La falta de un permiso pone en duda la remodelación de la plaza de la Diversidad y la construcción de la Casa Estudiantil, valorada en $14,5 (¢8.700 millones), en la Universidad Nacional (UNA), en Heredia.
Alberto Salom, rector de esa casa de enseñanza, explicó que el jueves por la tarde, luego de comparecer ante los diputados, se enteró de que la Universidad no cuenta con una autorización que debe dar el Colegio Federado de Ingenieros y Arquitectos (CFIA).
Esta, según él, podría ser una razón de oportunidad o legalidad contemplada en la Ley de Contratación Administrativa, para revocar la adjudicación antes del plazo de 10 días hábiles, el cual se cumple el martes 23 de octubre.
Según el rector, anteriormente no tenía conocimiento de esa posibilidad porque no interviene en los procesos licitatorios.
"Ayer (jueves) por la noche, después de la comparecencia, me enteré de que no están los permisos del Colegio Federado de Ingenieros y Arquitectos listos. Parece que es un tema de Bomberos.
LEA MÁS: Diputados piden a rector de UNA frenar inversión de $14 millones para remodelar plaza y otras obras
“Los Bomberos exigen ahora unos rociadores muy especializados que están ligados a un software y nosotros no tenemos eso; o sea, que la Universidad no lo puede aportar. Entonces, habría que contratar una empresa. Ahí se presenta un elemento de legalidad, que yo siempre he creído que estaba difícil de encontrar. Pero yo no soy el que decide, sino el proveedor de la Universidad”, explicó Salom.
El jueves por la tarde, Salom compareció ante los diputados de la Comisión de Ciencia, Tecnología y Educación, quienes le pidieron explicaciones por lo que ellos consideran un gasto desproporcionado de la UNA, en un momento de contingencia fiscal.
El rector había indicado en varias oportunidades que se trata de un complejo cultural que ayudará en la formación de los estudiantes. Además, que esta inversión fue planificada por al menos tres años.
Salom se amparó en que echar marcha atrás podría generar el pago de una indemnización mayor a la empresa adjudicada, Edificadora Centroamericana Rapiparedes S. A. , que ya había tenido otros contratos con la UNA, en el 2015 y en el 2016.
“Yo he pensado, conforme me comprometí ayer con los diputados, que podría ser una circunstancia para ralentizar este proceso y someter de nuevo al interior de la Universidad la evaluación. Si me pregunta, yo estoy muy conforme con la obra, quisiera que eso se haga, creo que son recursos bien invertidos para el país”, insistió Salom.
Con esta nueva información del permiso faltante, tendrán que esperar al martes, que se cumple el plazo para la firmeza de la adjudicación, para que la Proveeduría de la Universidad tome la decisión de si declara desierto el proceso o no. Si eso sucede, Salom llevaría a consulta al Consejo Universitario si es viable o no seguir adelante con lo planeado.
“Quiero contribuir a pacificar el país. Y quiero someterlo entonces a consideración del Consejo Universitario, a los decanos, a conversar más allá de a quién le toca. La Rectoría es el organismo que está mandado, de acuerdo con la normativa interna, para ejecutar obra, pero yo quiero discutirlo al interior de la Universidad, a sabiendas de todo el ambiente que se ha producido", comentó Salom.
Eso sí, dijo el rector, lo único que no puede suceder es que los recursos se queden ociosos, en un banco.
Salom tendrá que volver a la Comisión de la Asamblea Legislativa, el próximo lunes a las 6 p. m., para atender más dudas de los legisladores.
Comunicado del rector a la comunidad universitaria
La noche de este viernes, Alberto Salom emitió un comunicado de prensa donde anuncia a la comunidad universitaria la decisión de “reconsiderar” el proyecto.
"La propuesta de planificación que se realiza en el presente, tropieza con una situación fiscal compleja que atenta en contra de la estabilidad económica y social de nuestro país.
"A la luz de esto, han surgido una serie de dudas y cuestionamientos sobre la conveniencia o no de continuar con algunos proyectos que estaban por iniciarse en el corto plazo. En particular las observaciones sobre el sentido de oportunidad y pertinencia se centran sobre el proyecto: “Plaza de la Diversidad y Casa Estudiantil”, licitación pública 2017-000009-SCA.
"Las diversas manifestaciones de desconocimiento que hemos constatado en el contexto nacional nos comprometen más en la actitud de escucha que la UNA siempre ha tenido. Por ello hoy debemos realzar la vocación democrática de los diferentes órganos que conforman la Universidad Nacional, para interactuar más profundamente con la ciudadanía a la que nos debemos. Las dudas razonables externadas, son suficientes para que de manera responsable, en el marco de la autonomía universitaria, reconsideremos la ejecución de este proyecto.
"En paralelo a las consideraciones técnicas, que siempre han primado en forma transparente en la adjudicación de los diferentes proyectos y que son atribución de oficinas técnicas de alto nivel de nuestra institución, hay valoraciones que las trascienden en este caso y nos hacen tomar esta decisión.
“Ante cualquier interés particular debe prevalecer el interés general, la estabilidad y la búsqueda de consensos para poder salir como país de la situación actual; es la hoja de ruta a seguir”.