El gobierno de Costa Rica no reconocerá a Nicolás Maduro como el presidente de Venezuela según lo acordó con los países que integran el Grupo de Lima.
Por esa razón, el país no asistirá a la toma de posesión del segundo mandato de seis años de Maduro el próximo 10 de enero.
No obstante, Costa Rica mantendrá a un encargado de negocios en ese país y no respaldará el aislamiento diplomático a Venezuela, como lo proponen otros países del Grupo como Colombia y Perú, los cuales optaban por el cierre de embajadas.
“Costa Rica considera relevante no contribuir con el aislamiento de los distintos sectores políticos de la sociedad venezolana, manteniendo espacios de interlocución que le permitan a los países interesados en buscar soluciones duraderas a la crisis venezolana, como el nuestro, interactuar con los actores políticos ajenos al régimen y ser garantes de que se respetarán los derechos civiles, políticos y humanos de todos (as) los venezolanos”, argumentó la Cancillería de Costa Rica en un comunicado.
La Declaración del Grupo de Lima se dio este viernes tras una reunión de cancilleres en la capital peruana, en la cual participó la ministra interina de Relaciones Exteriores, Lorena Aguilar.
Como parte del acuerdo, los gobiernos que integran el Grupo instan a Nicolás Maduro a no asumir la presidencia y a que respete las atribuciones de la Asamblea Nacional y le transfiera, en forma provisional, el poder ejecutivo hasta que se realicen nuevas elecciones presidenciales democráticas.
Maduro se declaró ganador de las elecciones presidenciales del pasado 20 de mayo, sin embargo, los integrantes del Grupo decidieron en aquel momento no reconocer su legitimidad por no considerarlo fruto de un proceso libre, justo y transparente.
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Según los países miembros, ese proceso electoral "carece de legitimidad por no haber contado con la participación de todos los actores políticos venezolanos, ni con la presencia de observadores internacionales independientes, ni con las garantías y estándares internacionales necesarios”, señala la Declaración.
En la reunión también participó, vía telefónica, el Secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, quien este miércoles conversó sobre Venezuela con el presidente de Colombia, Iván Duque. Oficialmente, Estados Unidos no es parte del Grupo de Lima.
Este foro fue creado en agosto de 2017 y está conformado por Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Guatemala, Guyana, Honduras, Panamá, Paraguay, Perú y Santa Lucía.
En conjunto, estos países reafirmaron su condena a la ruptura del orden constitucional y del Estado de Derecho en Venezuela.
Además, hicieron un llamado a respetar la integridad, la autonomía y la independencia del Tribunal Supremo de Justicia.
En la Declaración se hizo un llamado a los Estados miembros de la Organización de Estados Americanos a reafirmar su apoyo a la Carta de la OEA y a la Carta Democrática Interamericana, a fin de contribuir al restablecimiento del orden democrático en Venezuela.
Precisamente, la OEA tendrá una sesión extraordinaria del Consejo Permanente el próximo jueves (mismo día que asume Maduro) para "considerar la situación de Venezuela"
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Posted by Organización de los Estados Americanos (OEA) on Friday, January 4, 2019
Venezuela inició en abril del 2017 el procedimiento para retirarse de la OEA, que debería concretarse en abril del 2019, después de haber sido amenazada en varias ocasiones con la expulsión, aunque sin que se haya conseguido nunca la mayoría necesaria de dos tercios para concretar esa medida.
Ante la salida de 2,3 millones de venezolanos desde 2018, según la Organización de Naciones Unidas, el Grupo de Lima renovó el compromiso de brindar asistencia migratoria a estas personas.
Medidas contra Venezuela
Por la crisis política y económica que atraviesa Venezuela, el Grupo de Lima acordó una serie de medidas, entre las que se encuentran la suspensión de la cooperación económica y militar con el régimen de Nicolás Maduro.
También, se consideró reevaluar el estado y nivel de las relaciones diplomáticas con Venezuela.
Cada uno de los países, según su legislación, podría impedir el ingreso a los altos funcionarios del régimen venezolano y hasta congelar sus fondos o activos en el sistema financiero, si los tuvieran. En este punto, Costa Rica no ha manifestado aún con precisión lo que hará.
Además, se prevé la restricción al otorgamiento de préstamos en los organismos financieros internacionales y regionales.
En la Declaración, los países firmantes, incluido Costa Rica, instaron a otros Estados a firmar la petición para que la Corte Penal Internacional investigue la comisión de posibles crímenes de lesa humanidad en Venezuela.
Esa solicitud la firmaron, inicialmente, Argentina, Canadá, Colombia, Chile, Paraguay y Perú el 26 de setiembre.
Costa Rica se abstuvo de firmar y, el 16 de octubre, remitió a la Fiscalía internacional una nota verbal y un comunicado de prensa en el cual el Gobierno expresaba su “apoyo” a la petitoria de los siete países.
En criterio de especialistas en diplomacia, ese acto constituye una de las vías más “informales” que puede usar un país para pronunciarse sobre un asunto de relaciones internacionales.
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Acá puede leer la Declaración del Grupo de Lima completa: