Mazatlán, México. El poderoso huracán Willa, de categoría 4 en la escala Saffir-Simpson de 5 y considerado potencialmente catastrófico, ya afectaba con sus bandas nubosas las costas del Pacífico mexicano, que se preparaba para el embate del ciclón al caer la noche.
Según el boletín de las 15 GMT (9 a. m. hora de Costa Rica) del Centro Nacional de Huracanes (CNH) de Estados Unidos, con sede en Miami, Willa se localizaba a 55 km de las islas Marías con vientos sostenidos de 205 km/h y se desplazaba a 9 km/h por hora.
“El centro de Willa pasará sobre las islas Marías dentro de pocas horas y tocará tierra continental en la zona de alerta” del Pacífico norte mexicano, advirtió el CNH.
En ese archipiélago se localiza la isla Madre, una cárcel sin muros, pero rodeada de tiburones donde viven, según la prensa mexicana, unos 1.000 reos, algunos con familiares.
La Secretaría de Gobernación (Interior) no ha respondido las solicitudes de la AFP sobre el número de personas en la isla Madre y las previsiones o evacuaciones que se hayan realizado ante Willa.
El Gobierno Federal instaló el Comité Nacional de Emergencias para dar seguimiento al fenómeno, que se espera toque tierra en la tarde-noche de este martes en un punto del sur del estado de Sinaloa, cerca del vecino Nayarit, declarados en alerta naranja.
El lunes al mediodía, Willa alcanzó la categoría 5, pero por la noche bajó un escalón, y aunque se anticipa un mayor debilitamiento en las próximas horas, “se espera que sea un peligroso huracán mayor cuando toque tierra”, señaló el CNH.
Primeros avisos
El sur de Sinaloa amaneció nublado y con una ligera llovizna mientras más al sur, en los estados de Colima y Jalisco, se presentaban lluvias muy fuertes, según el Servicio Meteorológico mexicano (SMM).
En la zona de potencial impacto hay pequeñas comunidades, mientras que unos 100 km al norte se localiza el puerto turístico de Mazatlán, en el estado de Sinalioa, con unos 500.000 habitantes y que amaneció nublado.
Willa interactúa además con la depresión tropical Vicente, que está por tocar tierra en el puerto de Lázaro, provocando lluvia y oleaje en las costas de Michoacán y Guerrero.
Puerto #Vallarta right now, Hurricane #Willa.#PuertoVallarta en estos momentos, #HuracanWilla. pic.twitter.com/xDha4dPOiZ
— Israel Andalón (@iandalon) October 23, 2018
Por la mañana, en Mazatlán un ligero viento ya agitaba las palmeras y en la playa había algunos turistas que miraban el mar revuelto en medio de una llovizna, constató un equipo de la AFP.
En los hoteles, trabajadores protegían las ventanas colocando maderas mientras que al abrir sus puertas los centros comerciales empezaron a recibir pobladores que buscaban abastecerse en previsión de la llegada de Willa.
"Compramos para abastecer a la familia: agua embotellada y alimento no perecedero o cosas que se puedan comer rápido", dijo a la AFP Roberto Carlos, obrero de 45 años casado y con dos hijos.
En pequeños comercios y viviendas se colocaban cintas cruzadas para proteger ventanas además de que se retiraban distintos objetos de los techos para evitar salgan despedidos por los vientos.
En los estados afectados por el fenómeno, y donde apenas amanecía, se mantiene la suspensión de clases y los albergues empiezan a recibir a habitantes y turistas desplazados de zonas de riesgo.
En setiembre, amplias zonas del Pacífico mexicano fueron afectadas por intensas lluvias que dejaron al menos 15 muertos.
A ese saldo se sumaron la semana pasada otras 11 víctimas -entre ellas, siete menores- por inundaciones en Oaxaca, en la costa del Pacífico sur.