Johel Rivera aún no asimila el trabajo como diseñador y animador en el que estuvo recientemente. Hace menos de un año estaba planteándose tomarse un año sabático de la animación, sin embargo, una propuesta inesperada tocó a su puerta y fue imposible rechazarla.
Un amigo suyo, con quien había colaborado antes, le pidió asumir el puesto de director de arte que tenía disponible el estudio Stellar Creative Lab en Vancouver, Canadá, para una producción en la que estaban trabajando.
Se trataba de What If...?, la primera serie animada de Marvel Studios para Disney+ y que es parte de la narrativa oficial del Universo Cinematográfico Marvel (UCM). Está de más decir que ante semejante oferta, el costarricense cambió de planes rápidamente y se incorporó a inicios de este 2021 en el proyecto.
Esta serie animada, que consta de nueve capítulos en su primera temporada, se estrenó en agosto pasado en la platafoma de streaming de Disney y reimagina momentos clave de UCM, dándoles un giro. Así, por ejemplo, se plantea qué pasaría si Peggy Carter hubiese recibido el suero de súper soldado en lugar de Steve Rogers; si todos los Avengers hubiesen muerto antes de conformar el equipo, o si Thor fuese un hijo único.
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Johel Rivera dedicó seis meses a ese trabajo, los cuales se ven reflejados en los primeros 10 minutos del capítulo ocho de la serie, ¿Qué pasaría si... Ultrón ganara?, en el que Natasha Romanoff y Clint Barton buscan destruir al robot asesino, luego de que este provoque un cataclismo nuclear. Se trata de uno de los episodios más trascendentes de la temporada.
Los designios de Marvel
“Fue muy loco e inesperado y todavía me cuesta mucho asimilarlo y empezar a manejarlo. Cuando yo empecé en este proyecto quería tomar un tiempo para descansar y trabajar en proyectos personales y ahí fue cuando me llamaron y me dijeron: ‘¿te interesaría?’”, recuerda Johel, quien ya tiene permitido hablar de su trabajo para Marvel, tras el lanzamiento del capítulo en el que participó.
“Obviamente uno no puede decir que no y hoy le puedo decir que fue tanto lo que yo aprendí en este proyecto, porque nunca había hecho algo tan complejo, pero tampoco había aprendido tanto en tan poco tiempo. Ha sido muy gratificante para mí porque aprendí muchísimas cosas nuevas”, afirma.
El vecino de San Rafael de Oreamuno explica que prueba de la complejidad de su trabajo fue el hecho de que en un solo capítulo participaban varios estudios de animación, pero al final en la serie todo debía llevar la misma línea gráfica.
Su trabajo como director de arte era precisamente lograr que todo el trabajo que realizaran en su estudio, calzara con las solicitudes de Marvel.
“Yo debía mantener el estilo de este proyecto, que tiene un lenguaje de diseño muy claro, pero imagínese que hay muchos estudios trabajando al mismo tiempo (en el mismo proyecto) y por estudio trabajan unas 100 personas en el proyecto. Entonces si son, por ejemplo, cuatro estudios, son 400 personas trabajando en un solo proyecto que tiene sus reglas de como se tiene que ver y mi trabajo era que todo se mantuviera unificado, con un lenguaje consistente y que todas las cosas que hicimos estuvieran bajo el mismo estilo gráfico”, explica.
Además, explica que una de las complejidades fue el hecho de que los fondos de las escenas estaban hecho en 2D (pintados en digital pero hechos a mano), mientras que los personajes eran una animación completa en 3D y había que crear un híbrido, de forma tal que ambas animaciones se complementaran de forma orgánica.
“Fue muy chiva porque Marvel tiene también estas series animadas que son más para un público infantil, pero What If...? viene siendo como un proyecto importante. Fue todo un experimento y un acercamiento diferente a la animación del trabajo de ellos, y verlo terminado fue muy bonito”, añade.
Experiencias
El diseñador de 31 años y quien reside en Canadá desde hace cinco, no duda en reconocer que este ha sido el proyecto más relevante en el que ha trabajado y, de una u otra forma, es gratificante poder ser parte de una producción que le recuerda sus inicios en el diseño y la animación.
Cuando estaba comenzando a estudiar Animación 3D en la Universidad Veritas, Johel recuerda que Marvel estrenó Iron Man y confiesa que “me nebuló las ideas”. A partir de ahí se convirtió en un seguidor de las producciones del estudio jefeado por Kevin Feige.
“Este tipo de proyecto ha sido el más grande comparado con todo lo que he hecho. En mi carrera he tenido la suerte de trabajar en proyectos muy tuanis y siempre he aprendido montones y he conocido gente que está con uno, pero este fue uno diferente y ha sido increíble”, detalla Rivera, quien adelanta que sigue trabajando con Marvel, aunque no puede revelar en cuáles proyectos tomará parte.
A lo largo de su carrera, el cartaginés, quien actualmente se encuentra en Costa Rica, ha trabajado en producciones animadas de Netflix como Carmen Sandiego (2019) y The Last Kids on Earth (2019). También trabajó en la animación de la cinta My Little Pony: la película (2017).
Otro de sus más recientes proyectos animados es Los locos Adams 2, largometraje que Rivera anhelaba ver en Costa Rica antes de regresar a Canadá a mediados de octubre de este 2021. Sin embargo, dicho filme aún no llega al país.
Sobre sus ambiciones, el animador prefiere no afanarse e ir paso a paso, trabajando en los proyectos que vayan surgiendo en el camino.
“Más que proyectos en los que me gustaría trabajar, ahora pienso más bien en la gente con la que me gustaría trabajar, porque son personas de las que se puede aprender un montón y siempre hay cosas muy interesantes pasando”, dice.