Limitar a solo medio grado Celsius de calor adicional podría significar la diferencia entre la vida y la muerte para cientos de personas y ecosistemas en las próximas décadas, en este planeta de rápido calentamiento, informó el domingo un panel internacional de científicos. Sin embargo expresaron poca esperanza de que el mundo se eleve a la altura del desafío.
El Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático, ganador de un premio Nobel, emitió su informe desalentador en una reunión llevada a cabo en Incheon, Corea del Sur.
En el documento de 728 páginas, el grupo de las Naciones Unidas detalló cómo el clima, la salud y los ecosistemas de la Tierra podrían estar mejor si los líderes mundiales pudieran limitar de alguna forma el calentamiento causado por el ser humano a solamente 0,5°C a partir de ahora, en lugar del objetivo de 1 grado Celsius.
En el informe, el panel también advirtió que si se lograra limitar el calentamiento global, se podría lograr lo siguiente:
-Se afectaría a solo la mitad de las personas por falta de agua.
-Habría menos muertes y enfermedades ocasionadas por el calor, contaminación y enfermedades contagiosas.
-El nivel de los océanos subiría casi 10 centímetros o menos.
-Menos de la mitad de los animales vertebrados y plantas perderían gran parte de sus hábitats.
-Habría menos ondas de calor, aguaceros y sequías.
-La capa de hielo de la Antártida occidental podría no llegar a un derretimiento irreversible.
-Y podría ser apenas suficiente para evitar que la mayor parte de los arrecifes de coral del mundo se mueran.
“Para algunas personas esta es una situación de vida o muerte sin lugar a duda” , dijo Natalie Mahowald, climatóloga de la Universidad de Cornell y una de las autoras principales del reporte.
Limitar el calentamiento a medio grado a partir de ahora significa que el mundo puede mantener una ‘semblanza’ de los ecosistemas que tenemos. Añadir otro medio grado -la meta de los líderes mundiales- significa, en esencia, una Tierra diferente y más desafiante para la gente y las especies, señaló otro de los autores principales del reporte, Ove Hoegh-Guldberg, quien también es director del Instituto de Cambio Global de la Universidad de Queensland, en Australia.
Sin embargo, cumplir con la meta más ambiciosa de un menor calentamiento requeriría un recorte inmediato en las emisiones de gases que atrapan el calor, así como cambios drásticos en el sector energético. Aunque que el panel de la ONU dijo que técnicamente es posible, vio poca probabilidad de que vayan a ocurrir los ajustes necesarios.
Un llamado a la acción
El mundo deberá emprender transformaciones “rápidas” y “sin precedentes” en sectores como la energía, la industria o las infraestructuras si quiere limitar el alza de las temperaturas a 1,5ºC, aseguran los expertos de la ONU.
“Cada pequeño episodio de calentamiento adicional importa, sobre todo porque superar los 1,5ºC aumenta el riesgo de cambios profundos o incluso irreversibles, como la pérdida de algunos ecosistemas”, explica Hans-Otto Pörtner, copresidente de esta reunión del Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC por sus siglas en inglés), en la que participaron investigadores y representantes de los Estados.
Si el calentamiento "sigue creciendo al ritmo actual" por culpa de las emisiones de gas de efecto invernadero, se alcanzará un alza de las temperaturas mundiales de 1,5ºC "entre 2030 y 2052", señala el informe basado en más de 6.000 estudios.
Y si los Estados se ciñen a los compromisos de reducción de emisiones que presentaron en el acuerdo de París sobre el clima, en 2015, la subida de las temperaturas será de 3ºC a finales del siglo XXI.
¿Qué se puede hacer para evitar ese escenario, teniendo en cuenta que las emisiones mundiales vinculadas a las energías volvieron a crecer en 2017?
Para el IPCC, las emisiones de CO2 deberán caer en un 45% de aquí a 2030 para limitar el calentamiento a 1,5ºC, y el mundo deberá alcanzar en 2050 una "neutralidad de carbono", es decir, que tendrá que dejar de emitir más CO2 del que se retira de la atmósfera.
Los expertos de la ONU piden a todos los sectores implicados que lleven a cabo "una transición rápida" y de una magnitud "sin precedentes" para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.
Insisten en la energía, ya que el carbón, el gas y el petróleo son responsables de tres cuartas partes de las emisiones, y proponen varios escenarios que incluyen distintas acciones posibles.
"El informe da a los responsables políticos la información que necesitan para tomar decisiones para luchar contra el cambio climático sin olvidar las necesidades de las poblaciones", explica la sudafricana Debra Roberts, otra copresidenta de esa reunión, que considera el informe como "un llamamiento a la coordinación".
"Los próximos años serán los más determinantes de nuestra historia", asegura.
Su colega francesa, la climatóloga Valérie Masson-Delmotte, que también estuvo en Corea del Sur, cree que el informe deja un "balance lúcido y difícil: la política de los pequeños pasos no basta".
"Si no actuamos ahora, nos dirigimos hacia un mundo en el que estaremos siempre gestionando crisis", afirma. "La buena noticia es que hay acciones en curso en el mundo, pero habría que acelerarlas para tener transiciones suaves. La verdadera pregunta es esta: ¿estará la gente dispuesta a actuar y habrá bastante voluntad política colectiva?".
"No estamos condenados a un alza de 3ºC", opina el climatólogo Myles Allen. "Estamos ligados a nuestras acciones pasadas, pero todo es posible en el futuro", dice el investigador británico.
La Alianza de los Pequeños Estados Insulares, que presionó para lograr el objetivo de +1,5ºC en el acuerdo de París, ha llamado este lunes a "las naciones civilizadas a tomar sus responsabilidades aumentando sus esfuerzos para reducir las emisiones".
“El informe muestra que solo nos queda una oportunidad, muy pequeña, para evitar daños impensables para el sistema climático que nos hace vivir”, dice Amjad Abdula, representante de los pequeños países insulares. “Los historiadores observarán estas conclusiones como un momento clave en la historia de los hombres”.