EscucharA dos meses exactos de la muerte de la reina Isabel II, Netflix estrenará este miércoles 9 de noviembre la quinta temporada de The Crown, siendo esta la entrega que promete ser la más dramática de la gustada serie “biográfica” sobre la familia real británica.
Si bien Netflix no ha revelado mayores detalles de esta nueva temporada, se sabe que se ubicará en la década de 1990, cuando los problemas en el matrimonio del entonces príncipe Carlos y la princesa Diana eran más que evidentes. Todo esto mientras la soberana se acercaba a cumplir cuatro décadas en el trono y la familia real enfrentaba a uno de los mayores desafíos, ante el cuestionamiento del papel de la monarquía en el Reino Unido.
Estas son cuatro polémicas de la realeza británica acontecidas en la década de los noventa que la nueva temporada de The Crown inevitablemente retratará:
1. “El año más horrible”
La monarquía británica no empezó la década de los 90 precisamente con el pie derecho y fue en 1992 cuando la reina ya no pudo más y calificó ese año públicamente como “el más horrible”.
Para la reina fue particularmente difícil, pues en marzo de 1992 su hijo, el príncipe Andrés, duque de York, y su entonces esposa, Sarah Ferguson, anunciaron su divorcio. Tan solo un mes después, en abril, la princesa Ana, única hija de la monarca, también dio por concluido su matrimonio y anunció que se separaba de su esposo, el capitán Mark Phillips.
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Sin embargo, el drama para Isabel no acabó allí, pues durante una visita que realizó a Alemania en ese mismo año, le arrojaro huevos.
2. Cuatro décadas
La nueva temporada se inicia en 1990, cuando la reina Isabel II ya sumaba 38 años en el trono. Además, se estima que la trama se extenderá hasta 1997, por lo que durante esta entrega de capítulos estará la celebración de las cuatro décadas desde a coronación de la monarca, es decir, en 1992.
Según dio a conocer Netflix, mientras la reina se acerca a los 40 años del ascenso al trono, reflexionará sobre “un reinado que vio pasar a nueve primeros ministros, la llegada masiva de la televisión y el ocaso del Imperio británico”.
“Sin embargo, nuevas luchas se avecinan. El colapso de la Unión Soviética y la transferencia de soberanía de Hong Kong son señales de un cambio radical en el orden internacional, que le presenta desafíos y oportunidades. Mientras tanto, los problemas se están gestando más cerca de lo que se imagina”, adelanta la plataforma de streaming.
3. Incendio en el castillo
Las imágenes de la quinta temporada reveladas hasta ahora por Netflix muestran a la reina Isabel II en medio de escombros, lo que hace pensar que la serie también mostrará cómo las llamas se propagaron por el castillo de Windsor en noviembre de 1992.
El incendio destruyó parte de la residencia de la familia real británica y aunque no hubo muertos, sí se dieron muchos daños materiales, pues allí se albergaban múltiples obras de arte.
El incendió fue producto de un corto circuito y el único miembro de la familia real que estaba presente en el sitio era el príncipe Andrés, quien en aquel momento explicó que el fuego inició en la capilla privada de la familia y se propagó rápidamente por las instalaciones.
4. El divorcio de los príncipes
La presión del príncipe Carlos a su madre, la reina Isabel II, para que le permitiera divorciarse de Lady Di es más fuerte en esta temporada. Sin embargo, el visto bueno de la reina para el heredero de la corona representará una crisis constitucional para la monarquía.
Los príncipes de Gales se separaron en 1992, pero se divorciaron hasta 1996. En ese tiempo, Diana dio una polémica entrevista al periodista Martin Bashir para la BBC y usó un vestido negro con escote durante una cena de Vanity Fair que posteriormente fue bautizado como el “vestido de la venganza”. Entre tanto, Carlos ya no ocultaba su amorío con su actual esposa, Camilla Parker Bowles.
“Los rumores crecen mientras el público ve cómo marido y mujer viven prácticamente separados. A medida que el escrutinio de los medios se intensifica, Diana decide tomar el control de la narrativa, romper con el protocolo de la familia, publicar un libro que socava el respaldo público de Carlos y exponer las grietas entre los Windsor”, adelanta Netflix.
¿Y la muerte de Diana?
Aunque la serie se extenderá en esta nueva entrega hasta 1997, año en el que falleció la princesa Diana, todo parece indicar que su trágica muerte quedará para la sexta y última temporada de la afamada producción.
Así lo deja entrever la revista especializada Variety, que ya obtuvo acceso a la temporada cinco de The Crown.
“Lo que se avecina para The Crown es una temporada final en la que debemos pasar de 1997 al que será el punto final. Queda una gran cantidad de reinado por delante. La muerte de Diana, la década de Blair (primer ministro Tony Blair) y la guerra de Irak están por venir, junto con quién sabe cuánta historia cultural más”, afirmó el medio estadounidense.
De todas formas, Variety también es enfática en que “los productores se han negado a decir si recrearán el accidente en la serie”.
Lo que sí está confirmado es que en esta quinta temporada entrará en escena el empresario Mohamed Al‑Fayed, quien, según explica Netflix, “impulsado por el deseo de ser aceptado en las más altas esferas, utiliza sus riquezas y poder para ganarse un asiento en la mesa real para él y su hijo Dodi”.
Su hijo Dodi es quien termina convirtiéndose en pareja de la princesa Diana y quien fallece junto a ella en el trágico accidente automovilístico en París, cuando eran perseguidos por paparazis.
Los protagonistas
Esta nueva temporada de The Crown contará con un total de 10 episodios y debido a que se desarrollará en la década de 1990, el público verá a un elenco completamente renovado para representar a los personajes en su etapa adulta.
Por ejemplo, el papel de la princesa Diana, quien en la cuarta temporada de la serie dramática fue interpretado por la joven actriz Emma Corrin, ahora estará en manos de Elizabeth Debicki. En tanto, Dominic West será el príncipe Carlos.
Además, en el papel de la reina Isabel II, que anteriormente interpretaron Claire Foy y Olivia Colman, llegará para esta entrega la laureada Imelda Staunton.
El nuevo reparto lo complementan Claudia Harrison, como la princesa Ana; Jonathan Pryce como el príncipe Felipe; Lesley Manville como la princesa Margarita, y Johnny Lee Miller será el primer ministro inglés John Major.
