección.
Conversamos con la multifacética figura sobre su etapa actual.
–Desde que se vinculó a Teletica la hemos visto teniendo espacios donde conocemos más a la presentadora. ¿Qué tal la experiencia en una nueva televisora?
Yo tengo ya ocho meses oficialmente en la familia de Televisora de Costa Rica. Le podemos sumar dos meses más con la temporada de Tu cara me suena, pero como lo digo: el brillo de mis ojos tiene que expresar lo feliz que estoy porque este es un lugar lindo, en el que te tratan muy bien y donde he tenido la dicha de ya formar parte de varios proyectos.
“Para mí es un halago muy grande y, claramente, me siento feliz por ello, además de que es un ambiente de trabajo muy sano, muy bonito, de mucha paz y tranquilidad.
“Creo que cada uno de los que estamos matriculados con cada proyecto que se nos asigna tratamos de hacerlo de la mejor manera: agradable, bonito; aquí no es tarea difícil. Me siento sumamente bien siendo tomada en cuenta”.
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–Proyectos en los que la vemos más como presentadora y además en otros en los que aprovechan sus variadas habilidades. ¿Se siente más como presentadora que como imitadora?
Sí. Totalmente. Vieras que es bonito porque, como bien lo decís, he tenido la dicha de participar de proyectos a lo largo de mi carrera televisiva y radiofónica que me permiten mostrarle a la gente esas distintas facetas. Ahorita, el tipo de proyectos en los que estoy involucrada permiten que exponga el ser comunicadora y presentadora de tele.
“Los personajes y eso los sigo utilizando cuando hay temporada de toros o con distintas marcas para mis redes sociales y ahora para el Mundial de Qatar, que es un gran proyecto para el que me están tomando en cuenta y estoy muy agradecida. Ahí el uso de personajes pueden ser un recurso. Me halaga mucho porque a veces uno dice: ¡Ay, Dios mío!, ¿y si los personajes no los usamos?’. Pero es que también está Natalia detrás. Entonces, soy esa persona que trata de irse formando en varias cosas porque si no es esto, está aquello y si no es aquello es lo otro”.
–¿Permanece abierta a las nuevas oportunidades o se siente casada con la idea de ser solo presentadora?
No. (...). Es muy lindo que vean eso que decías al inicio: más allá de muchacha que hace voces e imita, hay una profesional que puede comunicar frente a la cámara o detrás de, o en producción y jalando el agua: yo me considero todo terreno porque se entiende que todos los proyectos tienen una finalidad y deben sacarse adelante. Si me ponen al frente, yo feliz, maravilloso; si me ponen a la par, debajo o arriba, yo lo que quiero es trabajar y disfrutar cada cosa que hago y eso lo he tenido todos estos años.
–Como lo expresa, parece que permanece con los pies sobre la tierra, porque por más que la hagan protagonista o parte de diferentes espacios y programas está dispuesta a “jalar el agua” si se necesita…
Creo que ya pasó de moda esa época donde se veía como Wow! ser presentador de tele. Y, la verdad, es que es un rol dentro de un equipo de trabajo. ¿Qué hago yo con ser una presentadora requete conocida si no me llegan notas, que son las que hacen los compañeros que salen a reportear? Si no me enciende el micrófono el técnico que tiene la parte de audio o si no me poncha el ponchador de cámaras. Uno nada más lo que tiene que entender como comunicador, que es mi formación, es que todos los roles son diferentes pero igualmente valiosos. Unos con más protagonismo que otros, sí, por ende con más responsabilidades públicamente, que es lo que nos toca cuando presentamos.
-¿Cómo se ha sentido en este tiempo en el que incluso ha experimentado nuevos retos?
Me siento muy bien. Me encanta porque me saca de mi zona de confort. Fue primero venir a Televisora de Costa Rica a trabajar en un programa de espectáculos, cosa que jamás pensé. Cuando me decían: ¿te ves ahí? y yo dije: ‘sí me veo’. Cualquier persona hubiera dicho que estoy loca, les hubiera dicho que sí, que estoy loca, pero segura de que me veo ahí.
“Creo que tengo cosas que aportar en el lugar en el que me pongan. Por ahí, uno no tiene que dejar de ser uno mismo. Por ahí se topará una experiencia que uno dice: ‘no calzo’, pero el ambiente de trabajo determina mucho. Me gusta pensar que soy un amuleto de buena vibra y de buena suerte, que donde yo vaya a estar todo alrededor se va a generar así.
“Yo llegué (a De boca en boca) encontrándome un grupo de trabajo bien bonito: Mauricio (Hoffmann), Montserrat (Del Castillo) y Bismark (Méndez) son un equipo de trabajo con el que me llevo rebien. Todos somos papás, compaginamos en muchas cosas, vacilamos muchísimo y realmente eso no se puede fingir. No podés aguantar ni un ratito con personas con quienes no te llevés. Partiendo de ahí todo fue maravilloso”.
–Usted va a la cobertura del Mundial de Qatar por mes y medio y quiero preguntarle cómo asume y se prepara para estar sin sus niños. Ellos tienen a su papá y usted, además de madre, es mujer y profesional, pero pregunto porque recuerdo que, cuando usted renunció a su anterior trabajo ,contó que lo hacía para poder compartir más con Joaquín y Amanda...
Sí... El episodio que mencionás de mi renuncia, que fue claramente para estar más con mis hijos, era porque en aquel momento tenía un bebé de meses que me requería mucho. Era totalmente dependiente de la lactancia materna. El 15 de setiembre cumple dos años. Amanda (su hija mayor) tiene seis. A mí me parece fascinante la oportunidad de ir a un Mundial (el primero que cubre) para Televisora de Costa Rica, que tiene los derechos de transmisión.
“Voy con un equipo de trabajo de más de 30 personas, de grandes profesionales, grandes referentes y vamos en unas condiciones extraordinarias. Es una oportunidad que yo he esperado mucho tiempo y que se me está dando. Creo que como familia que se apoya y que entiende las dinámicas, esta es una oportunidad que todos aplaudimos. La misma Amanda me dice: ‘mamá pero te vas a ir’ y le digo: ‘sí, mi amor, porque mamá tiene un trabajo que hacer y que siempre ha querido. Un día te quiero ver realizando trabajos y estudiando fuera del país’. Entonces es una oportunidad con la que yo, como su mamá, le enseño que persigo mis ideales y que, al igual que yo lo estoy haciendo ahorita, ella lo tiene que hacer.
“En el caso de Joaquincito, que aunque está más grande sigue siendo muy bebé, está en una etapa que ya pasé con Amanda. Es bonito porque siento que ahorita no lo entiende tanto pero lo siente, entonces ya nos estamos preparando. Le hablo y le digo: ‘mamá no va a estar unos días’. Estoy empezando poquito a poco a entrenarlo amorosamente a que vaya dejando un poquito la teté porque todavía le doy de mamar, pero ahí vamos en un proceso. Mi esposo me dijo: ‘Ni me termine de decir ni preguntar: usted va porque va y yo me quedo con los chicos’. Entonces es una experiencia que creo nos va a fortalecer bastante.
Unos días después de la primera entrevista conversamos con ella sobre la polémica por los comentarios acerca de un integrante de BTS. Acá las preguntas y respuestas:
-Durante su carrera, usted ha sido una persona alejada de la polémica. ¿Cómo fue estar en medio de lo ocurrido en De boca en boca relacionado con el integrante de BTS?
A lo largo de mi carrera he tenido una estrecha y cordial relación con los radioescuchas, televidentes y público en general. Diría que hay un cariño mutuo; es por ello que la situación acontecida la semana pasada fue totalmente nueva y extraña para mí. Me costó entender lo que había ocurrido, porque, desde luego, nunca quise que nadie se sintiera ofendido.
“Somos un programa de entretenimiento; nuestro objetivo es que la gente se relaje, la goce y pase un buen rato, siempre en el marco del respeto. En cuanto tuve oportunidad, saqué tiempo y me puse a investigar sobre BTS y el Fandom ARMY (seguidores de la agrupación), y traté de analizar los hechos desde su visión. Fue una lección valiosa, me comuniqué con líderes del movimiento y hasta hicimos un live para dar a conocer más sobre esa comunidad, sus valores y las buenas acciones que ejecutan. De cada situación es importante aprender y corregir, así crecemos como comunicadores y como personas.
-¿Se llegó a sentir mal por lo ocurrido?
Me sentí mal porque nunca quise que nadie se sintiera ofendido (...). A lo largo de mi carrera he hecho mi trabajo con el mayor respeto y empatía. Sin embargo, como no sirve de nada llorar sobre la leche derramada, me puse manos a la obra, contacté a las líderes de la comunidad ARMY y, además de externarles una disculpa, conversamos sobre lo sucedido, facilité mis redes para promover sus proyectos de acción social y proyectamos la importancia de construir soluciones desde la armonía y no desde el conflicto.