Cientos de personas de distintos movimientos y organizaciones se sumaron la mañana de este sábado en San José a la denominada 'Marcha por las 2 vidas’, para protestar contra la implementación del aborto terapéutico en el país.
El objetivo de la actividad era promover no solamente la defensa de la vida de los niños no nacidos, sino también de las mujeres que tienen un embarazo no deseado o son víctimas de violación.
“No solo protegemos la vida del niño, sino que sabemos que la mujer también necesita ayuda en ese momento. Ella requiere una ayuda real y no aborto legal. Por eso, lo que se tiene que hacer es un enfoque integral en el que se atiendan la necesidades de esas dos vidas”, afirmó Carlos López, vocero del grupo Democracia en acción.
Además, antes y durante la actividad, se recolectaron firmas para hacer una petición a Casa Presidencial, con el propósito de que se respete el artículo 21 de la Constitución Política y, así, se defienda la vida desde la concepción. La petitoria será llevada a casa presidencial el martes 7 de agosto.
Al concluir la concentración, que salió del parque Central de San José a las 9:30 a. m. y llegó a su destino en plaza de la Democracia minutos después, los organizadores pidieron dinero a los asistentes –que voluntariamente quisieran darlo– para cubrir los gastos de la marcha.
Por convicción
A la movilización asistieron organizaciones que apoyan la causa provida, entre las que se encuentran: Alianza por la Vida, Despierta Costa Rica, Comité Provida CR, Frente Nacional por la Familia CR y Democracia en Acción. También había representación de la Conferencia Episcopal y grupos evangélicos.
Sobresalieron caras conocidas como la de los excandidatos presidenciales Sergio Mena, del Partido Nueva Generación, y Fabricio Alvarado, de Restauración Nacional. La mayoría de los asistentes vistió de celeste, para hacer alusión al “cielo que a todos nos cubre”.
“El primer derecho de un ser humano es la vida” y “no al aborto, sí a la vida”, fueron parte de las consignas que se escucharon durante esta marcha en la que muchos de los participantes caminaron con carteles y banderas de Costa Rica, todos acompañados por el sonido de cornetas y de canciones como Llevas una estrella en tu vientre (de Ricardo Arjona).
“Lo que está en el vientre de la madre es un ser humano y, por lo tanto, hay que proteger su vida”, afirmó Max Vindas, de 46 años, quien fue en compañía de su hijo, Max, de 26 años. “Apoyo estas actividades porque no quiero que se legalice un asesinato. No hay argumento válido para justificar un asesinato, que eso es lo que es el aborto”, añadió el joven.
Con ellos coincidieron Monserrat Arguello, guadalupana de 21 años, y María Isabel Méndez, de 58 años de edad y quien viajó desde San Ramón para manifestar su parecer.
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Al llegar a la plaza de la Democracia, en general, médicos, educadores y civiles explicaron el por qué la vida se inicia desde el momento de la concepción o dieron sus testimonios de cuáles son las consecuencias del aborto.
Uno de los más tajantes fue Mariano Murillo, de Despierta Costa Rica, quien argumentó que antes el Ministerio de Educación Pública defendía la vida, pero que ahora este adoctrina a favor del aborto. “Los documentos eran claros y uno de esos, el más importante, que aún está vigente pero que las autoridades se les olvidó que existe, es la Política de Educación Integral de la Expresión de la Sexualidad Humana. Este documento del 2004 está vigente y establece que la persona es persona desde la concepción. Esta es la única política en Educación Sexual que existe; no hay otra”, aseguró.
La marcha contó con una cantidad considerable de personas, sin embargo, algunos participantes dijeron que la caminata que se realizó en diciembre tuvo mayor asistencia.
Por su parte, Juan de Dios Calderón, uno de los organizadores y representantes del movimiento Frente Nacional, dijo que “fue un triunfo” la participación alcanzada esta vez, a pesar del enfriamiento que ha habido por el tema político y por otros factores que se deben al temor de mucha gente a manifestarse, los cuales, en parte, se deben a la violencia que existe actualmente en Costa Rica.