Unas 5.100 trabajadoras domésticas, que laboran en casas por horas, obtuvieron un seguro de Salud y de Pensiones por primera vez en su vida luego de que la CCSS permitió a los patrones asegurarlas a un costo mucho menor.
La reforma anunciada hace un año les permitió a las empleadas acceder a la atención en salud en los hospitales públicos, así como a las incapacidades por enfermedad y a aspirar a tener una pensión del régimen de Invalidez, Vejez y Muerte (IVM).
Un 57% de las mujeres son costarricenses; un 60% tiene entre 31 y 50 años y el 1,3% trabaja para más de un patrono.
La expectativa de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) es finalizar este año con alrededor de 7.000 trabajadoras domésticas aseguradas.
Con el sistema anterior, si un empleador pretendía asegurar a una trabajadora que laboraba por horas, estaba obligado a reportar, como mínimo, un salario de ¢279.000, aunque le pagara menos.
Y por ese salario, el patrono debía pagar a la CCSS unos ¢67.900. Así, por ejemplo, a un empleador que pagaba ¢100.000 al mes, el aseguramiento para su empleada le costaba más de un 70% adicional.
Con la reforma hecha hace un año, la base mínima contributiva bajó a unos ¢139.500, con la cual el patrono paga ¢34.000 mensuales.
El Reglamento para la Inscripción de Patronos y el Aseguramiento Contributivo de las Trabajadoras Domésticas redujo prácticamente a la mitad el costo de aseguramiento para los patronos, quienes antes tenían menos incentivos para proteger a sus empleadas con las coberturas de la Caja.
LEA MÁS: Rige nueva modalidad de aseguramiento para empleadas domésticas que laboran por horas
Antes de la entrada en vigencia de ese reglamento, informó la CCSS, se tenía un promedio de aseguramiento de 204 trabajadoras mensuales. Desde agosto del 2017, ese promedio subió a 478.
Marianne Pérez Gómez, asesora de la Gerencia Financiera de la CCSS, confirmó que la respuesta de la población patronal ha sido satisfactoria, además de que los empleadores han aprovechado la plataforma virtual del Sistema Centralizado de Recaudación (Sicere).
“Uno de los aspectos que se debe destacar es que la mayor parte han sido aseguradas en línea, lo que implica que el patrono que quiere proteger a su servidora lo puede hacer en cualquier momento del día o de la noche, en virtud de que la plataforma opera las 24 horas del día”, informó Pérez.
“El objetivo institucional con esta propuesta es elevar la cobertura de este grupo para que tengan mayor protección de su salud, la posibilidad de tener una pensión en el momento en el que se jubilen, también la posibilidad de tener una incapacidad en caso de enfermedad y ofrecer el beneficio de aseguramiento a sus familiares”, agregó.
Antes de la reforma, la cobertura contributiva en este grupo laboral apenas alcanzaba a un 11%, que corresponde a trabajadoras que cuentan con un patrono inscrito que las tiene registradas. La CCSS espera elevar ese porcentaje a un 40% de aquí al 2021.
LEA MÁS: Cobro de CCSS hace difícil dar seguro a un empleado ocasional
De acuerdo con datos de la Caja, un 70% de las 170.575 trabajadoras domésticas que hay en el país laboran en jornadas parciales (por horas, en casas), con un salario tres veces más bajo al reportado para el sector privado.
Un 94% de ellas son mujeres y solo un 30% tienen alguna garantía laboral (seguros, vacaciones y aguinaldo).
El salario promedio de las trabajadoras domésticas es de ¢127.326. En el caso de los hombres que se dedican a este oficio, el ingreso mensual asciende a ¢145.461.
Patronos múltiples
De los principales resultados que se han registrado tras la entrada en vigencia del reglamento, está el aumento en el número de patronos múltiples que aseguran a estas trabajadoras.
Una gran mayoría de estas mujeres labora jornadas parciales en diferentes casas.
"La tendencia de trabajadoras domésticas con más de un patrono es al alza. Antes de agosto de 2017, el porcentaje se mantenía en 0,8% del total. A partir de agosto, se observa un crecimiento que alcanzó, en enero del 2018, el 1,3% y es el mismo comportamiento mes a mes.
“Se espera que esto continúe al alza y sean cada vez más las trabajadoras domésticas aseguradas por todos sus patronos, lo cual les beneficia en el monto del salario total, que se traslada a su cuenta individual en el seguro de Invalidez, Vejez y Muerte (para pensionarse)”, afirmó la Gerencia Financiera por medio de la oficina de prensa de la Caja.
"La verdad, nos ha ido muy bien porque son compañeras que antes no podían tener acceso a su seguro, ni a renovar su cédula y esta reforma les ayuda a proteger más sus derechos.
“Todavía la Caja debe reforzar la parte tecnológica, porque hemos tenido personas que quieren asegurar a sus empleadas y el sistema se les pega. Esto los desmotiva y ya no las aseguran”, dijo Carmen Cruz, presidenta de la Asociación de Trabajadoras Domésticas (Astradomes).
Las denuncias que antes recibían por falta de aseguramiento cayeron, y aumentaron las consultas de patronos interesados en dar este beneficio a sus empleadas, dijo Cruz sin especificar las cifras.
Para este año, la Gerencia Financiera procura que otras entidades, como el Instituto Nacional de Aprendizaje (INA), el Instituto Nacional de las Mujeres (Inamu), y el Ministerio de Trabajo diseñen otras estrategias de promoción, capacitación e incentivos para elevar los niveles de aseguramiento de esta población laboral.
También se plantea alianzas estratégicas con el sector privado.
El aseguramiento de estas trabajadoras forma parte de una estrategia de la CCSS junto a otras instituciones para mejorar la protección de grupos vulnerables.
Recientemente, la Junta Directiva de la Caja aprobó el reglamento que permitirá asegurar a los recolectores de café durante los cinco meses que dura la temporada de cosecha.
Se espera que los beneficios de esa reforma se ejecuten en la próxima temporada de recolección de café.